Home

Nación

Artículo

| Foto: Archivo SEMANA

DECLARACIÓN

Procurador: “las FARC no son pobres viejecitas sin nadita que comer”

Así se refirió Alejandro Ordóñez al hallazgo de bienes de la guerrilla que habrían sido puestos a nombre de familiares de sus integrantes.

28 de enero de 2016

Los bienes inmuebles en sitios lujosos Costa Rica que supuestamente pertenecen a las FARC le dieron un argumento más al procurador Alejandro Ordóñez para criticar el proceso de paz y la confianza que el Gobierno ha depositado en el grupo guerrillero.

Al referirse al patrimonio de los rebeldes, el jefe del Ministerio Público dijo que no son "pobres viejecitas sin nadita que comer". Esto a propósito de los hallazgos de la Fiscalía costarricense que apuntarían a que familiares de guerrilleros han servido de testaferros.

Dijo que el único que duda que las FARC son una organización con un patrimonio y unas finanzas envidiables es el Gobierno. Para convencer de la equivocación en la que según él incurre la administración Santos, hizo un relato detallado de lo que significa el hallazgo de las autoridades ticas.

“De acuerdo con la información de las autoridades costarricenses, hay bienes avaluados en más de 35 millones de dólares en cabeza de los familiares de los señores de las FARC, incluso extraoficialmente se ha dicho que la fortuna que hay en Costa Rica asciende a más de 2.000 millones de dólares, para creer que los señores Pablo Catatumbo e Iván Márquez son unas pobres viejecitas sin nadita que comer”, precisó.

Además, para él, es casi un hecho que esas fortunas no serán puestas al servicio de la reparación a las víctimas de la insurgencia como debería ser. Añadió que en el acuerdo sobre justicia no hay nada que garantice que las víctimas sean reparadas a través de las posesiones cuantiosas que pertenecerían a las FARC.

Para el procurador, es impensable que en tantos años de violencia y de participar del narcotráfico el grupo guerrillero no haya acumulado un buen patrimonio. Por eso, está convencido de que los bienes pertenecientes a la organización no pueden tener otro origen que el delito.

En criterio del alto funcionario, resulta inadmisible que ante semejante sacrificio de justicia, las víctimas ni siquiera reciban una reparación proporcional al daño que les hicieron padecer los insurgentes. Por lo pronto, la Fiscalía colombiana seguirá tratando de conseguir la cooperación de las autoridades de los países en los cuales se presume que las FARC tienen posesiones.