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EL NUEVO No. 1

Con Jacobo Arenas muerto y 'Tirofijo' al borde del retiro,el nuevo dueño de las Farc es el 'Mono Jojoy'. ¿Quién es este hombre frío y sanguinario que tiene en jaque al Ejército?

7 de octubre de 1996

Oscar Riaño o Jorge Briceño Suárez, alias 'Mono Jojoy' es uno de los jefes guerrilleros más respetados dentro de las Farc. Y es que muy pocos de los comandantes de esa organización subversiva pueden decir que nacieron, crecieron y se formaron como insurgentes. Briceño es uno de los hijos que tuvo un guerrillero raso que peleó al lado de Juan de la Cruz Varela, el mítico combatiente de los años 50. Nació en febrero de 1949 y desde niño su vida no ha sido otra que la lucha armada. En ella aprendió a leer y a escribir. Por años vivió al lado de Manuel Marulanda Vélez, 'Tirofijo', quien es considerado su tutor y maestro.
A diferencia de otros jefes subversivos que han llegado a la organización después de cursar estudios superiores y universitarios lejos de los frentes de batalla, el 'Mono Jojoy' aprendió todo lo que tiene que ver con la guerra y prácticamente todo lo que sabe sobre el terreno. Se mueve con facilidad en los departamentos de Cundinamarca, Boyacá y Meta. Son muy pocos los subversivos que conocen la región del Sumapaz como él. "El Mono Jojoy conoce el Sumapaz como la palma de su mano. Ha recorrido a pie esa región desde que estaba pequeño", dijo a SEMANA uno de sus ex compañeros.
La anterior aseveración más que una frase de cajón es una sentencia de guerra. En efecto, desde hace muchos años las Farc han considerado a la región del Sumapaz como la puerta de entrada a Bogotá en las estrategias que han diseñado con el fin de ganar terreno en inmediaciones de la capital de la República. Para cumplir con ese propósito han designado a uno de sus hombres más efectivos en el campo militar. En estos momentos nadie distinto al 'Mono Jojoy' está en capacidad de cumplir con esa misión dentro de las Farc. "El Mono Jojoy, al igual que Marulanda, cree firmemente que es posible entrar triunfante a la Plaza de Bolívar", sostiene su antiguo camarada, que prefirió mantener su nombre en reserva por su condición de reinsertado.
Quienes lo conocen lo definen como un hombre atrevido en la guerra, obsesionado en realizar acciones contra la Fuerza Pública, poco emotivo y parco al hablar. Así como Alfonso Cano siempre ha sido definido como un hombre inteligente pero con limitada capacidad militar, el 'Mono Jojoy' es la otra cara de la moneda: su gran capacidad militar suple su bajo nivel intelectual. En el interior de las Farc hay una frase que dibuja de cuerpo entero a los dos guerrilleros:"Mientras Cano piensa, el Mono actúa". Las primeras acciones del 'Mono Jojoy' como guerrillero fueron en la serranía de La Macarena, en Casa Acuña y en un campamento denominado La Resistencia, ubicado sobre la margen derecha del río Cafre. Luego fue designado como segundo cabecilla del Bloque Oriental, que estaba dirigido en ese momento por Rodrigo Londoño Echeverry, alias 'Timochenko' o 'Timoleón', hoy por hoy uno de los máximos jefes de las Farc.
Como coordinador de las actividades del Bloque Sur demostró gran beligerancia y capacidad en la planeación y ejecución de acciones terroristas contra la Fuerza Pública. Una de sus operaciones más recordadas fue la realizada el 16 de junio de 1987 en la vía San Vicente del Caguán Puerto Rico (Caquetá), donde murieron 27 soldados y 44 resultaron heridos. Desde abril de 1993 es uno de los miembros del Secretariado General de las Farc y es el máximo jefe del llamado Bloque Oriental, el más numeroso de la organización, que cubre los departamentos de Meta, Casanare, Arauca, Guaviare, Vaupés, Vichada, Cundinamarca y Boyacá. Este guerrillero que se caracteriza por vestir siempre con uniforme verde oliva de camuflaje y que muy pocas veces se desprende de su boina negra, es uno de los responsables de la reestructuración interna llevada a cabo dentro de las Farc en los últimos años. Así como Cano se ha encargado de replantear algunos aspectos relacionados con la orientación política de esa organización, el 'Mono Jojoy' ha sido el responsable de lo que podría denominarse el revolcón militar. El 'Mono Jojoy' fue la persona que introdujo la figura de los comandos especializados, muy utilizados en la guerra de Vietnam y que consiste en reunir a los mejores hombres de cada frente para asignarles misiones específicas de altísimo riesgo.
A finales de 1991 se encargó de organizar trabajos de inteligencia en las cuadrillas de las Farc, para evaluar el grado de confiabilidad de algunas de ellas y preparar las llamadas 'operaciones contundentes' contra la Fuerza Pública. Inició acciones de asalto contra la Base de Operaciones de Girasol en la serranía de La Macarena, Dosquebradas, Medellín del Ariari, El Castillo, Puerto Rico, San Carlos de Guaroa, en el Meta, y El Retorno, en el Guaviare. En su afán por la toma del poder, el 'Mono Jojoy' no ha tenido escrúpulos. Es defensor de la aplicación de todas las formas de lucha para la toma del Estado, incluyendo los diálogos con el gobierno como elemento distractor. Ideó la articulación de la economía de las Farc en torno al cultivo y comercialización de la hoja de coca, como medio central para la financiación de esa organización. El Bloque Oriental bajo su mando es, de hecho, el que más ha usufructuado esa práctica ilícita y el que más dinero recauda dentro del grupo subversivo: unos 250.000 millones de pesos al año, según algunos cálculos.
El hecho de consolidar al Bloque Oriental como uno de los más importantes dentro de esa organización le ha dado un mayor protagonismo al 'Mono Jojoy'. Las Fuerzas Militares están convencidas de que este guerrillero es el cerebro militar que ha estado detrás de la cruenta ofensiva de estos días contra la Fuerza Pública. En la actualidad pesa en su contra una orden de captura por los delitos de homicidio múltiple y lesiones personales, proferida por un juez de la República en julio de 1987. La Fiscalía General de la Nación también expidió tres órdenes de captura en su contra por los delitos de homicidio y por la masacre de nueve funcionarios judiciales en Usme (Cundinamarca) en 1991. Habrá que ver si las autoridades logran capturarlo algún día y obligarlo a pagar por su sangrienta hoja de vida.