La carta del coronel de los ‘falsos positivos’ a Piedad

En los últimos años, la exsenadora Piedad Córdoba ha visitado decenas de cárceles del país y el mundo escuchando guerrilleros, paramilitares y militares detenidos. Algunos de ellos le han dado a conocer propuestas según las cuales están dispuestos a entregar la verdad de sus crímenes a cambio de que se les incluya en un proceso de reconciliación que derive en sustanciales rebajas de penas.

Hace pocas semanas se produjo otra que se podría considerar histórica: la exsenadora estuvo en la cárcel militar de Puente Aranda, en Bogotá, donde se encuentran algunos de los militares comprometidos en los llamados ‘falsos positivos’. Fue desde esa cárcel desde donde el coronel del Ejército Róbinson González del Río orquestó un plan para hacerse a decenas de contratos del Ejército con la presunta anuencia de altos mandos.

El pasado 18 de mayo, como lo reveló Noticias Uno, la exdirigente liberal llegó a esas instalaciones para reunirse con el general Rito Alejo del Río, condenado a 25 años por el asesinato de un campesino en el Urabá. También con el coronel Hernán Mejía Gutiérrez, aquel militar excomandante del batallón La Popa, de Valledupar, procesado por vínculos con jefes paramilitares de la Costa Caribe, así como por ejecuciones extrajudiciales.

La reunión, en la que participaron otros militares detenidos, duró cerca de dos horas y en ella los oficiales insistieron en la propuesta de beneficios para militares y guerrilleros condenados o investigados por crímenes de guerra. Es decir, un proyecto de reconciliación, dijo el noticiero.

Los días pasaron y los oficiales le enviaron una comunicación a la senadora, quien se habría comprometido a llevar los detalles de esta reunión a altas instancias del Gobierno. Semana.com conoció una carta en la que el coronel Mejía le agradece la visita a Piedad y le aseguró que ella será la persona que los ayude a “abrir la puerta que muchos no han querido abrir”.

“Quiero, en nombre de Rito Alejo del Río, Orlando Pulido, Ricardo López y en el mío propio, presentarle nuestro mensaje de gratitud por el atento detalle de visitarnos y compartir esos momentos de gran importancia para la realización de un gran sueño”, escribió Mejía.

Más adelante el oficial asegura que “el solo hecho de habernos sentado y compartido palabras con la intención de buscar de verdad, una salida para la situación de violencia, es un acontecimiento que merece ser acompañado”. Y agrega: “Es puerta que nadie quería abrir y que muchos quieren evitar que se abra, seguramente será la salida de muchas iras contenidas y la entrada de una paz duradera y fuerte”.

El militar deja entrever en su misiva que, luego de la visita de la exsenadora, les trasmitió el mensaje a otros detenidos investigados por hechos similares sobre la posibilidad de que Piedad los ayude. “El mensaje que les hice saber luego de despedirnos a tantos hombres que esperan esa luz de esperanza ante la soledad de los barrotes, por haberle cumplido a su Estado, es que Piedad Córdoba está más dispuesta que nunca a ayudarnos en esta increíble empresa de terminar la guerra con verdad y dignidad, en una mesa compuesta por quienes se dispararon por décadas sin tener claro por qué”.

Semana.com se comunicó con la exsenadora para conocer los avances de esta propuesta, que, seguramente, será llevada al seno de las negociaciones y de la que tendrá noticia el alto gobierno. Piedad se excusó y argumentó que, para hablar del tema, debía tener la autorización del grupo del que hace parte, conocido como Colombianos y colombianas por la paz.

¿En qué terminará esta iniciativa? Amanecerá y veremos.