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llega ex jefe paramilitar Hernán Giraldo
llega ex jefe paramilitar Hernán Giraldo | Foto: suministrada a Semana

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Así fue la llegada a Colombia de Hernán Giraldo, el mayor depredador sexual del paramilitarismo

El exjefe de las AUC había sido extraditado en 2008 a los Estados Unidos por delitos de narcotráfico.

25 de enero de 2021

En las últimas horas llegó al país el llamado ‘El Patrón de la Sierra’, uno de los exjefes paramilitares más despreciables del conflicto armado colombiano, dicho por sus víctimas y debido a sus horrorosas prácticas que consistían en violar a menores de edad.

Hernán Giraldo, el exjefe de las AUC conocido como ‘El Patrón de la Sierra’, llegó en calidad de deportado desde Estados Unidos, donde había sido condenado por delitos relacionados con narcotráfico.

“Tras su llegada al país y luego de que Migración Colombia realizó el proceso de control migratorio, Giraldo Serna, quien de acuerdo con las autoridades en su momento fue el jefe del bloque “Resistencia Tayrona” de las Autodefensas Unidas de Colombia, quedará a disposición de las autoridades competentes para su judicialización”, indicó Migración Colombia.

Es de recordar que contra Hernán Giraldo Serna, quien es conocido por las autoridades con los alias de “El Patrón”, “El Taladro” y “El Señor de la Sierra”, existen dos circulares rojas de Interpol y 46 órdenes de captura en el país.

Alias “El Señor de la Sierra” deberá responder en el país por los delitos de desaparición forzada, homicidio, tortura, secuestro, desplazamiento forzado, terrorismo, acceso carnal violento, prostitución forzada, trata de personas y hurto, entre otros.

Hernán Giraldo Serna fue extraditado el 13 de enero de 2008 a los Estados Unidos por el entonces gobierno del expresidente Álvaro Uribe, quien señaló en su momento que Giraldo y otros exjefes paramilitares que firmaron un acuerdo de paz habían seguido delinquiendo.

Temido violador

Durante más de 20 años fue el amo y señor de la Sierra, dejando una estela de muertes, temor, masacres y, de acuerdo con los hallazgos de la justicia, la violación de más de 200 menores de edad, a algunas de las cuales llevaba hasta sus trincheras y las obligaba a vivir con él como si fueran su pareja; incluso tiene registrados 19 hijos con estas menores, por lo que también le impusieron el alias de “Taladro”.

La condena de Justicia y su Paz en su contra deja en evidencia el aberrante actuar de Giraldo. Entre los 706 hechos delictivos y criminales que se le atribuyen a Giraldo, hay desde secuestros, torturas, desplazamientos, pero lo que tristemente lo hizo célebre fue precisamente esa estela de violencia sexual con violaciones, abortos y embarazos forzados y prostitución forzada, como señala la sentencia. Aunque se habla de más de 200 hechos de este tipo, en la sentencia solo se documentan 38.

Giraldo no es originario del Magdalena, nació en Caldas, en el municipio de San Bartolomé, hace 73 años, y llegó a Santa Marta desplazado por la guerrilla a finales de la década de los 60. Inició como recolector de café, pero rápidamente comenzó su carrera criminal cuando le echó el ojo a la denominada bonanza marimbera con el tráfico de marihuana a los Estados Unidos.

El primer reducto paramilitar que creó Giraldo fue el de los llamados Chamizos, un grupo de “vigilancia privada” que empezó a delinquir en el mercado de Santa Marta y que cobraba extorsiones a los comerciantes a cambio de garantizarles “seguridad”. Pero al poco tiempo se internó en la Sierra Nevada en donde se enfrentó a las guerrillas que le pusieron resistencia; incluso hubo varios atentados de los que salió ileso y, finalmente, asumió el poder en la región por medio del terror generado por varias masacres, entre las que se recuerdan las realizadas en Buritacá y en Perido Aguado.

Su imperio, que inició con el negocio de la marimba, también manejaba el control del contrabando hacia Venezuela en la región y rápidamente migró al negocio del tráfico de cocaína. Para 1995 su grupo ilegal, hasta entonces conocidos como Autodefensas del Mamey, cambiaron de nombre por Autodefensas Campesinas del Magdalena y La Guajira (ACMG) y extendió su poder hasta La Guajira. Nada se movía sin la venia de Giraldo, el “Patrón de la Sierra”.