“Cobardes que les queda grande afrontar la vida”: el mensaje del coronel Vizcaino

SEMANA publicó una serie de pruebas que ha recopilado la familia de Ronal Moreno, capitán del Ejército Nacional, quien decidió quitarse la vida el 26 de noviembre de 2020. Él llevaba más de seis meses denunciando presuntas presiones y acoso laboral por parte de su superior el coronel Álex Giovanni Vizcaíno, comandante del Batallón de Artillería, Batalla de Palacé, en Buga, Valle.

Vea acá la historia completa:

Con la información recopilada, la familia del uniformado boyacense pretende demostrar que el suicidio fue inducido. Varias fuentes consultadas por SEMANA respaldan su versión y entregan detalles de las presiones que, incluso, llegaron a prohibirle al uniformado ver a sus hijos y esposa y prácticamente recluirlo en una habitación del casino del Batallón. “Era como si estuviera preso o secuestrado. Fue ahí cuando empezó a deprimirse. Ya no comía”, fueron algunos de los testimonios.

En medio de las denuncias, un nuevo chat se conoció. Se trata de la conversación entre el coronel Vizcaíno y una de las hermanas del capitán en la que ella le escribía que esperaba justicia divina y que recordara que el respeto se gana dignamente y no por llevar “una insignia hueca de mérito alguno”. A lo que él respondió: “Imagino de qué familia viene este mensaje… ¡puros revendedores!, ah, y cobardes que les queda grande afrontar la vida y poner la cara”.

Con el mensaje, los investigadores del caso pretenden demostrar la manera tan despectiva en la que el alto mando estaría acostumbrado a tratar a las personas. La conversación se suma a los otros testimonios recopilados y que están siendo analizados por la Fiscalía.

“Yo a veces pienso que ese señor Vizcaíno no tiene corazón, cómo va a llamar a la familia de mi esposo de esa manera, y decirles que les queda grande afrontar la vida”, dijo Carolina Castañeda entre lágrimas.

SEMANA consultó al coronel Álex Giovanni Vizcaíno por los hechos y manifestó que él contestó a ese mensaje sin saber a quién se refería porque no conocía el número de teléfono del que le escribieron. Pensó que era un “NN”. Sin embargo, en la conversación, él supone de qué familia se trata.

Para Leidy Moreno, hermana del capitán, nada justifica lo que escribió. Para ella, al escribir “les queda grande afrontar la vida”, demuestra que él se refirió de manera insensible a lo sucedido y, al parecer, sin importarle que lo investigan por los hechos que rodean la muerte del capitán Ronal Moreno.

Vizcaíno señaló que lo enojó ver su nombre mal escrito, “VizCAÍN”, y calificó eso como un insulto a su apellido familiar. Cabe recordar que en contra del comandante del batallón reposan varias quejas, de otros uniformados y civiles que aseguran que han sido víctimas de supuestas irregularidades, presiones y acoso laboral.

Por su parte, Rosa Rodríguez, madre del capitán Moreno, asegura que su familia no es de “revendedores”, como los califica el coronel Vizcaíno, sino que ella con su trabajo duro en el campo del Puente de Boyacá, “y cultivando zanahoria, pude pagarle la carrera de oficial del Ejército a mi hijo, que no son centavos, son millones”. Ella asegura que tanto sacrificio para cumplirle su sueño, hoy no valió la pena: “Con tanto orgullo que lo entregué para que le sirviera a la patria y a Dios y para que me lo entregaran en esas circunstancias”, dijo esperando que según ella se haga justicia.