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V I O L E N C I A

De la vida real

El actor John Alexander Ortiz, ‘Nano’ para la mayoría, fue víctima de la violencia que representa en la ficción.

1 de mayo de 2000

El viernes de la semana pasada, en horas de la tarde, la sala de espera del séptimo piso de la Clínica San Pedro Claver, de Bogotá, estaba congestionada. Los familiares y amigos del joven actor John Alexander Páez Ortiz, mejor conocido como ‘Nano’ o ‘Mateo’, los nombres de los personajes más importantes que ha interpretado hasta ahora en televisión, querían saber cómo le había ido en la operación que le habían realizado ese día para extraerle unas esquirlas de bala de la médula espinal. Los abuelos maternos de ‘Nano’, su hermano y su hermana menores, y Juan Carlos Castillo, su mejor amigo, encabezaban la nutrida comitiva. Por parejas se turnaban para entrar a saludarlo. ‘Nano’, visiblemente agotado, apenas miraba a los suyos con los ojos entrecerrados.

Para quienes lo conocen, siempre hiperactivo, alegre y locuaz, es duro verlo en este estado. Pero no se desmoronan, no pueden darse ese lujo frente a ‘Nano’ quien, pese a saber que ya perdió el riñón derecho, está convencido de que va a volver a caminar. El miércoles pasado el joven de 20 años lloró de la emoción de poder mover una pierna. ‘Nano’ tiene fe y esperanza, aseguran los que lo han acompañado todo el tiempo en el hospital



Violencia mezquina

‘Nano’ fue baleado en la madrugada del domingo 26 de marzo cuando salía en compañía de por lo menos 20 amigos de Blue, un sitio especializado en música rap que esa noche fue reinaugurado y a donde habían asistido a celebrar un cumpleaños. Juan Carlos Castillo, el amigo de ‘Nano’, dice que llegaron al lugar como hacia las 10:30 de la noche y se tomaron sólo dos cervezas porque “no había presupuesto”. ‘Moncayo’, ‘Riquelme’ y ‘el Flemas’, tres jóvenes con los que el actor había discutido dentro del lugar, lo esperaron a la salida y desde un vehículo Corsa de color verde lo atacaron mientras esperaba un bus en la avenida Caracas. ‘Moncayo’ fue, según le contaron los testigos a las autoridades, quien disparó en tres oportunidades. Dos de los tiros alcanzaron a ‘Nano’. Era la 1:30 de la madrugada.

El caso del actor es uno más de los tantos incidentes de violencia juvenil urbana que tienen lugar en el país. Llamó la atención sobremanera debido a que la víctima es un personaje de la televisión cuyo personaje actual, Mateo, es miembro de la pandilla Los Cuajados. Mateo en la serie Pandillas, guerra y paz es un muchacho díscolo encargado de venderle droga a los alumnos de su colegio. Por esta razón, en un comienzo, los familiares sospecharon que el intento de homicidio estaba relacionado con el trabajo de ‘Nano’.

El lunes 27 de marzo Fredy Ordóñez, compañero de reparto de ‘Nano’ en el dramatizado, en el cual interpreta a un pandillero de nombre ‘Javier’, visitó al joven en el hospital. Se saludaron y Fredy le dijo: “Fresco chino. Valor que de esta va a salir”. Ese mismo día, en horas de la tarde, la Policía capturó en el barrio Santa Fe a Víctor Manuel Guerrero, de 25 años, conocido con el alias de ‘el Flemas’, el conductor del Corsa desde el que le habían disparado a ‘Nano’. Guerrero, según constataron las autoridades, había estado detenido seis meses en La Modelo en 1998 por lesiones personales. En su poder hallaron la pistola 9 milímetros sin salvoconducto con la que hicieron los disparos y el Corsa verde, de placas DBB-328, con rastros de pólvora. ‘Moncayo’, que al parecer tiene 17 años, y ‘Riquelme’, de 20, están huyendo.

Guerrero les contó a las autoridades su versión sobre lo que había ocurrido en Blue y luego a la salida de este lugar. En sus propios términos la conclusión a la que llegó, palabras más, palabras menos, es que todo el asunto no fue más que una pelea de borrachos que se les salió de las manos. Como quien dice, una violencia mezquina casi acaba con los sueños de ‘Nano’ de estudiar cine y televisión, con su talento para jugar fútbol en Artistas Club, su afición por el patinaje extremo y el rap de Ice Cube. De nuevo la realidad superó la ficción.