FARC y gobierno se pronuncian por atentado en Cauca

El pasado sábado 7 de diciembre murieron nueve personas y hubo más de 40 heridos por un ataque de las FARC en Inzá, Cauca. Un día después, esta guerrilla califica el hecho como una “acción armada” que forma parte del conflicto colombiano.

“Es una acción que hace parte de la confrontación que se desarrolla en nuestro país”, dijo en declaraciones a los medios el negociador de las FARC Andrés París, quien recordó que precisamente el objetivo de los diálogos de paz con el Gobierno es poner fin a esa confrontación.

París, alias de Jesús Emilio Carvajalino, definió el atentado como “una acción armada que podemos tipificar dentro de un asalto a una fortificación militar-policial” ubicada en el centro de una población, algo prohibido por el derecho internacional humanitario, según la guerrilla.

Las FARC se refieren de esa manera a la detonación de artefactos explosivos que iban en un carro que vendía cebollas. El ataque iba dirigido a la estación de Policía del municipio Inzá.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 5:00 a. m. del pasado sábado 7 de diciembre el parque principal, mientras los miembros de la fuerza pública dormían. La guerrilla habría lanzado 'tatucos' dentro del teatro del pueblo, el mismo que la Policía utilizaba como estación y, además, estaba una unidad de la Brigada Móvil 29 del Ejército.

En respuesta, el Gobierno realizó un consejo de seguridad en Popayán el mismo día del ataque. Además, el presidente Juan Manuel Santos afirmó que con el atentado terrorista, las FARC buscan presionar para que reduzca las acciones militares, pero advirtió de que no lo hará y que no habrá cese al fuego.

“Tenemos que seguir la ofensiva, no darles un minuto de descanso, no darles un minuto de tregua para que no tengan la capacidad de cometer actos como los que acabamos infortunadamente de ver esta mañana”, manifestó Santos.

Además, el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, anunció que habrá una recompensa de hasta 50 millones de pesos por información que permita la captura de los responsables de este atentado y recordó la recompensa de más 2.500 millones de pesos que el Gobierno ofrece por alias 'Pacho Chino', cabecilla de las FARC que opera en esta región.