ENTREVISTA: JUAN CAMILO RESTREPO

Despues de realizar una labor parlamentaria que ha sido reconocida por todos los sectores políticos, Juan Camilo Restrepo decidió lanzarse a la arena de las candidaturas presidenciales. Y no sólo aceptó ir a la convención conservadora sino que dice que la va a ganar.
Semana: ¿Cómo vio la entrega de los soldados?
Juan Camilo Restrepo: Yo creo que fue una operación humanitaria de último extremo, de la cual quedaron unas Fuerzas Armadas disminuidas, una guerrilla que se salió con la suya y un gran perdedor que se llama el gobierno.
Semana: ¿Cómo le pareció la propuesta de paz de 'Tirofijo'?
J.C.R.: El hecho de que haya habido la propuesta es interesante. Muestra que no se ha borrado la posibilidad de dialogar. Pero habría que ver las propuestas en detalle. Y sería bueno que el gobierno le preguntara a 'Tirofijo' qué aportará la guerrilla al proceso. Las Farc piden cambios de Constitución, de leyes, de decretos... pero qué están dispuestas a ofrecer. Ahí puede estar el germen de un inicio de negociación.
Semana: ¿En general, cómo ve la situación de orden público?
J.C.R.: Pésima. Aún sin tener las estadísticas a la mano, creo que estamos en uno de los peores momentos en materia de desorden público, con un agravante que son las amenazas generalizadas en todo el país para obstaculizar las elecciones.
Semana: ¿Y cómo ve el proceso que se está llevando a cabo en Antioquia, su departamento, y en particular las Convivir?
J.C.R.: Las mismas cifras de que estamos hablando muestran que el departamento de Antioquia está también en uno de los peores momentos de la criminalidad, tanto ordinaria como política. Si por los resultados estadísticos se juzga, nunca ha estado peor que ahora. Y en cuanto a las Convivir, yo he dicho que aspiro a ser el presidente de la convivencia y no de las Convivir.
Semana: ¿Y qué opinión le merece la situación económica del país?
J.C.R.: Las frías estadísticas del Dane muestran el crecimiento económico más deplorable de los últimos 20 años. Y la peor situación de desempleo abierto de la última década. Ciudades como Medellín y Cali se aproximan peligrosamente a niveles de desempleo del 20 por ciento.
Semana: ¿Qué tan culpable de la situación es el gobierno?
J.C.R.: Yo le asigno especial culpa en lo que tiene que ver con la estabilidad de las reglas de juego. Este gobierno las viene cambiando epilépticamente, y así no hay sector privado que pueda tomar decisiones. Fíjese no más lo que pasó en el primer semestre de este año. Los primeros tres meses se nos fueron en la zozobra de la emergencia económica. Los dos meses siguientes en la incertidumbre de si se cambiaba o no la estructura del IVA. Y este último mes se ha ido descubriendo a ver si el gobierno va a subir aranceles o no.
Semana: ¿Su candidatura es una candidatura conservadora?
J.C.R.: Yo tengo un proyecto nacional, donde aspiro a trabajar con gentes de mi partido, pero también con gentes de otros partidos. Pero yo no estoy camuflando ni voy a camuflar mi origen conservador. Todo el que trabaje conmigo sabrá, y yo no voy a ocultarlo, que el mío es un origen conservador. Y me siento orgulloso de ello.
Semana: Usted aceptó ya ir a la convención conservadora. Y también aceptaron Andrés Pastrana y Carlos Holguín. ¿Qué cree que va a pasar en esa convención?
J.C.R.: Voy a ganarla y a llevar la personería de un partido unido a la primera vuelta. Estoy trabajando muy intensamente para ello y los resultados que he tenido en los departamentos que he visitado me hacen ser muy optimista. Creo además que en esa convención se va a dar un hecho muy importante. Que ante una atomización de las candidaturas de otros partidos a la primera vuelta el grueso del Partido Conservador se va a poder presentar unido, con una candidatura de consenso, muy fuerte, que sin duda va a pasar a disputar la segunda vuelta.
Semana: ¿Si Andrés Pastrana ganara la convención usted lo apoyaría en la primera vuelta?
J.C.R.: Claro que sí. De la misma manera que si yo gano, como creo que voy a hacerlo, recibiré el apoyo del doctor Pastrana. Ese es el compromiso que va implícito al aceptar las reglas que trace el partido.
Semana: ¿Qué tanto puede afectar el proceso de unión el que haya una candidatura de origen conservador como la de Noemí Sanín que no se somete a esas reglas?
J.C.R.: Yo creo que la decisión de la doctora Noemí, que desde luego es respetable, le causará más perjuicio a ella que al partido. Yo he dicho que ella ha venido quemando las naves con el Partido Conservador, lo cual es una lástima, pero no tiene porqué afectar el proceso de unión que se está consolidando en el conservatismo.
Semana: ¿Podrá el candidato conservador derrotar a Noemí?
J.C.R.: No me cabe la menor duda. No sólo a la doctora Noemí sino a muchas otras de las candidaturas que van a ir atomizadas a la primera vuelta. Por eso, el candidato que salga de la convención conservadora va a ser uno de los finalistas.
Semana: ¿Eso quiere decir que usted ve la primera vuelta con el candidato conservador entre los dos primeros?
J.C.R.: Así es. Y esa es la gran moraleja política que va a dejar el aceptar las reglas de juego del partido. Y si el candidato que salga de la convención es además un candidato que no tenga una alta opinión desfavorable, va a poder aglutinar en torno de sí no solamente el voto conservador sino mucho voto liberal y mucho voto independiente.
Semana: ¿Y cómo ve la segunda vuelta?
J.C.R.: Yo veo la segunda vuelta como un enfrentamiento final entre el candidato del continuismo y el candidato del no continuismo, que será el candidato que salga de la convención conservadora. Será el choque entre un país inconforme, joven, y que quiere una renovación, y el país de las maquinarias, de la vieja política, de la corrupción y del continuismo. Y va a triunfar el primero. 'No estoy camuflando ni voy a camuflar mi origen conservador'