Otro año perdido en el trancón

Termina otro año y los graves problemas de movilidad de Bogotá no encuentran soluciones reales. El alcalde de Bogotá, Samuel Moreno, ha hecho varios anuncios con propuestas que podrían tener buenos resultados, pero que hasta ahora no pasan de ser sólo eso. Desde el escandaloso episodio de los bolardos en el período del entonces alcalde Enrique Peñalosa, ningún burgomaestre había tenido una imagen favorable tan baja. Situación que hábilmente Moreno ha sabido contener con la avalancha de publicidad institucional, pero que no cambia la realidad que a diario viven los bogotanos, que indefensos ven como se deteriora la calidad de vida urbana que tuvo hasta hace muy poco la ciudad.