Home

Nación

Artículo

Juan Manuel Santos junto al alcalde de Cartagena y la ministra de Educación | Foto: SIG

EDUCACIÓN

“Gabo estará diciendo: bien Santos, por ahí es el camino”

En la inauguración de un megacolegio en Cartagena, el presidente Juan Manuel Santos consideró que su gestión estaría siendo aprobada por el primer nobel colombiano.

11 de agosto de 2017

En la mañana del viernes, el presidente Juan Manuel Santos estuvo en Cartagena. Regresó a la Ciudadela Bicentenario, donde hace dos años había entregado cerca de cuatro mil casas gratis. Ahora lo hizo para inaugurar un megacolegio, el primero en el departamento de Bolívar que llevará el nombre del escritor colombiano Gabriel García Márquez (1927-2014”.

La obra tuvo una inversión de 11.300 millones de pesos, y albergará a 1.200 niños y jóvenes en jornada única. 30 aulas, 2 laboratorios, 2 aulas taller…. Cada uno de los edificios lleva el nombre de una de las obras de Gabo. Allí, junto al bloque Cien Años de Soledad, Santos recordó al primer premio Nobel que tuvo el país, el que conquistó el periodista y escritor de Aracataca en 1982, precisamente por la novela que se recuerda en el nuevo colegio.

Santos, el segundo Nobel (de la paz en 2016), recordó a Gabo como un apasionado por la paz y la educación, y que en muchas reuniones que sostuvieron en la vida insistía que sin educación no habría paz. “Siempre con Gabo tuvimos larguísimas discusiones sobre la necesidad de tener paz en este país, y para que esa paz sea estable y duradera necesitamos una buena educación, porque están muy conectadas”, dijo el jefe de Estado.“Hoy Gabo está con nosotros. Desde el cielo, rodeado de sus mariposas amarillas, estará diciendo Bien Santos, por ahí es el camino”.

La frase, que provocó aplausos entre los estudiantes, la pronunció el presidente después de que reivindicó los logros de su administración en  educación. Señaló que para este sector es el mayor rubro de inversión en el presupuesto de la Nación para el 2018.

Santos se despidió con otra frase, esta sí de Gabo: “Una educación desde la cuna hasta la tumba, inconforme y reflexiva, que nos inspire un nuevo modo de pensar y nos incite a descubrir quiénes somos en una sociedad que se quiera más a sí misma”.