Chad

Sangre en África

9 de febrero de 2008

El conflicto en Chad podría pasar del mero intento de unos rebeldes por tomarse el poder a la fuerza, a desestabilizar a toda una región. Las acusaciones de que el gobierno de Sudán apoyó la revuelta para derrocar al presidente Idriss Deby, han puesto tensas las relaciones entre los dos países. El gobierno de Deby anunció que una vez el ejército controló la situación, los rebeldes huyeron al oriente y se refugiaron en la frontera con el vecino país; pero desde Jartum, la capital sudanesa, se negó toda participación en los hechos. Este no es un conflicto menor, ya que internamente ambos países mantienen una inestabilidad constante que, de atravesar las fronteras, causaría más derramamientos de sangre. El ambiente en Chad se caldeó cuando antiguos colaboradores del Presidente lideraron una arremetida en la capital, Yamena, para derrocarlo después de 18 años de mandato que ha mantenido con la ayuda de Francia. Los enfrentamientos dejaron un número indeterminado de muertos y más de 20.000 refugiados que huyeron a Camerún.