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Julio Gómez. | Foto: Archivo Semana.

JUSTICIA

Julio Gómez aceptó cargos por el llamado 'carrusel de la contratación'

Ahora un juez de conocimiento deberá avalar o no el preacuerdo con la Fiscalía por el que aceptó los cargos que le imputaron.

2 de noviembre de 2011

Ante el Juez 28 penal municipal de Bogotá, con funciones de control de garantías, la Fiscalía le imputó los delitos de peculado por apropiación, concierto para delinquir e interés indebido en la celebración de contratos al contratista Julio Gómez por su presunta participación en el llamado 'carrusel de la contratación'.

El primer cargo por la apropiación del anticipo en cuantía de $297.201.882 millones (297 millones 201 mil 882 pesos) relacionada con la ejecución del contrato número 137, conocido como el de la calle 26.

El segundo, concierto para delinquir, por razón de la asociación "delincuencial" en la que se involucró con otras personas para lograr la adjudicación de contratos, particularmente de valorización y de malla vial.  El tercero, interés indebido en la celebración de contratos, por la adjudicación que logró a través de sus empresas, con violación de principios que gobiernan la contratación pública, como los de transparencia y selección objetiva.

El contratista aceptó esos cargos como consecuencia del preacuerdo con la Fiscalía, que se someterá al control constitucional del juez de conocimiento, quien deberá dictar la sentencia de condena.

Gómez, según la Fiscalía, reintegró la totalidad de los dineros apropiados, además hizo devolución de la suma de $12.069.522.788.67 millones (12 mil 069 millones 522 mil 788 pesos) por concepto de anticipo del contrato de valorización 068 que no había utilizado y que tenía pendiente por consignar a favor del IDU en razón a un procedimiento de caducidad.

El contratosta fue señalado por los primos Manuel, Miguel y Guido Nule de haber sido testigo de los requerimientos de dinero para la adjudicación de contratos, hechos supuestamente por el senador Iván Moreno, hoy recluido en La Picota mientras avanza el proceso en su contra por el mismo caso. 
 
El pasado mes de junio, el exdirector jurídico del IDU Inocencio Meléndez, ante la Procuraduría, se refirió a los dos contratistas. Según Meléndez, Gómez lo llamó el 24 de diciembre del 2008 y le advirtió que el grupo que él integraba no podía perder los contratos de malla vial.
 
"El 24 de diciembre del 2008, el contratista Julio Gómez me buscó en mi casa y me dijo: 'Es que no podemos perder los contratos de malla vial'", y explicó que dicho contrato había sido declarado "caducado" tras el incumplimiento de los requisitos legales por parte de la mayoría de los oferentes.
 
Según la declaración de Meléndez, firmas del Grupo Nule y empresas vinculadas al entorno de Gómez ganaron dos millonarios contratos. Meléndez también dijo que en la adjudicación de ese contrato, era el abogado Álvaro Dávila quien le contaba a Gómez cómo iban las propuestas, ya que -según su testimonio- junto con Emilio Tapia buscaron quedarse con cinco de los seis grupos de obra.