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| Foto: Cortesia Defensoría del Pueblo

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La polémica tras la masacre de cuatro niños en Caquetá

La Fiscalía denunció negligencia de la Policía y el Ejército locales en la investigación. El Ejército responde.

6 de febrero de 2015

La Fiscalía General de la Nación realizó un primer informe acerca de la masacre de cuatro niños en la vereda El Cóndor, en Florencia (Caquetá) que ocurrió en la madrugada del jueves y que ha sido unánimemente condenada.

En el documento hay una grave denuncia. El ente acusador asegura que hubo falta de apoyo de la Policía y el Ejército en las labores investigativas de la masacre.

Según el informe, la Policía misma fue la que anunció lo que estaba pasando en la humilde vivienda. Sin embargo, cuando la Fiscalía pidió acompañamiento hubo una negativa con el argumento de no contar con personal.

Después solicitaron ayuda inmediata por parte de integrantes de la brigada XII del Ejército y ocurrió lo mismo. La situación es compleja. ¿Es verdad que el Ejército y la Policía no colaboraron lo suficiente?

El coronel William Boyacá, comandante de la Policía de Caquetá, le aseguró a Semana.com que cuando se conoció la situación, la Policía desplazó inmediatamente personal del CTI y de la Fiscalía.

Por su parte, el subgerente científico del Hospital María Inmaculada, Camilo Enrique Díaz, aseguró que Pablo Vanegas Grimaldo, el niño de 12 años que sobrevivió a la masacre, llegó en la madrugada del jueves en una ambulancia del Ejército. Entonces, ¿colaboró o no la fuerza pública?

Se tiran la pelota

El enredo es cada vez más grande. Un ente le tira la pelota al otro queriendo librarse de responsabilidades. Ahora la Defensoría y la Personería de Florencia agregan otro elemento que pone en cuestión la denuncia de la Fiscalía.

Estos entes le aseguraron a Semana.com que el padre de los niños tenía problemas de tierras con otras personas. El caso venía desde el año pasado. Según las averiguaciones, el hombre había acudido desde antes a la Fiscalía y había denunciado la situación, pero el ente -al parecer- no le prestó atención. Él tuvo que acudir a la Policía y fue esta entidad la que lo atendió.

Presuntamente la Policía logró que el hombre hiciera una conciliación con las personas que estaba teniendo problemas y la controversia había disminuido. Ahora queda la duda de quién fue la negligencia.

Semana.com conoció que ya existe información que indica quiénes pueden ser los responsables, sin embargo la Policía sigue ofreciendo una recompensa de 50 millones de pesos, luego de que el presidente Juan Manuel Santos les ordenara dar con los asesinos.

Un fiscal especializado de Caquetá ya asumió la investigación y ordenó las primeras diligencias de la Policía Judicial para recopilar los elementos probatorios necesarios y poder darle un orden a este enredo.

¿Cómo fue la masacre?

El jueves pasado de Florencia despertó con una trágica noticia: cinco menores fueron brutalmente atacados con armas de fuego. Cuatro murieron y uno logró huir.

Fue a las 12:30 a. m. cuando el Ejército recibió una llamada sobre una familia afectada. Aún no sabían de qué se trataba. Ellos alertaron a la Policía, que desplazó personal del CTI y de la Fiscalía. Al llegar, el escenario era doloroso.

Cuatro niños de la familia Vanegas Grimaldo estaban muertos. Samuel de 17 años, Juliana de 14, Laura Jimena de 10 y Deinner Alfredo de 4, cada uno recibió un disparo en la cabeza que los hizo morir de manera instantánea.

Pablo Vanegas de 12 años, fue el único que se salvó. “El niño herido dice que fueron dos sujetos los que entraron a la casa”, aseguró el coronel William Boyacá, comandante del departamento de Policía de Caquetá.

Aunque el niño recibió un disparo en el cuello, tuvo fuerzas para salir y avisar lo sucedido a familiares cercanos. Luego, cuando llegaron las autoridades, Pablo fue trasladado al Hospital María Inmaculada, donde recibió la atención médica necesaria.

Camilo Enrique Díaz, subgerente científico del hospital, le aseguró a Semana.com que el niño tenía “una fractura en una de las vértebras cervicales, pero sin ningún compromiso medular”. Recibió tratamiento con antibióticos, antiinflamatorios y, además, apoyo psicológico.

Los niños pertenecían a una familia de nueve hermanos. Esa madrugada se encontraban solos en la casa porque sus padres habían salido desde el día anterior al municipio de Florencia.

Sobre el hecho, y a través de un comunicado oficial, el Ejército afirmó:

Desde que se conocieron los hechos en coordinación con la Policía Nacional se ordenó acordonar la zona y brindar la seguridad en el área con el objetivo de que las autoridades competentes realizaran la labor de ingreso, verificación y levantamiento de los cadáveres.

El menor que resultó herido fue atendido por el personal médico del Batallón Liborio Mejía y trasladado en una ambulancia del Ejército hacia el Hospital María Inmaculada de Florencia, Caquetá.

Ha habido una colaboración estrecha entre el Ejército, la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación para lograr el esclarecimiento de los hechos.