CONSTITUCION A PUPITRAZO?

SON ALTAS LAS POSIBILIDAdes de que el último día de funcionamiento de la Asamblea Constituyente, el próximo 5 de julio, los delegatarios no estén formados para que les tomen la foto histórica en que deberían aparecer con el texto ya finalizado de la nueva Constitución. Tal como están las cosas, es posible que ese día los sorprenda, acalorados y sudorosos, teniendo que aprobar a marchas forzadas buena parte del articulado de la carta política que debe entrar en vigencia en esa misma fecha.

Aunque al mirar el calendario se ve que la Asamblea ha recorrido apenas la mitad de su camino, ya existe en muchos sectores entre ellos el Gobierno y los propios asambleístas el temor de que la manera en que se están debatiendo los distintos aspectos de la reforma, haga que los dos meses largos que restan sean muy poco tiempo para evacuar la reforma.

Este problema, sin embargo, no se le puede atribuir a los delegatarios, pues lo que está sucediendo tiene su origen en limitaciones de tiempo o en hechos ocurridos anteriormente.

Cuando el proceso de la Constituyente adquirió forma a comienzos del actual Gobierno, la fórmula que el presidente César Gaviria encontró para