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A la embajadora de Holanda le preocupa que mientras se define la separación del Ministerio de Ambiente con el de Vivienda, las politicas de minería, tierras y agua se están definiendo sin el liderazgo de esa entidad.

ENTREVISTA

“El gobierno no le presta al medio ambiente la atención que se merece”

La embajadora de Holanda en Colombia, quien representa al principal donante para el Ministerio del Medio Ambiente, afirma que, como están las cosas, su país retiraría la ayuda que le entrega a esa cartera.

12 de marzo de 2011

La ausencia de un componente ambiental fuerte en el Plan de Desarrollo, el avance de la locomotora minera y el proceso de creación del Ministerio de Ambiente tienen a los holandeses pensando en retirar el apoyo que le dan a esta cartera. Su país preside la mesa de donantes y es el mayor cooperante, con diez millones de euros anuales. SEMANA habló con la embajadora Marion Kappeyne van de Coppello.

SEMANA: ¿Por qué su gobierno tiene una presencia tan fuerte en el sector ambiental?
 
Marion Kappeyne van de Coppello: Desde 2007 pusimos en marcha una forma innovadora de cooperación: ofrecerle al gobierno cofinanciar sus prioridades con desembolsos directos al Ministerio de Ambiente. A la fecha, le hemos donado veinte millones de euros.

SEMANA: ¿Y este mecanismo les funcionó?

M.K.C.: Se fortaleció el sistema de Parques Naturales y un millón de hectáreas fueron declaradas áreas protegidas, entre ellas Bahía Málaga. Además, se aprobó la nueva política de manejo integral de recursos hídricos. Pero hay mucho por hacer.

SEMANA: ¿Tiene Colombia una agenda ambiental fuerte?

M.K.C.: No estoy segura. El presidente Santos tiene un discurso muy fuerte y positivo. Pero en varias decisiones, el medio ambiente no ha tenido la atención que merece. Una de las causas es el tiempo que ha tomado la escisión del Ministerio con el de Vivienda.

SEMANA: ¿Es decir que no ven con buenos ojos esa separación?

M.K.C.:
Si el resultado fuera una entidad más fuerte para el medio ambiente, sería muy positivo. Pero resulta que mientras sucede, el país está decidiendo temas como el desarrollo minero y la política de tierras. Esto nos ha hecho pensar en replantear el apoyo que le damos al Ministerio. Creemos que el gran desafío es combinar las locomotoras con la protección del ambiente. Todavía esos dos caminos no se juntan.

SEMANA: ¿Eso lo dice por la locomotora minera?

M.K.C.:
La minería no necesariamente es enemiga del medio ambiente. Pero no puede dañar ecosistemas como los páramos. En el Plan de Desarrollo no se fortalece el otorgamiento de licencias mineras. Por ejemplo, se propone establecer apenas 90 días de plazo para sacarlas, y en la comisión en donde se harían los estudios, el Ministerio de Ambiente sería una voz minoritaria.

SEMANA: Se ha dicho que el componente ambiental del Plan de Desarrollo no es fuerte…

M.K.C.: Es un avance que exista un capítulo, pues la versión inicial no lo tenía. Lo importante es lograr metas ambientales claras y con financiación. El presupuesto para medio ambiente, que relativamente es bajo, queda más o menos igual, pero al mismo tiempo las CAR tienen que financiar cada vez más cosas no ambientales. Por otro lado, en la reforma a las regalías no está aún incluida la propuesta de destinar recursos para el tema.

SEMANA: ¿Usted está diciendo que por esas razones están pensando no seguir cooperando con el Ministerio de Medio Ambiente?

M.K.C.:
Estamos evaluando dónde nuestros euros lograrán mejores resultados. Vemos, por ejemplo, que el Ministerio de Agricultura está trabajando bien para hacer sostenible la producción al ofrecer una alternativa a los cultivos ilícitos. El presidente Santos nos llamó en diciembre para que le ayudáramos con la ola invernal. Vamos a traer expertos para poner nuestro conocimiento en ese tema al servicio de Colombia. Lo que hay que decir es que las riquezas ambientales le dan a Colombia enormes oportunidades. No solamente como conservación, sino como un medio de desarrollo. La transición hacia mercados más verdes ya se está dando y adaptarse a ella puede ser esencial para el futuro de Colombia.