Congreso será llamado a extras por reforma tributaria

En la noche de este jueves, el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, confirmó que el Gobierno llamará al Congreso a sesiones extraordinarias con el fin de darle el trámite final a la reforma tributaria.
 
Hasta el momento, las plenarias del Senado y la Cámara no han empezado a votar los artículos de la polémica iniciativa y se concentran en la discusión de los impedimentos.
 
Se espera que este viernes se voten 150 artículos que no tienen ninguna discusión, según los parlamentarios.
 
Así las cosas, las extras, solicitadas también por los presidentes de ambas cámaras, Roy Barreras y Augusto Posada, servirán para debatir las 300 proposiciones que dividen las opiniones.
 
Según lo conoció Semana.com, las extras podrían extenderse hasta los días lunes y martes de la próxima semana, tiempo en el que se discutiría la cantidad de proposiciones, y por lo tanto, se llegaría a la conciliación.
 
Este portal también estableció que este jueves creció el ambiente a favor del proyecto, al parecer, gracias al lobby del Gobierno y al mensaje emitido este miércoles por el presidente Santos en una alocución presidencial. Todo parece indicar que comienzan a quedar atrás las resistencias y las tensiones de algunos legisladores.
 
Tributaria: con el fantasma de la reforma a la Justicia
 
En la noche del miércoles, el presidente Juan Manuel Santos tuvo que dirigirse a los colombianos para defender las bondades de la reforma tributaria, el proyecto más controvertido del actual periodo legislativo que está a pocas horas de clausurarse.

Santos, en su alocución, también el dio instrucciones al Congreso de aprobar el proyecto, pero senadores y representantes que mantienen sus reservas frente al proyecto que impondrá nuevas cargas tributarias, temen que se repita el capítulo más escandaloso de la historia reciente en el Capitolio, el de la fallida reforma a la Justicia.

Hace seis meses, y precisamente en las últimas horas de la legislatura, la reforma a la Justicia que era objeto de rechazo por las altas cortes, por los sectores políticos de oposición y por sectores académicos, fue aprobada in extremis y con una serie de micos que por los afanes se les pasaron de agache al Gobierno y a los propios parlamentarios. El resultado, el mayor escándalo político del Congreso en dos años, lo cual le significó al legislativo descender a los mayores índices de opinión desfavorable.

La historia parece repetirse. La Contraloría le sugiere al Gobierno aplazar la discusión del proyecto por considerarlo "regresivo"; las centrales obreras dicen que la "clase media" será la mayor damnificada; el Polo Democrático asegura que la reforma disminuirá tributos a los magnates y los grandes empresarios y se los impondrá a los trabajadores; otros sectores, como el Partido de La U, cuestionan que con el desmonte de los parafiscales a las empresas los grandes damnificados serán el ICBF y el SENA.
 
Ante tantas dudas, varios congresistas han propuesto aplazar para el 2013 la discusión del proyecto, mientras el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría, completa dos semanas batiéndose con los congresistas para desvirtuar las afirmaciones que han impedido la aprobación del proyecto.
 
Quedan dos días hábiles para que los congresistas salgan a vacaciones, y el Gobierno sigue insistiéndoles la aprobación de la reforma tributaria. Sin embargo, el presidente del Congreso, Roy Barreras, le envió un mensaje directo al Ejecutivo en el que le advirtió que la reforma tributaria no se aprobará con afanes.

"El Congreso aprendió del pasado. No tiene ninguna prisa, no va a 'pupitrear' ningún proyecto. La tributaria no se va a convertir en la reforma a la Justicia", dijo Barreras luego de una reunión que sostuvo la bancada parlamentaria de La U con el ministro Cárdenas Santamaría.

Barreras también le aclaró al Gobierno que el debate de la Tributaria se hará a plena luz del día, de frente al país, porque "se tienen que acabar los micos, los pupitrazos, las trasnochadas y los madrugones", al defender la autonomía del Congreso frente a las intenciones del gobierno.

El ministro de Hacienda, sin embargo, se muestra confiado en que antes de la Navidad cumplirá el que fue su principal reto. Pero también admitió que el debate "no se puede hacer con prisas" y que el Gobierno se resignará a que se discuta en sesiones extras. "El Gobierno acomoda su agenda a los tiempos del Congreso y aceptará lo que en su sabiduría disponga". Todo apunta a que el proyecto de reforma tributaria será debatido en sesiones extras.

"Este bebé ya cumplió los nueve meses, entró en etapa de contracciones y tendrá un parto natural", dijo Cárdenas Santamaría.

Aunque el partido de La U se había propuesto el aplazamiento del proyecto para el próximo semestre, el Gobierno parece haber llegado a un acuerdo para que la partido mayoritario decline su propuesta.

Se definió que los presupuestos del ICBF y el SENA serán la inflación más 2 puntos porcentuales con los que el Gobierno pretende garantizar la sostenibilidad financiera de estas dos instituciones, pese a que la reforma desmonta la obligación a las empresas del pago de parafiscales, principal fuente de recursos de las mencionadas entidades.

El movimiento MIRA aprovechó para 'reencauchar' un debate en el que Santos, en plena campaña presidencial, se había comprometido a no desmontar la obligación de las empresas al pago de los parafiscales.

En ese entonces, Santos afirmó: "Creo que no se deben desmontar los parafiscales porque cuando uno hace el costo beneficio sobre esa decisión, resulta que el beneficio es mucho menor que el costo. (…) el beneficio por una sola vez es la creación de 200.000 o 300.000 empleos máximo, en cambio el costo es desfinanciar unas instituciones que están generando mucha prosperidad, ayudando a la creación de empleo, por ejemplo el SENA, es decir que mi posición es no". (Ver video) 

Por eso el senador Carlos Baena le ha pedido "coherencia y sensatez" al presidente Santos. "Los candidatos en campaña llenan de ilusiones a los ciudadanos y luego en la realidad hacen todo lo contrario".

El Gobierno también se comprometió con La U a que las madres cabeza de familia tendrán una beca equivalente al salario mínimo y que no deberán pagar tributos. Y también acordaron el desmonte del IVA para el asfalto, circunstancia que beneficiaría a los constructores, y a la medicina prepagada.

Un día antes el Gobierno se comprometió con el Partido Liberal a que la reforma tributaria no impondrá impuestos a quienes ganen salarios inferiores a ocho millones de pesos, un compromiso clave para el respaldo del tercer partido mayoritario del Congreso.

Roy Barreras se comprometió con los partidos políticos a otorgar todas las garantías en el debate. Han sido presentadas 47 proposiciones en la secretaría del Senado para modificar el proyecto del Gobierno . "Todas serán debatidas con voto nominal y público", asegura.

Barreras también aclara que antes de discutir la Tributaria, el Congreso discutirá con preferencia el Tratado de Libre Comercio con la Unión Europea, además del último debate al proyecto que busca adoptar medidas contra el matoneo escolar.

Todo indica que la Tributaria será debatida en sesiones extras. Alfonso Prada, presidente del Partido Verde, reveló en declaraciones a Caracol Radio que el Ejecutivo ya tendría listo el decreto para convocar a sesiones extras, las cuales serían el 17 y el 18 de diciembre.

Esta sería la segunda vez que el presidente Santos le hace esa convocatoria al Congreso. La primera fue el 22 de junio pasado, precisamente cuando le ordenó al Legislativo "hundir" la reforma a la Justicia por razones de inconveniencia. Con el fantasma por las consecuencias de la aprobación de aquel proyecto, la reforma tributaria entra en su recta final.