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La mujer es atendida en el hospital Simón Bolívar.

BOGOTÁ

Una nueva víctima de ataque con ácido en Bogotá

Se trata de Yenny Marcela Pardo Roa, estudiante de la Universidad Cooperativa. Tiene 29 años de edad.

3 de septiembre de 2015

Mientras en el Congreso está a punto de naufragar el proyecto que endurece las penas contra quienes ataquen con ácido, en Bogotá siguen sucediendo estos aberrantes casos. El más reciente ocurrió este miércoles en la noche contra una joven mujer cuando caminaba por la calle 39 con Avenida Caracas.

Se llama Yenny Marcela Pardo Roa y tiene 29 años. Es estudiante de Administración de Empresas de la Universidad Cooperativa de Colombia y salió de clases en compañía de un amigo, cuando fue atacada por un hombre que le arrojó ácido.

De inmediato Yenny fue atendida sobre las 7:20 p. m. en la Clínica Magdalena, muy cerca de lugar de los hechos, y luego, ante la gravedad del ataque, fue trasladada al Hospital Simón Bolívar, un centro médico ubicado en el norte de la capital especializado en este tipo de casos.

Fuentes del hospital aseguran que la joven estudiante tiene un cuadro clínico consistente en “quemadura de segundo y tercer grados por ácido en el 26 % de la superficie corporal”, reporta el cuadro al que tuvo acceso Semana.com.

Los médicos aseguran que la joven está siendo atendida en cuidados intensivos y se están adelantando todos los protocolos de atención que merece este tipo de casos. 

“Un sujeto, sin mediar palabra, sacó un tarro y le arrojó el líquido sobre ella”, dijo la jefe del grupo de delitos sexuales y ataques con agentes químicos, capitán Diana Carolina García Trujillo. 

El caso más sonado y que se convirtió en símbolo es el de Natalia Ponce de León, una joven de 33 años que en marzo del 2014 fue atacada con ácido por Jonathan Vega Chávez, quien fue capturado a principios de abril de ese mismo año.

El hecho generó indignación y sacó a la luz estas agresiones que no estaban tipificadas. En el Congreso cursa una iniciativa que contempla una pena desde los 150 hasta los 240 meses de prisión para quienes agredan con ácidos, y las aumenta en una tercera parte si las víctimas son niños o mujeres.