Las claves del desarrollo

Una reforma tributaria estructural es clave no solamente por la disminución de los precios del petróleo, sino para aumentar la inversión pública al doble de los niveles actuales, mejorar la equidad social y mantener una senda de crecimiento para que Colombia se convierta en un país de altos ingresos.

El pasado 17 de febrero en el foro ‘Colombia hacia un país de altos ingresos con movilidad social’, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) presentó al gobierno nacional la estrategia para que en 20 años Colombia alcance un ingreso per cápita de 30.000 dólares. Luis Alberto Moreno, presidente del BID, propuso un pacto nacional, tarea que “deberá enfrentar la baja productividad, la limitada movilidad social y la estabilidad económica”.

La estrategia plantea que para mejorar la productividad es necesario invertir en innovación, educación de calidad, infraestructura y desarrollo urbano y rural. La eficiencia de las instituciones es otro factor importante. Mauricio Cárdenas, ministro de Hacienda, se refirió a la política de austeridad inteligente, basada en la priorización del gasto y destacó la necesidad de una reforma tributaria estructural.

Durante el conversatorio con el presidente Moreno, el presidente Juan Manuel Santos resaltó el estudio realizado por el BID y dijo que “el país necesita pensar en metas ambiciosas, la propuesta del BID es posible y la paz nos va a ayudar a lograr esos objetivos”.