Márquez, Santrich y Merlano, a horas de exponerse a la pérdida de investidura

Han pasado once días desde que se posesionaron los nuevos congresistas. Tres de ellos no se hicieron presentes en el Capitolio el pasado 20 de julio, por razones ampliamente conocidas por la opinión pública. Iván Luciano Márquez Marín (Iván Márquez), Seuxis Paucias Hernández Solarte (Jesús Santrich), quienes fueron cabeza de lista del partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (Farc), y Aída Merlano, del Partido Conservador. Los tres están a pocas horas de perder su investidura, precisamente por no haberse posesionado en el cargo para el que fueron elegidos.

En el caso de Santrich, las directivas de la Cámara de Representantes están a la espera de los resultados que arrojen los estudios jurídicos que se iniciaron para tomar una decisión sobre el caso. El ex negociador de la guerrilla de las Farc en La Habana está privado de libertad por orden de la Fiscalía, que tiene pruebas de que habría seguido vinculado al narcotráfico incluso después de la firma del acuerdo de paz.

El presidente de la Cámara, el liberal Alejandro Carlos Chacón, aseguró que en las próximas horas se tendrá claro si Santrich debe o no perder la curul.

“Se está revisando jurídicamente la condición, él cree que tiene un derecho y nos envía la credencial del Consejo Nacional Electoral y una posesión que hizo desde su sitio de reclusión”, señaló el presidente de la Cámara. “Nosotros daremos una respuesta formal sobre este caso y posterior a eso informaremos a los medios de comunicación”, agregó.

La semana pasada, Santrich envió varios documentos a la Cámara de Representantes con los cuales pretendía asumir su cargo como congresista.

Sin embargo, la ley establece que la posesión debe hacerse de forma presencial en el recinto del Congreso, situación que no ha sucedido ni sucederá en virtud de su condición de detenido e investigado por presunto narcotráfico.

De no posesionarse, Santrich perdería su investidura, es decir, se le decretaría la muerte política y no podrá volver a aspirar a cargos de elección popular.
Una situación similar a la de Aída Merlano, detenida por presunta compra de votos en las pasadas elecciones parlamentarias, y quien pretendía posesionarse en su curul desde su sitio de reclusión.

La ex representante a la Cámara envió una carta al Congreso de la República solicitándole al presidente del Senado desplazarse a su centro de reclusión para que pueda tomar juramento.

La ley establece que la posesión de los congresistas debe llevarse a cabo personalmente en el recinto del Capitolio.

Gregorio Eljach, secretario del Senado, afirmó que “han planteado una figura exótica, que es que el presidente del Congreso se desplace a la cárcel a posesionar a alguien que no se posesionó, cosa que no está dentro de las funciones del presidente, ni de los congresistas y por lo tanto se va a negar esa posibilidad”.

Eljach reiteró que a Iván Márquez y a Aída Merlano ya se les venció el plazo de ocho días que da la Constitución para posesionarse en sus curules, porque los mismos deben ser contados como días calendario y no hábiles.

Es por eso que Santrich, Márquez y Merlano están a horas de perder su investidura.