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Colombia tendría que importar gas a partir del 2018. | Foto: Archivo SEMANA

COMBUSTIBLES

Reversazo del Gobierno con tarifas del gas

Luego de anunciar alzas del 25 % en el combustible, el aumento sólo será del 3,66 %. Productores de gas propano alertan por posible desabastecimiento.

25 de febrero de 2015

La rebelión de los parlamentarios, de los empresarios y de los habitantes de la costa caribe por las alzas del 25 % en las tarifas del gas dio resultados. El Gobierno echó para atrás este incremento y anunció que para este año estará alrededor del 3,66 %, es decir, el mismo porcentaje de la inflación del 2014.

Así quedó acordado luego de varias reuniones entre el ministro de Minas y Energía, Tomás González, y representantes de esa región del país, que en las últimas semanas lanzaron su voz de protesta por lo que calificaron como tarifas exageradas de un combustible que es básico para las empresas y los hogares.

El Gobierno, a través de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG) anunció a comienzos de diciembre del año pasado estos incrementos en las tarifas del gas, que para el caso de las empresas era del 25 % y para los hogares del 8 %. Al mismo tiempo dijo que para el interior del país las tarifas descenderían un 3 %.

Y quién dijo miedo. Tras conocerse este anuncio de la CREG, los habitantes y los representantes de la costa atlántica pusieron el grito en el cielo. Los parlamentarios de esta región advirtieron que estaban dispuestos a bloquear en el Congreso la discusión del Plan de Desarrollo si el Gobierno no revisaba la medida. El presidente de la Andi, Bruce MacMaster, dijo, por su parte, que esas alzas serían un duro golpe para la competitividad de las empresas de la costa.

La protesta llegó a tal punto, que el ministro de Minas tuvo que suspender por tres meses la decisión, cuyo plazo vencía el próximo 28 de febrero, mientras lograba un acuerdo con diversos sectores.

Anoche anunció la decisión final. El incremento para este año no superará el 4 % y para el año entrante se seguirá trabajando en una fórmula para la fijación de estos precios. 

Bruce Mac Master dijo que este acuerdo constituye “un hito de trabajo entre el gobierno nacional y el sector privado para buscar alternativas para evitar el deterioro en la competitividad del sector industrial y, por ende, garantiza el aporte que dichas empresas realizan al bienestar de la costa caribe”.

Pero no todos deben estar contentos con esta posición. Recientemente la Asociación Colombiana de Petróleo (ACP) atribuyó los incrementos en este combustible a que hay un problema serio de oferta y demanda del gas, y advirtió que si la producción sigue declinando en los campos de La Guajira (Chuchupa y Ballena), de aquí al 2018 la nación tendrá un déficit de 190 millones de pies cúbicos y se vería obligada a importar gas. Este escenario es más complicado porque el gas importado es más costoso que el que se produce en el país. 

“Si la fijación de las tarifas se convierte en una decisión política y si el Gobierno escucha al que grita más, no será rentable producir gas en el país”, afirmó Lloreda hace unos días.

También sostuvo que actualmente hay 23 proyectos para producir gas que están en evaluación. Y es que mientras para un pozo en tierra se necesitan inversiones de entre cinco y 10 millones de dólares, para un pozo off shore (mar afuera), que es donde están los mayores yacimientos, se requieren entre 100 y 200 millones de dólares. Por eso los productores insisten en que si las tarifas no son competitivas no será rentable producir más.

Sin embargo, el ministro de Minas, Tomás González, dijo que este es un acuerdo positivo para el país y la costa atlántica y que permite que se busque mayor competitividad en esta región, que es lo que siempre ha buscado el Gobierno.

Pero mientras se logró una solución en este tema, surgió otro problema con el gas propano, el que se distribuye a través de cilindros.

En una carta dirigida al ministro de Minas, la Unión de Empresas Colombianas de Gas Propano (Gasnova), solicitó la intervención para evitar una inminente disminución en el abastecimiento de este combustible a raíz de la decisión de Ecopetrol de restringir la oferta entre 15 % y 20 %.

Según Gasnova, teniendo en cuenta que Ecopetrol suministra el 95 % de gas propano en el país, se podrían quedar sin combustible para cocinar hasta 750.000 familias cada mes.