Cae un nuevo fiscal por extorsionar al alcalde de Sincelejo

Según el laboratorio que lo produce, el Racumín es un producto de alta eficacia para el control de ratas en las casas infestadas. De acuerdo con el fiscal general Néstor Humberto Martínez, también ha sido el elemento principal de la purga que está llevando a cabo en el seno de su institución. En esta ocasión el veneno alcanzó al fiscal Óscar Martínez Monterroza quien fue capturado por haber intentado presionar al alcalde de Sincelejo con una investigación que no existe en su contra. 

La historia que tiene enredado al fiscal delegado ante jueces de circuito comienza en Sucre, en donde presuntamente trató de extorsionar al alcalde de Sincelejo con la ayuda del abogado Larry González Pope, según denunció ante la Fiscalía el padre de la víctima. Ante la amenaza de una supuesta imputación de cargos en el marco de las investigaciones que se adelantan por el cartel de enfermos mentales en la Costa, el padre se acercó a la Fiscalía e hizo un retrato hablado del hombre que les pedía 70 millones de pesos para dar archivo al caso. Días más tarde, se procedió a la captura del antiguo fiscal seccional 10 del grupo de tareas especial del CTI.

El fiscal general explicó que en una transacción que al parecer se llevó a cabo en unas oficinas al norte de Bogotá, Monterroza habría solicitado el dinero al alcalde Jacobo Quessep Espinosa para no imputarle cargos dentro de este escándalo, a través del cual se desangaron recursos de la salud con falsos pacientes.

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En este montaje criminal la Gobernación de Sucre pagó 3.173 millones de pesos por tratamientos para enfermos mentales que nunca existieron con una facturación totalmente falsa realizada en complicidad con cinco IPS locales.

Pero lo insólito del caso es que el alcalde en cuestión no aparecía ni si quiera mencionado en el caso de los enfermos mentales, lo que llevó a Néstor Humberto Martínez a advertir a los ciudadanos para que no caigan en requerimientos falsos de funcionarios públicos que traten extorsionarlos por medio de "celadas".

"No vayan a ser víctimas de requerimientos de imputación que no existen. Nadie esta autorizado para hablar de los procesos de la Fiscalía por fuera de los despachos de la entidad¨, indicó el fiscal. 

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También anticipó que por un tiempo seguirán cayendo fiscales. A las capturas en abril de este año el fiscal delegado ante Tribunal Rodrigo Aldana y en junio el jefe de la Unidad Anticorrupción Gustavo Moreno se suman al medio centenar de funcionarios que responden por diferentes hechos de corrupción. Al respecto Martínez envió una advertencia: ¨El Racumín no se nos ha acabado¨.

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