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CRISIS FRONTERIZA

El ELN apoya a Maduro y ataca a Colombia

Para el grupo guerrillero, Venezuela es víctima de una conspiración entre el gobierno de Estados Unidos y los paramilitares colombianos para desestabilizarla.

31 de agosto de 2015

El pasado viernes las FARC dejaron el silencio y se pronunciaron sobre la crisis fronteriza que viven Colombia y Venezuela. En un corto discurso, el plenipotenciario ‘Jesús Santrich’ aseguró que el país vecino es y seguirá siendo fundamental para la paz y que, por ende, no se podían destruir esos “lazos fraternales”.

La afirmación fue una respuesta a quienes decían, como los expresidentes Andrés Pastrana y Álvaro Uribe, que esa nación debería dejar de ser país garante en el proceso de paz.

Sin embargo, las FARC no se limitaron a responder a la solicitud de retirar al país vecino de los diálogos, sino que además respaldaron los constantes señalamientos del presidente Nicolás Maduro de acabar con los grupos criminales que operan en la frontera. “El cangro del paramilitarismo no puede destruir los lazos de concordia que históricamente, desde la lucha por la independencia, han hecho de Colombia y Venezuela una misma familia”, manifestó ‘Santrich’.

Este lunes, tres días después, el ELN –que actualmente está en negociaciones para instalar una mesa de diálogo con el Gobierno- fue aún más lejos y manifestó su total apoyo a las acciones del mandatario venezolano.

A través de un comunicado, los elenos afirmaron que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) “está en su legítimo derecho de proteger la soberanía venezolana” y que esas acciones no se pueden presentar como xenofobia.

Para el grupo guerrillero, Venezuela ha tenido una “economía más rentable” que atrae a los connacionales, pues Colombia no “ofrece puestos de trabajo, a lo que se suma más de medio siglo de conflicto interno, que no cesa de enviar colombianos al exilio (…) Con la revolución bolivariana se han multiplicado los subsidios y las olas migratorias, sobre todo de Colombia”.

Así mismo, el ELN afirmó que el contrabando de bienes venezolanos “se recrudeció como parte de los planes de desestabilización conducidos desde el ministerio de Guerra de Estados Unidos, donde los paramilitares colombianos han controlado a sangre y fuego este lucrativo negocio (…) Ellos han incentivado para que Venezuela sea usada como ruta de narcóticos producidos en Colombia”.

Esta supuesta conspiración de la que habla el ELN es la que, según ellos, ha lesionado a la sociedad venezolana, tal como lo ha afirmado Maduro en sus reiteradas alocuciones.

“La realidad demuestra que hay una minoría de colombianos que son peones del plan de guerra imperialista”, dicen.

Durante las casi dos semanas que lleva la crisis fronteriza han surgido cuestionamientos acerca de por qué el presidente Nicolás Maduro sólo habla del paramilitarismo y no habla de las acciones de las guerrillas de las FARC y el ELN en la frontera.

Aunque para el presidente del vecino país estos grupos insurgentes no operan en la zona, el ELN en su comunicado reconoció que los 2.219 kilómetros de frontera en Norte de Santander han sido un territorio de disputa entre ellos y el paramilitarismo.

“Es un territorio en disputa con el paramilitarismo colombiano de extrema derecha, quienes desde la época de la presidencia de Uribe, la han intentado copar para instalar allí sus mafias de narcotráfico, contrabando a gran escala, robo de vehículos”, resaltan.

Según los elenos, ‘Jorge 40’ intentó controlar la frontera en La Guajira, y ‘Mancuso’ en Norte de Santander. “Ahora regresan alias el ‘Iguano’ y ‘Hernán’, su lugarteniente, recién salidos de la cárcel, quienes están arrasando a las bandas rivales de Urabeños y Rastrojos, instaladas en Cúcuta y Puerto Santander; guerra que en el último mes ya deja más de 35 muertos”.

Para el ELN el mandatario venezolano tiene razones de sobra para expulsar a los colombianos indocumentados y acabar con el “paramilitarismo colombiano”, que -según ha reiterado Maduro- desangra el país vecino.