Declaración de la Cumbre, aún sin consenso

El presidente Juan Manuel Santos y su canciller María Angela Holguín tratan a esta hora de buscar un acuerdo para salvar la declaración final de la VI Cumbre de las Américas.

La reunión de los 30 jefes de Estado está en crisis. La delegación de Argentina ya abandonó Cartagena horas antes de la clausura y luego de que Cristina Kirchner posara para la foto oficial. Así lo confirmó Jorge Arguello, embajador de ese país en Estados Unidos a través de su twitter: "partimos de regreso a Buenos Aires. Misión cumplida", trinó. 

Luego un comunicado oficial de la presidencia de ese país sostuvo que "el veto de los Estados Unidos y Canadá a un texto sobre Cuba había terminado con la negociación de una declaración final" y que "en el otro tema central de la cumbre, como es el debate sobre las drogas y su despenalización, tampoco se alcanzaron consensos entre los países, lo que supuso otro escollo más para la firma de una declaración final de la VI Cumbre de las Américas".

El canciller de Argentina Héctor Timerman dijo además a medios de su país que la VI Cumbre de las Américas  no contará con una declaración final porque Estados Unidos se empecinó en negar que Cuba participara en las próximas Cumbres. "No hay declaración porque al vetar Estados Unidos el artículo sobre Cuba se cayó toda la declaración. En estas Cumbres si un país veta no hay nada que hacer", dijo.

Extraoficialmente se supo que también la delegación de Bolivia se levantó de las discusiones y abandonó el Centro de Convenciones. Además de los temas de Cuba y la politica antidrogas, se vetó también la reclamación argentina sobre las Malvinas, asuntos cuya ausencia en la declaración final es inaceptable para Bolivia y Argentina.

El presidente Evo Morales, después de la sesión a puerta cerrada de los presidentes de la región, declaró en una rueda de prensa el sábado en la noche, que la negativa de Estados Unidos a pronunciarse a favor de la región en temas como Cuba y las Islas Malvinas, "está desintegrando a Suramérica y al Caribe".

El mandatario boliviano dijo además: "¿Qué más vamos a debatir mañana (domingo) si Estados Unidos no quiere tocar temas como Cuba y Malvinas?" y subrayó que "Estados Unidos y Cuba en algo se parecen porque ambos mandan tropas a otros países. Cuba las manda para la asistencia médica. Estados Unidos manda tropas pero a acabar con vidas. Esa es la gran diferencia".

Desde el principio Estados Unidos mantuvo una posición inflexible sobre Cuba, en contravía de las naciones del bloque del Alba (como Bolivia y Venezuela) y de Argentina, Brasil, Colombia y Perú.  La soberanía argentina sobre las Malvinas, otro tema sensible en América Latina, era también respaldado, según el canciller venezolano Nicolás Maduro, por todos los países del continente salvo Estados Unidos y Canadá. En su discurso del sábado, Santos dijo que "sería inaceptable" otra cumbre sin Cuba, pero no mencionó a las Malvinas.

Lo que podría pasar es que la VI Cumbre emita una declaración final, sin las firmas de varios Estados de la región. Aunque se sabía que Malvinas, Cuba y la guerra contra las drogas eran temas polémicos, la Cumbre podría terminar como muchos se lo imaginaban: muchas discusiones y discursos bien intencionados, pero pocos resultados concretos.

Como dijo el presidente de Uruguay José Mujica hace unas horas, eso "era previsible" y la Cumbre "va a tener coincidencias en puntos bastante obvios" como la desigualdad, la pobreza y el desarrollo.

Los que no quedaron en la foto

La segunda y última jornada de la VI Cumbre de las Américas que comenzó este domingo en Cartagena a puerta cerrada, estuvo protagonizada por una foto de familia de los presidentes y primeros ministros con varios "huecos".

Los participantes en la Cumbre posaron para los fotógrafos en la explanada del Centro de Convenciones de Cartagena y después entraron al edificio sin hacer declaraciones.

En el retrato de familia aparecen 31 presidentes, primeros ministros y cancilleres, colocados de manera desordenada, que se limitaron a saludar con la mano.

No estaban entre ellos los presidentes de Venezuela, Ecuador, Nicaragua, Haití y Perú, que por diversos motivos o no llegaron nunca a esta ciudad o partieron ya. El mandatario Ollanta Humala regresó a su país a hacerle frente a el secuestro de 36 trabajadores en las cercanías a Cusco por parte del grupo guerrillero Sendero Luminoso.

Con EFE