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Germán Vargas Lleras. | Foto: Archivo SEMANA

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Partido de Vargas Lleras pone dos condiciones al proceso de paz

Dicen que la negociación no es viable si no hay verdaderos gestos de paz de las FARC y rápidos avances en la mesa de La Habana.

5 de diciembre de 2014

Al vicepresidente Germán Vargas Lleras, uno de los más influyentes del equipo de gobierno del presidente Juan Manuel Santos, se le ha visto por todo el país comprometiéndose con una revolución en infraestructura. Concentrado en ello, ha evitado pronunciarse sobre otros temas nacionales, especialmente sobre el proceso de paz.

Este viernes encabezó la cumbre ideológica de su partido Cambio Radical. Embelesó a sus dirigentes con un discurso de más de una hora en el que con mapa en mano señaló las grandes obras de infraestructura a las que se compromete. En su discurso no hubo una sola referencia a la paz o al postconflicto.

Aunque siempre se ha declarado un escéptico del proceso de paz, pero ha reconocido que en La Habana se ha avanzado más que nunca, la opinión de Vargas Lleras sobre la negociación, más aún después de la crisis generada por el secuestro del general Rubén Darío Alzate, inquietaba a muchos. Desde los congresistas de su partido, hasta a los propios periodistas.

De hecho, en las declaraciones que concedió en Barranquilla al vicepresidente se le preguntó por el proceso de paz. Su respuesta fue “en horas de la tarde el presidente de Cambio Radical Carlos Fernando Galán hará una declaración”. Minutos después Galán fijó la posición del partido en una declaración que, para muchos, recogía la posición del vicepresidente Vargas Lleras.

En el documento, el partido de Vargas Lleras recuerda que siempre ha apoyado el proceso de paz liderado por el presidente Juan Manuel Santos, y considera acertadas las decisiones del mandatario de buscar el fin del conflicto por la vía negociada, de establecer la garantía de los derechos de las víctimas.

Reconocen los avances en la mesa de La Habana y respaldan la decisión de Santos de no ceder ante las pretensiones de las FARC de un cese bilateral, y consideran que las Fuerzas Armadas solo deben dejar de perseguir a los miembros de la guerrilla cuando estos entreguen las armas, se firme el acuerdo definitivo, y se comprometan a renunciar para siempre a la violencia.

Pero el partido de Vargas considera que la crisis que vivió el proceso debe generar un cambio en las negociaciones. Exigen celeridad en los diálogos y verdaderos gestos de paz a las FARC.

Cambio Radical señala que “los colombianos estamos esperando que las negociaciones avancen más rápido y se demuestre con el ritmo de las mismas la intención real de paz de las FARC” y “cuando entramos en la etapa más difícil de la negociación (víctimas y justicia) es cuando las FARC menos demuestran con hechos su voluntad de paz”. Y finalizan diciendo: “si eso no cambia, el proceso de paz no es viable”.