LA MUJER DEL AÑO

EN UN PAIS DONDE HAY 15 MILLONES DE MUjeres es difícil elegir a la mujer del año. Entre las aspirantes estaría Ana Milena Muñoz de Gaviria, quien estableció un estilo muy personal en la tradicional imagen de la familia presidencial. También podía considerarse en el mundo de la cultura una mujer como Fanny Mikey quien durante 10 años ha realizado una obra ejemplar en el Teatro Nacional. Funcionarias como Cecilia López Montaño, directora del Seguro Social, o Leonor Montoya, presidenta del Banco de Colombia, demuestran que cada día más se llega a la igualdad de sexos en materia ejecutiva. Aún una Joven belleza de 18 años como Paola Turbay, podría calificar como inspiradora de los colombianos.
Pero sin duda alguna la mujer del año fue Noemí Sanín. No tanto por haber llegado a ser la primera ministra de Relaciones Exteriores en la historia del país. Al fin y al cabo su gestión apenas comienza y es imposible hacer un balance. Es más bien por su excepcional gestión a la cabeza de la embajada de Colombia, en Caracas. Noemí Sanín de Rubio conquistó Venezuela hasta tal punto que se dio la increíble situación de que los venezolanos protestaran cuando fue llamada a regresar al país.
La labor no era fácil pues a pesar de que las relaciones entre los dos países pasan un momento de distensión, también es cierto que todavía queda alguno que otro chicharrón de difícil manejo y alta susceptibilidad. Noemí joven bella y simpática -y sorpresa para los venezolanos que no estaban acostumbrados a tener mujeres en las embajadas- fue poco a poco (palabras de una periodista venezolana)