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El fugitivo

Un buscado narcotraficante cubano, que hace una década fue miembro de los Pepes, fue capturado por la Policía colombiana con los mismos métodos con los que cayó entonces Pablo Escobar.

15 de septiembre de 2003

Alex de Cubas no tenIa razones para creer que su carrera delictiva terminaría. Al fin de cuentas, a pesar de que por 13 años lo persiguieron sin descanso la DEA, el FBI y el Servicio de Aduanas de Estados Unidos, siempre logró burlarlos. Este cubano, nacionalizado estadounidense, es considerado como uno de los más peligrosos y escurridizos delincuentes del mundo y su nombre ha figurado por años en las listas de los fugitivos más buscados internacionalmente por la justicia. Sin embargo el pasado 2 de septiembre la suerte lo abandonó en una tranquila calle de Medellín, en donde fue capturado por la Policía colombiana.

De Cubas era buscado por tráfico de cocaína, conspiración para distribuir droga en Estados Unidos y está sindicado de haber asesinado, hace cerca de 12 años, a un agente de la DEA en Puerto Rico durante una operación encubierta realizada por esa agencia contra la organización que lideraba el cubano desde la isla.

Tras el homicidio del agente de la DEA, y para escapar de la persecución de las autoridades estadounidenses, el cubano le pidió ayuda y protección al narcotraficante colombiano Félix Antonio Chitiva, a quien había conocido a finales de los años 80. De Cubas viajó a Colombia y cuando llegó al país Chitiva lo acogió junto con su socio, el también narcotraficante Micky Ramírez. Por ese entonces Ramírez y Chitiva, junto con otras personas, hacían parte del grupo conocido como los Pepes (Perseguidos por Pablo Escobar) y libraban una cruenta guerra en contra del ex jefe del cartel del Medellín. De Cubas, rápidamente, no sólo se asoció con Ramírez y Chitiva en transacciones de narcotráfico sino que también se unió a la lucha en contra de Escobar como parte de los Pepes. Según las autoridades durante esa guerra De Cubas colaboró activamente en la capacitación de sicarios en manejo de armas y motocicletas de alto cilindraje.

Con la muerte de Escobar y el reacomodamiento de los carteles de narcóticos De Cubas encontró socios entre los hombres de la nueva generación de capos de la droga en Cali y Medellín. La función específica que desarrollaba el cubano consistía en recolectar la droga y encargarse de enviarla hacia Estados Unidos y Europa. De acuerdo con las autoridades De Cubas fue el pionero en el uso de submarinos artesanales como método de transporte de cocaína por parte de las organizaciones del narcotráfico. De hecho, él fue uno de los artífices del famoso 'narcosubmarino' que estaba siendo construido en el municipio de Facatativá, el cual fue descubierto por la Policía en septiembre de 2000. El aparato iba a ser construido para transportar hasta 150 toneladas de cocaína.

La ironia

La habilidad de De Cubas para 'coronar' cargamentos rápidamente lo hizo muy popular dentro del mundo del narcotráfico colombiano. No obstante esa 'popularidad' fue la que les permitió a las agencias de Estados Unidos recobrar la pista sobre el cubano, la cual habían perdido desde que escapó después del operativo en Puerto Rico. Con la certeza de que el fugitivo se encontraba en Colombia, en mayo de 1993 los estadounidenses presentaron a la Fiscalía General la orden de captura con fines de extradición. A pesar del requerimiento no fue mucho lo que se consiguió. De Cubas cambió por completo su identidad, utilizando una cédula de ciudadanía colombiana con el nombre de Francisco Javier Cruz. Además cambió su apariencia física por medio de varias cirugías plásticas y se realizó injertos de pelo. Esta estrategia, sumada a la protección de varios capos, le permitió vivir tranquilamente en el país durante años y escapar nuevamente de la mira de las autoridades.

Fue sólo hasta 1999 cuando la justicia retomó de nuevo su rastro. A raíz de una serie de decomisos de grandes cantidades de droga en Estados Unidos y Europa, ocurridas durante ese año, las autoridades estadounidenses y colombianas iniciaron unas investigaciones para tratar de establecer quiénes eran los dueños de esos cargamentos. Detectaron que algunos de los envíos de cocaína eran de los hermanos Miguel Angel y Víctor Mejía Múnera, conocidos como los 'Mellizos'. Esta pista los llevó a descubrir a Alex de Cubas, ahora convertido en el nuevo socio de estos narcotraficantes del norte del Valle del Cauca, que también manejan operaciones ilegales en Arauca.

Desde ese momento hombres de la unidad especial de investigaciones de la Dijin comenzaron a seguir la pista del prófugo. Como ocurrió durante la época de persecución a Pablo Escobar, la Policía colombiana inició una verdadera cacería por todo el país para detener a De Cubas. Para capturar al cubano, que había sido enemigo declarado de Escobar, la Policía irónicamente utilizó las mismas estrategias empleadas en la persecución contra el entonces jefe del cartel de Medellín.

Gracias a las investigaciones los oficiales de la Dijin consiguieron el número de uno de los celulares de De Cubas. Con esta información establecieron que se encontraba en la ciudad de Medellín. Fue entonces cuando acudieron a la utilización de equipos especiales de triangulación para localizar el sector en donde se encontraba, los mismos que permitieron ubicar la casa en la que se escondía Escobar el día en que fue hallado hace casi 10 años. Para sorpresa de los investigadores, y como si se tratara de una obra de humor negro, descubrieron que De Cubas estaba refugiado en una casa vecina a la vivienda en donde hace una década fue dado de baja por las autoridades su enemigo Pablo Escobar.

Poco antes de las 5 de la tarde del pasado 2 de septiembre un grupo de oficiales llegó hasta la casa y rodeó el lugar. Unos minutos más tarde de la vivienda salió De Cubas conduciendo un jeep blanco. Los hombres de la Dijin lo siguieron durante varias cuadras y cuando estaba en un sector seguro iniciaron la fase final del operativo de captura, bautizado con el nombre clave de 'Nodriza'. Detuvieron el carro y arrestaron a De Cubas. Al igual que ocurrió con Escobar, una llamada telefónica fue la causante de sellar la suerte de este hombre que por más de una década evadió la ley. Después de su detención De Cubas fue trasladado a Bogotá y en los próximos días será extraditado hacia Estados Unidos.