Entrevista
Mary Anastasia O’Grady, reconocida editorialista del Wall Street Journal, denuncia la grave situación del coronel (r) Plazas Vega, absuelto, pero perseguido por la retoma del Palacio de Justicia
La editorialista habla de la paradoja de que Gustavo Petro sea presidente y el coronel Plazas esté investigado por la justicia en Estados Unidos. Ataca a Santos y su proceso con las Farc y dice que viene “lo peor para Colombia”.
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Vicky Dávila (V.D.): El coronel en retiro Alfonso Plazas Vegas estuvo preso ocho años en Colombia por los hechos de la toma y retoma del Palacio de Justicia que protagonizó el grupo terrorista M-19. Lo declararon inocente, se fue a vivir a Estados Unidos para tratar de rehacer la vida, y la familia del exmagistrado Urán le interpuso una demanda civil. La situación del coronel es compleja hoy.
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Mary Anastasia O’Grady: (M.A.O.): Este caso no es importante únicamente en Colombia, también es muy importante para los Estados Unidos, porque el caso fue presentado en las cortes estadounidenses y abre la posibilidad de revisar los abusos de una ley que no fue diseñada para la forma en la que está siendo usada.
V.D.: ¿Qué ha podido conocer del caso que hoy enfrenta el coronel Plazas Vega en los Estados Unidos?
M.A.O.: Usualmente, si algo pasa en otro país, las cortes estadounidenses no suelen adjudicar a las partes inocentes o culpables. Este es un caso muy inusual. No es un caso penal. Y fue presentado en cortes civiles por los demandantes utilizando una ley que fue presentada en 1992, firmada por George W. Bush. La idea de la ley era contra dictadores, ya sea de Cuba, Venezuela, Irán, Rusia, que llegaran a los Estados Unidos y se retiraran en Cabo Vizcaíno, en Florida, para vivir una vida maravillosa después de haber cometido muchas violaciones o crímenes de lesa humanidad.
Lo que el presidente Bush quería hacer era crear una vía para que estas personas fueran presentadas ante la justicia, porque los países de los cuales venían no tenían jurisdicción en ellos, no tenían democracias, no había forma de hacer seguimiento de los derechos y del debido proceso bajo el Estado de derecho. Eso es lo que se llama la Ley de Protección a las Víctimas contra la Tortura.
V.D.: ¿Qué pasa con Colombia, entonces, en el marco de esta ley en Estados Unidos?
M.A.O.: Colombia no entra dentro de esa categoría. Colombia es una democracia y los Estados Unidos, a menudo, han alabado la democracia colombiana como una democracia superviviente, una de las que más ha perdurado en América Latina. Y usualmente las cortes les dirían a los demandantes: ustedes tienen que agotar todas las vías legales que tienen para obtener justicia en su país democrático con su presidente electo, tienen su Corte Suprema, su separación de poderes, etcétera.
Aquí los demandantes lograron hacer que el caso entrara a una Corte Civil de Florida, donde el coronel Plazas ahora tendrá que defenderse.
V.D.: Entendemos que la demanda fue interpuesta por la familia del exmagistrado Horacio Urán, quien murió en medio de los hechos que rodearon la toma del Palacio de Justicia.
M.A.O.: Es interesante, porque no están pidiendo que haya un juicio penal. Están pidiendo dinero. Y el coronel Plazas obviamente se retiró con una pensión militar. Entonces, la probabilidad de que estas personas ganen y reciban mucho dinero es bastante baja. Pero lo que vemos en la jurisprudencia, lo que hemos visto generalmente con este tipo de técnicas, es que los demandantes están buscando formas de reescribir la historia, tal vez de poner a los oponentes de vuelta en la cárcel en su país de origen, o convertir a los adversarios en villanos. Y, en este caso, creo que hay un objetivo de hacer que el Ejército se vea como un abusador de los derechos humanos en el caso del Palacio de Justicia y particularmente ponerle la culpa al coronel Plazas, para lo que no hay evidencia.
V.D.: El coronel Plazas dice que no tiene plata para pagar una defensa. ¿Qué pasa en ese caso?
M.A.O.: Si él no tiene la capacidad de defenderse, entonces en una corte estadounidense se determinará un default. Él tiene que encontrar una firma legal que lo defienda. Los demandantes tienen una firma muy grande y una ONG con muy buenos fondos.
La estimación para defenderse en un caso de este tipo tiene un costo de entre 600.000 a un millón de dólares, porque tienen que traducirse miles de páginas de documentos. El caso tiene más de 40 años, muchos de los testigos ya están muertos o es muy difícil encontrarlos. Entonces, este será un caso muy complicado para llevar a las cortes. Y si no se tienen los recursos para defenderse, como dije antes, probablemente tendrán que ir a algo que se llama el default, que es decirle al juez: “Yo no puedo rebatir estas acusaciones”, y todo lo que queda es que el juez asigne perjuicios.
No creo que vaya a recibirse mucho dinero, hasta donde veo, con lo que he investigado, pero ellos tendrán la capacidad de llevar a casa esta narrativa de que el coronel Plazas fue condenado en una corte estadounidense. Y para los que están haciendo esto, esto valdrá mucho.
V.D.: Con lo que me dice, pareciera tratarse de un plan, aunque no hay que olvidar que la familia del magistrado Urán es víctima.
M.A.O.: Lo que sucede es que es una historia muy complicada, hay muchas partes en movimiento. Los demandantes son tres hijas de un magistrado que fue asesinado en el Palacio de Justicia, cuando el M-19, un grupo terrorista del cual era miembro Gustavo Petro, se tomó el lugar, y más de 100 personas fueron asesinadas. Los testigos dicen que lo vieron abatido porque él trató de correr para escapar y salir por donde todos los terroristas habían tomado a estas personas como rehenes. Y los testigos vieron que fue baleado dentro del Palacio. Una de las hijas de Urán trabajó en el Gobierno Petro.
Ahora bien, la familia dice que hay evidencia para decir que su padre fue sacado del Palacio, llevado a la Escuela de Caballería, torturado, asesinado y que su cuerpo fue regresado al mismo Palacio. Pero si eso fuese cierto, es muy difícil de probar 40 años después. El coronel Plazas solo estuvo a cargo de la retoma. Estuvo fue todo el tiempo tratando de luchar y de rescatar personas.
¿Cómo podría haberlo hecho él (ordenar la muerte de Urán) cuando estaba dentro del Palacio de Justicia a cargo del rescate y la recuperación y la retoma?
V.D.: ¿Cuál sería ese futuro del coronel si no encuentra una firma o un patrocinio para defenderse?
M.A.O.: Creo que ese caso debía ser desestimado completamente de entrada. Esto es un abuso de la Ley de Protección a las Víctimas, en mi opinión. Si el coronel Plazas logra algún tipo de defensa legal, creo que tiene muy buenas posibilidades de ser absuelto. Él no sacó a las personas del Palacio de Justicia. Eso ya lo probó el sistema judicial colombiano. Él fue detenido por ocho años y no encontraron nada en su caso. Entonces, ahí es cuando él fue exonerado y nunca fue compensado por ese tiempo de su vida que perdió en detención.
Además, hay mucha evidencia de lo que él estaba haciendo ese día, todo el tiempo estuvo tratando de rescatar rehenes. Entonces, mi perspectiva es que él tendría muy buenas posibilidades de demostrar que no formó parte. E incluso me pregunto si los demandantes no pensaban que iba a ir a un juicio. Ellos dijeron “bueno, esto no va a pasar, él no va a tener los recursos para defenderse, entonces va a ser forzado a presentar default”. Tal vez ese sea un motivo por el que ellos decidieron continuar con esta demanda, porque tienen una firma con muchos fondos y pueden darse el lujo de hacer esto. Pero basados en los hechos, creo que él tiene muy buenas posibilidades de ser exonerado.
V.D.: Hace apenas unos días se conocía aquí una noticia que causó mucha controversia. La Fiscalía decía que el magistrado Urán no salió con vida del Palacio de Justicia.
M.A.O. Repito, numerosos testigos dijeron que vieron que él fue abatido cuando trató de correr y escapar hacia una salida. Sus pertenencias aparecieron en la Escuela de Caballería, pero eso no dice nada, no tiene que ver nada con la parte donde murió y no tiene que ver con el trabajo del coronel Plazas en el momento en el que murió el señor Urán.
Lo que encuentro muy curioso en este caso es por qué la izquierda en Colombia sigue atacando al coronel Plazas, ¿por qué pasa eso? Personalmente, creo que es muy desafortunado que los Estados Unidos estén proporcionando un camino para que este caso sea litigado de nuevo. Es otro esfuerzo para dañar al coronel Plazas y dañar la reputación del Ejército. Creo que la guerrilla y las personas de la izquierda sencillamente quieren que el público diga: “Bueno, el M-19 fue malo, pero también el Ejército. Ambas partes fueron terriblemente malas”. Y sabemos que eso no es cierto. No es que el Ejército no cometa errores, efectivamente los cometen y son castigados por ello. Pero la sugerencia de que hay equivalencia entre lo que el M-19 hizo ese día y lo que el Ejército hizo es completamente atroz. Efectivamente, es una vergüenza para Colombia tener que volver a pasar por este proceso.
V.D.: El M-19 hizo un proceso de paz y uno de sus miembros es hoy presidente de Colombia, Gustavo Petro. ¿Cómo le parece?
M.A.O.: Ese tal acuerdo de paz con el M-19, recibiendo amnistía para las personas involucradas en actos de terrorismo terribles, como el Palacio de Justicia, es un gran error. Creo que el país continúa pagando por ello, porque todos los terroristas que vienen piensan que, siempre y cuando aguanten, pueden tener un acuerdo.
En el caso del M-19, creo que una cosa que es muy triste, y que me asombra cuando hablamos de Colombia, he escrito mucho sobre toda la región, pero no entiendo por qué en Colombia ustedes tienen una situación en la que persiguen a un coronel que rescató a cerca de 200 personas en el Palacio de Justicia de un ataque terrorista, mientras, 40 años después, uno de los miembros del grupo terrorista es presidente del país.
Colombia es un Macondo completo, es algo completamente ridículo, no tiene sentido, y siempre y cuando Colombia siga en este camino, yo creo que simplemente está invitando a más y más actividades criminales.
V.D.: Bueno, aquí también se hizo el proceso de paz de La Habana entre Juan Manuel Santos y las Farc...
M.A.O.: Dentro de las negociaciones de las Farc, no creo que hubo un acuerdo de paz. No ha habido paz en Colombia. Uno de los peores aspectos fue poner a los militares y a las Farc en el mismo espacio moral. No estoy diciendo que los militares no han cometido errores. Son humanos, van a cometer errores y deben ser castigados por esos errores, deben ser responsables por eso. Pero fue ridículo pensar que las Farc, que por tantas décadas han atacado civiles, estaban en un mismo espacio moral que ellos. Creo que Juan Manuel Santos va a pasar a la historia como uno de los peores presidentes que ha tenido Colombia. Abrieron este camino para las amnistías para terroristas. Yo creo que invitaron más terroristas acá y eso va a tomar mucho tiempo para resolver esta situación en Colombia.
V.D.: ¿Cómo ve la paz total de Petro?
M.A.O.: No se hace un arreglo con un grupo y la criminalidad desaparece, alguien más va a llegar y va a tomar ese espacio, porque es una operación muy lucrativa, es una forma de vida para las personas que quieren hacer ese “negocio”. Entonces si él dice que Colombia está en paz, me pregunto si le ha dicho al ELN eso, porque puede que no sean conscientes, igual he escuchado historias de militares y policías siendo asesinados por el crimen organizado, es un problema continuo y la idea de que el país está en paz es bastante absurda, creo.
V.D.: ¿En general, cómo ve a Colombia?
M.A.O.: Trato de ser optimista en la vida, pero no soy muy optimista acerca de Colombia, creo que este problema del crimen organizado está profundamente arraigado en el país. Yo les echo la culpa a los Estados Unidos porque creo que el uso de estupefacientes es el generador principal de los ingresos de esos grupos criminales, entonces estamos haciendo la guerra contra las drogas, pero siempre y cuando no se reduzca la demanda, siempre vamos a tener el problema del suministro. Desde una perspectiva política me preocupa Colombia, porque creo que el acuerdo con las Farc, hablando sobre las amnistías, este tipo de acuerdos en los que le das a un pequeño grupo de personas algún tipo de privilegios y demás, la forma en la que la JEP funciona, está muy distorsionada, no es el Estado de derecho, no es la justicia, ustedes no tienen una separación de poderes.
V.D.: ¿Qué piensa de la Fiscalía?
M.A.O.: Tienen una Fiscalía General que, en mi opinión, no es creíble para una gran parte de la población y ustedes necesitan un Ejército que pueda hacer el tipo de cosas que pudo lograr durante la presidencia Álvaro Uribe. Me siento muy triste cuando escucho de Colombia y me acuerdo de que al final de su segundo término él pensaba acabar con la guerrilla, y sé lo que pasó cuando llegó Juan Manuel Santos. Poco a poco acabó toda la paz que se había logrado, todo fue destruido por él. No soy optimista, creo que debe haber una separación de poderes en un Estado de derecho. Se necesita justicia para las víctimas, Colombia no tiene ninguna de esas cosas en este momento y el sistema judicial ha sido completamente politizado. Tampoco ayuda vivir al lado de Venezuela, ese es otro desafío que tienen ustedes. Creo que las cosas se van a poner peor; siento decir eso.
V.D.: ¿Realmente usted cree que el principal responsable de que haya llegado Petro al poder y de lo que está viviendo hoy Colombia hoy es Juan Manuel Santos?
M.A.O.: Es difícil saber cuál fue el principal culpable de que Petro esté ahí. Ha habido muchos problemas con este presidente, efectivamente, pero yo diría que el acuerdo con las Farc fue devastador. Entrevisté a Juan Manuel Santos muchas veces, desde el momento en que anunció que iban a hacer esta negociación.
V.D.: ¿Qué le dijo?
M.A.O.: M.O.: Él me dijo: “No te preocupes, los terroristas van a tener que ir a la cárcel, ellos tienen que hacer reparación, ellos van a tener que rendir cuentas por los niños reclutados, van a tener que admitir todos sus crímenes. No deberías preocuparte en absoluto, porque una vez que tengamos ese acuerdo se lo vamos a llevar a los ciudadanos, y si la gente dice que no, no va a haber un acuerdo”.
Hoy podemos mirar esa lista que te di y él dio reversa a todo lo que estaba diciendo antes de que se pudiera volver esto una ley. Por el contrario, tenemos estas personas libres, andando tranquilas por todas partes, sin ningún tipo de culpabilidad ni responsabilidad, y tenemos esto que le pasó al coronel Plazas en la Florida, entonces no sé, las sociedades necesitan justicia y no creo que los colombianos estén recibiendo justicia en este momento.
V.D.: Gustavo Petro no ha rechazado o ha reconocido a Edmundo González como presidente electo de Venezuela. ¿Usted cree que lo hace porque al final si Maduro se queda en Venezuela a la fuerza como un dictador, Petro podría en algún momento hacer lo mismo en Colombia?
M.A.O.: Mark Twain dijo: “La historia no se repite, pero a menudo rima”. Lo que me preocupa es que en Colombia las instituciones se están erosionando, las cortes están formando parte del problema y cuando empezamos a perder las cortes, como se ve en Brasil, y que estas se politizan, es muy fácil concentrar el poder. Petro no está reconociendo a Edmundo González en este momento, yo creo que tiene mucho que ver con su extrema izquierda. Creo que él está tratando de caminar una línea delgada. Sabemos que gran parte del país está en contra de lo que Maduro está haciendo, pero de todas formas Petro está tratando de darle contentillo a la extrema izquierda diciendo cosas tontas como “estamos esperando que nos muestren el conteo de votos”, más de un mes después de que se hicieron las elecciones. En algún punto creo que sencillamente va a tener que decir más que eso. El presidente de Chile, que también es de izquierda, tuvo el coraje de hacer una declaración y decir que Edmundo González ganó. Petro no ha podido hacer eso porque depende mucho de la extrema izquierda en Colombia y ellos no quieren que él diga eso.
V.D.: ¿Y será que Petro se puede quedar en el poder en Colombia?
M.A.O.: En Venezuela, el único motivo por el que Maduro acordó tener elecciones fue porque él pensó que de nuevo podía robarlas, como lo ha hecho desde 2013. La pregunta sería, ¿Colombia tiene los pesos y contrapesos necesarios para asegurar que, sea la que sea la voluntad del pueblo, sea reflejada en lo que se hace? Yo creo que en unas elecciones justas y transparentes, con la posibilidad de auditoría y del conteo de votos, un buen contendiente tendría buenas posibilidades. Un problema que veo en Colombia es que en verdad no hay mucho liderazgo, no ha emergido un liderazgo fuerte que pueda ser buen candidato para luchar contra Petro. Creo que hay muchos nombres que se han presentado, pero nadie que sea un buen candidato. Eso es importante. En otros países de la región que perdieron la democracia, en parte fue porque había demagogos muy poderosos que llegaron al poder, que atrajeron votos de la izquierda, porque no había un buen candidato de derecha con valores de derecha, no estoy hablando del Partido Republicado en Estados Unidos, pero hablo de un partido de derecha que defienda esos valores y que pueda convencer, que sea lo suficientemente carismático. Eso es lo que Colombia necesita, un líder que pueda presentarse y batirse contra Petro.
V.D.: Recuerde que en Colombia no hay reelección, pero muchos creen que Petro en el fondo de su alma quisiera reelegirse, incluso, en cuerpo ajeno.
M.A.O.: Sé que no hay reelección en Colombia, pero estoy bajo la impresión de que él puede tratar de hacerlo, por eso es que respondí como lo respondí.
V.D.: Así es, es una especie de preocupación que hay entre los colombianos. Incluso, una senadora del Pacto Histórico, el movimiento político de Petro, ya tiene listo un proyecto para buscar la reelección. Todos los temores son bien fundados
M.A.O.: Estoy de acuerdo.
V.D.: ¿Quiere usted decirle algo al Coronel Alfonso Plazas Vega?
M.A.O.: Estoy tratando de escribir sobre esto desde una perspectiva imparcial, entonces mi mensaje sería para Colombia: espero que los colombianos crean en sí mismos y sigan buscando el Estado de derecho, porque eso es lo que necesita el país.