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Al llegar el sábado a Popayán, el Presidente Juan Manuel Santos saludó al ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón Bueno, y al comandante de las Fuerzas Militares, general Alejandro Navas. | Foto: SIG/Andrés Piscov

‘Cano’ hubiera podido hacer la paz conmigo y construir país: Santos

El jefe de Estado agradeció nuevamente a las Fuerzas Militares y a la Policía por el operativo en el que cayó el máximo jefe de las FARC. Insistió también con que la desmovilización es la salida de los guerrilleros que aún quedan.

5 de noviembre de 2011

En una nueva alocución, en la noche del sábado, el presidente Juan Manuel Santos reiteró su invitación a los guerrilleros de las FARC a dejar el camino de las armas y, de igual forma, volvió a felicitar a los efectivos del Ejército y la Policía que participaron en la operación en la que murió el viernes en la noche Guillermo León Sáenz alias ‘Alfonso Cano’.
 
“’Cano’ cayó gracias al valor y la entereza de soldados humildes, grandes colombianos, que no temieron adentrarse en los montes y las selvas para perseguirlo y neutralizarlo. Su caída es, sin ninguna duda, el golpe más importante que se haya dado en la historia de la lucha contra este grupo subversivo”, dijo.
 
En un momento del discurso, Santos Calderón expresó que ‘Cano’ perdió su momento iniciar un proceso que condujera a la reconciliación. “Alfonso Cano dedicó su vida a la violencia y al ataque a sus compatriotas, y perdió la oportunidad de hacer la paz, perdió la oportunidad de construir país, como lo hacemos todos los colombianos con nuestro trabajo”, declaró.
 
Afirmó además que décadas de violencia no consiguieron nada ni mejoraron nada. “Sólo significaron dolor y muerte, sólo ayudaron a perpetuar la pobreza y el atraso”.
 
El presidente elogió la “operación impecable de nuestras Fuerzas Militares y nuestra Policía, basada en un largo y preciso trabajo de inteligencia”.
 
“No fue un golpe aislado, sino el fruto de una estrategia que venimos adelantando por meses y de la perseverancia del Estado y su fuerza pública en la lucha contra las FARC”, añadió. Según cifras que citó, esa estrategia en 2011 ha significado 1.317 guerrilleros desmovilizados, 1.491 capturados y 356 dados de baja.
 
Santos Calderón afirmó también que “las FARC han llegado a un punto de quiebre”, tras casi medio siglo de alzamiento en armas. Así mismo prometió que no aflojaría el paso: “La cúpula de las FARC se va derrumbando como un castillo de naipes. Este certero golpe no será el único, y no es motivo de triunfalismo en el Gobierno ni en nuestras Fuerzas Armadas”.
 
Agregó que “quedan muchos (guerrilleros) todavía, en los rincones de Colombia, que insisten en el camino equivocado de las armas y el terror, y deben saber que también les vamos a llegar”.
 
Reiteró, de igual forma, su invitación a la desmovilización. “A los guerrilleros les digo: el Gobierno no quiere que se derrame más sangre de colombianos en nuestro suelo. El tiempo de las FARC se sigue agotando”, aseveró.
 
A renglón seguido les pidió que “no ofrezcan sus vidas por un proyecto fracasado, por defender a unos jefes intransigentes. ¡Desmovilícense! Porque eso es lo que estamos acabando de derrotar hoy: la intransigencia”.