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Las autoridades buscan frenar el hurto a celulares con una nueva estrategia.

PREVENCIÓN

Otra estrategia contra el hurto a celulares

El director de la Policía, general José Roberto León, explicó la táctica que instrumentarán para evitar el robo a móviles. El año pasado las autoridades habían lanzado un plan para frenar este flagelo.

27 de junio de 2012

Una serie de operativos especiales que adelantará la Policía con el fin de frenar el hurto a celulares fue anunciada por el general José Roberto León Riaño, director de la Policía, quien dijo que serán activados 43 grupos de investigación y que además harán un censo de los negocios dedicados a la venta de los teléfonos.

De acuerdo con el alto oficial, el registro que se adelanta busca identificar la cantidad de negocios que en diferentes ciudades se dedican a comercializar teléfonos móviles y sus accesorios.

"A partir del primero de octubre no puede entrar a operar ningún establecimiento que no esté autorizado por los operadores para distribuir celulares o accesorios", indicó León Riaño al tiempo que precisó que quienes no estén registrados para esa fecha, serán cerrados.

El inventario de locales se inició con un diagnóstico previo que localiza el 82 por ciento de la problemática en puntos específicos de al menos 10 ciudades colombianas, incluida Bogotá.

Esa problemática está relacionada con un informe adelantado por la Dijín en el que se reseña que de las 17 bandas que se dedican al robo de celulares, hay tres organizaciones que tienen nexos delictivos en otros países, por lo que, según dijo León, ya se adelantaron contactos con integrantes de la Ameripol con el fin de desarticular todos los tentáculos de la cadena.

El director de la Policía dijo, además, que la estrategia se hará de manera integral y se pedirá el compromiso de los operadores de telefonía celular en el sentido de solicitar la información necesaria al usuario para establecer a partir del momento cuántos de los equipos reportados han sido robados.

Cabe recordar que en abril del año pasado el entonces ministro de Defensa, Rodrigo Rivera, había lanzado una estrategia similar y, en su momento, subrayó que "no queremos más celulares untados de sangre en nuestro país. No queremos más colombianos, jóvenes, madres o niños asesinados por robarles un celular".

Para esa fecha, Diego Molano también se pronunció sobre ese tema señalando que explicó que les daban 30 días a las compañías para instrumentar un protocolo de verificación de aparatos celulares y tarjetas SIM, con el fin de evitar la activación de teléfonos robados.

No obstante, durante un operativo realizado en las últimas 24 horas en Bogotá por unidades de la Policía Fiscal y Aduanera, se logró la incautación de 180 equipos sin soporte documental para su exhibición, o con problemas de identificación, dado que evidenciaron códigos adulterados.