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Los 10 libros de 2006

Junto a la 'Nieve', del Nobel Orhan Pamuk, encontramos varios títulos de autores colombianos (Abad, Franco, Silva), un monstruo de leyenda y un ensayo sobre Europa, entre los textos más destacados de este año.

Luis Fernando Afanador Crìtico de libros
16 de diciembre de 2006

1.Nieve. Orhan Pamuk.
Kars, el pueblo donde ocurre esta novela, opera en la narración como un microcosmos de la sociedad turca y sus desgarradas contradicciones entre modernidad y tradición. Con sus reflexiones, personajes, diálogos existenciales y múltiples historias secundarias, Pamuk es una mezcla de Dostoievski y Las mil y una noches.

2.El olvido que seremos. Héctor Abad.
 Un libro hermoso y conmovedor que convence porque fue escrito con honestidad y con verdad. El autor es a la vez amoroso y descarnado en el retrato que hace de sí mismo y de su familia. Eso le da una supremacía moral frente a los asesinos de su padre y la dignidad de quienes hablan sin rencor y sin hipocresía.

3.Eclipse del cuerpo. Pedro-Juan Valencia.
A través de 55 breves fragmentos, el tema del cuerpo y el yo, con todas sus variaciones, fluye como una música ligera. El cuerpo vivido con egolatría y agresividad, el cuerpo amado, el cuerpo abandonado, el cuerpo adolorido, el cuerpo que finalmente muere y se corrompe y se disuelve en materia inerte, en polvo, en ceniza, en nada.

4.Amantes y reinas. Benedetta Craveri.
En virtud de la ley sálica, en la Francia del Antiguo Régimen las mujeres estaban excluidas del poder, pero gracias a su inteligencia y a sus encantos, llegaron a tener una influencia decisiva en la corte. Desde Catalina de Médicis hasta María Antonieta hay en total 15 perfiles, rigurosos y deliciosamente escritos.

5.Melodrama. Jorge Franco.
Esta es, quizá, la mejor y la más arriesgada obra de Franco, en la que ha ido más lejos en la exploración de sus obsesiones: el universo femenino, la dualidad del amor y de la muerte y, desde luego, la historia sangrienta de Colombia que resulta aquí el marco apenas natural para un relato desbordado de risa y dolor.

6.Leonardo, el vuelo de la mente.
Charles Nicholl. Una muy buena biografía que no pretende desmitificar al gran artista, al científico y al filósofo, sino encontrarlo en el relato de su vida: un Leonardo muy cercano a lo que realmente fue. Y algo importante: no busca anteponer la palabra "genio" como una explicación mágica que resuelva todas las preguntas.

7.El profesor. Frank MacCourt.
El autor de Las cenizas de Ángela cuenta los sinsabores y las alegrías que implicó ser profesor de secundaria durante 30 años en colegios públicos de Nueva York. Y lo hace con su mejor estilo: burlándose de sí mismo y teniendo compasión de los otros.

8.El hombre de los mil nombres. Ricardo Silva.
No es un libro fácil de clasificar. Es una mezcla de biografía y de relato policial: la vida y el asesinato de un productor de cine que tuvo varias identidades. Es, también, la verdadera historia de Hollywood, es decir, la del oprobio y el esplendor, la del vil negocio y el arte.

9.King Kong. Anthony Browne.
Una vez comenzado este relato, ya no se puede abandonar: de inmediato sentimos la emoción de la aventura, del viaje, de lo desconocido. Estamos leyendo otra vez como leíamos en la infancia, cuando sólo queríamos saber con ansiedad "qué va a pasar". Esa lectura desinteresada que perdimos y que libros como éste nos ayudan a recuperar.

10.La idea de Europa. George Steiner.
¿Qué es Europa? Lo valioso de este libro es que consigue desarrollarlo a partir de cinco conceptos claros y precisos que resumen el pensamiento de Steiner: los cafés, el paisaje a escala humana, el culto al pasado, la conciencia de pertenecer al legado de Grecia y Jerusalén y su obsesión por un final trágico.