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ALTA TENSION

En momentos en que el presidente Andrés Pastrana les solicita una tregua de Navidad las Farc
responden con una ofensiva terrorista.

El viernes pasado el presidente Andrés Pastrana sorprendió al país cuando en tono enérgico
afirmó desde la Escuela Militar de Cadetes que la zona de distensión, otorgada por el gobierno a las Farc
para las negociaciones con ese grupo subversivo, no podía convertirse en territorio de guerra y que, por el
contrario, debía ser una zona de paz. Para muchos sus palabras fueron un espaldarazo a las denuncias de los
mandos militares en el sentido de que desde dicho territorio salieron las columnas guerrilleras que atacaron
cinco municipios del Huila y Tolima, así como los frentes que intentaron tomarse a Puerto Inírida, en el
Guaviare.Desde que se iniciaron las conversaciones con las Farc Pastrana sólo ha subido el tono para
referirse a ese grupo insurgente en dos ocasiones. La primera fue durante la instalación de las actuales
sesiones del Congreso, cuando declaró que se le estaba acabando la paciencia ante el accidentado
desarrollo de las conversaciones con las Farc. Y la segunda fue el viernes, cuando consideró que la
respuesta a su propuesta de un cese al fuego navideño fue injustificada.En ambas oportunidades las
respuestas de las Farc a Pastrana no se hicieron esperar. En esta ocasión fue Raúl Reyes el encargado.
En declaraciones a RCN Televisión afirmó que las Farc no estaban presas en la zona de distensión y que la
denuncia de las Fuerzas Militares sobre la presunta organización de los ataques guerrilleros desde la
zona de distensión era "un montaje del Ejército para acabar con el proceso de paz". Reyes dijo, además,
que su organización estaba en capacidad de entregar los cinco municipios que hacen parte del despeje
cuando Pastrana así lo considere.Estas declaraciones llevaron al comandante de las Fuerzas Militares,
general Fernando Tapias, a terciar. "Si las Farc dicen que no es cierto que hayan preparado todas sus
ofensivas terroristas desde la zona de distensión entonces ¿por qué no dejan que una comisión de verificación
visite la zona y compruebe la veracidad de nuestras afirmaciones?", declaró el oficial a SEMANA.La
escaladaNo es la primera vez que las Fuerzas Militares denuncian la mala utilización de la zona de
distensión. Ya lo ha-bían hecho en julio cuando las Farc iniciaron una ofensiva contra Bogotá que terminó
en enfrentamientos en Gutiérrez (Cundinamarca). Lo mismo sucedió esa vez con Puerto Rico y Puerto
Lleras, en el Ariari, donde murieron cerca de 200 subversivos, según las Fuerzas Militares.En esta oportunidad
los informes de Inteligencia habían reportado desde hacía varios días una gran concentración de guerrilleros
en la zona de distensión, los cuales se movilizaban hacia Huila y Tolima. Según los mismos informes la
intención de las Farc era tomarse por primera vez una capital de departamento _después de su fracaso en
Mitú_ y gol-pear al Ejército y a la Policía justo al comienzo de las negociaciones de paz.Según los mandos
militares, los frentes de las Farc que salieron de la zona para atacar a Villarrica, Prado y Dolores, en el
Tolima, fueron el 53 y el 55, así como el llamado 'Che Guevara'. Estos frentes fueron asistidos, según el
Ejército, por los frentes 21 y 25 del llamado Comando Conjunto Central.Los ataques a Puerto Inírida, en el
extremo más oriental del país, fueron realizados por los frentes 'Juan José Rondón' y el Bloque Móvil, los
cuales, según voceros militares, también se desplazaron desde la zona de distensión. Estos habrían sido
apoyados por los frentes 16 y 39, provenientes del Vichada.Los informes de Inteligencia del Ejército fueron
confirmados el viernes por 'Miller', un guerrillero de las Farc que habría participado en los ataques en Huila
y Tolima. 'Miller' relató que, efectivamente, hacía parte de uno de los frentes que fueron entrenados en la
zona de distensión, uno de los cuales estaba al mando de 'Romaña'. "Después de atacar a Villarrica salimos
hacia Uribe cuando empezamos a sentir la respuesta del Ejército", dijo 'Miller' a oficiales del Ejército
momentos después de desertar.Al cierre de esta edición aún seguía sin conocerse el reporte final de la
escalada subversiva. Según fuentes militares, cerca del municipio de Colombia (Huila), cuando se dirigían
hacia la cordillera para regresar al área de distensión, fueron interceptados por la Fuerza Aérea seis
vehículos que transportaban cerca de 40 subversivos. En la desembocadura del río Inírida, las tropas
destruyeron un planchón en el que viajaban 30 guerrilleros hacia Inírida, según los organismos de seguridad.
En Coco, cerca de Puerto Inírida, habrían muerto 30 subversivos.Según las mismas fuentes, al
noroccidente de Puerto Inírida la Fuerza Aérea bombardeó uno de los campamentos madre de las Farc. En
la acción murieron cerca de 70 subversivos, según fuentes militares. Hasta ahora no se conoce el número de
bajas del Ejército. Pero al número de víctimas se suma un elemento delicado para la suerte del proceso de
paz: la utilidad que estaría prestando la zona de distensión. El alto comisionado Víctor G. Ricardo dice que
gracias a dicha área es que se ha podido llegar a una mesa de negociación y que ahora es mejor ser racional
que pasional pese a la gravedad de la ofensiva guerrillera. Otros analistas se oponen a su vigencia. Para
ellos la zona de distensión, aunque bien intencionada, se está prestando para su mala utilización por las
Farc. Todo hace pensar que el debate apenas empieza y que este podría ser tan polémico como los del
Batallón Cazadores y la Comisión de Verificación.