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Medellín ha ganado fama por sus obras disruptivas y ambiciosas. Pero nada se compara con este proyecto urbanístico revolucionario. | Foto: David Estrada Larrañeta

ANTIOQUIA

Parques del Río, en vilo

Con más de 700.000 millones de pesos en inversión, esta impresionante obra urbanística está cambiando a Medellín. Sin embargo, terminarla costaría 4 billones de pesos.  

30 de noviembre de 2019

Parques del río ha desatascado la avenida Regional de Medellín y les ha otorgado a los ciudadanos un espacio de disfrute en el que los niños se divierten y los adultos pueden pasar días de esparcimiento. Se trata de dos soterrados ubicados a lado y lado del río entre la estación Industriales del metro y la Avenida San Juan. Pese a que es una obra revolucionaria, la ciudadanía está dividida sobre su continuidad, pues los traumas que han generado los tiempos de construcción no han sido pocos.

Medellín ha ganado fama por sus obras disruptivas y ambiciosas. Pero ninguna se compara con este proyecto urbanístico que costaría 4 billones de pesos, casi un 30 por ciento del costo final que tendrá Hidroituango después de la crisis. La primera parte de la obra —dividida en fase 1A y 1B— se entregará este fin de semana, aunque algunos detalles quedarán pendientes hasta el 31 de diciembre. Así quedará listo un gran malecón con miradores sobre el río y espacios de disfrute.

En este primera etapa de Parques del Río la ciudad ha invertido más de 727.000 millones de pesos, 289.500 en la 1A, que construyó Aníbal Gaviria, y 437.500 millones en la 1B, construida por Federico Gutiérrez, pues en el proceso ha tenido que afrontar varios sobrecostos. El último se firmó el 22 de agosto pasado para adicionar recursos por 11.060 millones de pesos, una suma nada despreciable para una obra contratada el 10 de diciembre de 2015 por 161.935 millones de pesos y a la que se le han sumado 65.874 millones de pesos.

Las cifras son millonarias, pero las ganancias de la ciudad también, pues está recibiendo 322.681 metros cuadrados de espacio público, una gran oportunidad para plantar árboles y mejorar la calidad del aire de la ciudad, una tarea con la que continuará el alcalde electo Daniel Quintero, quien le dijo a SEMANA: “Sin duda este es un proyecto visionario de ciudad que debe continuar. Expresa el modelo de ciudad consagrado en el POT, amplió considerablemente el espacio público con el que contaban nuestros ciudadanos y embelleció una zona importante de la ciudad. Evaluaremos la posibilidad de encontrar los mecanismos para su financiación futura, sin embargo, hoy Medellín tiene temas más prioritarios como la movilidad, el medioambiente y la materialización de la transformación educativa. Invertiremos en esas materias y de ser posible avanzaremos en la ampliación de esta obra”.

Claramente es necesario continuar la obra, pues Medellín necesita más espacio en su avenida principal. Sucede ahora que después de los túneles, el tráfico cae en un embotellamiento porque los carriles que siguen son insuficientes. Sin embargo, Claudia Patricia Cuartas, directora técnica de Parques del Río, ha dicho que la obra no tuvo el fin de mejorar la movilidad, pues bien se sabe que el número de carriles no soluciona este problema. “Estamos generando espacio público y una integración de ambas partes de la ciudad a través del río, haciéndolo partícipe”.

La Corporación Amigos de Parques del Río, que apoya la continuidad de este proyecto por su alto impacto urbanístico, ha criticado en varias oportunidades los retrasos que tuvo la actual alcaldía para terminarla. En efecto, mientras Aníbal Gaviria construyó el tramo 1A en menos de dos años, Gutiérrez tardó casi cuatro para entregar el tramo 1B, lo que terminó en una mala imagen del proyecto ante la ciudadanía.

Hace pocos días el alcalde presentó a los paisas la obra Montaña Medellín, una gran escultura del artista suizo Ugo Rondinone, que se exhibirá en la etapa 1B, que mide 13 metros de altura y tiene cinco grandes rocas de colores traídas desde un lago de Milán, Italia, en una gestión de la Fundación Sofía Pérez de Soto, el Museo de Arte Moderno y la Alcaldía de Medellín. En ese momento, el alcalde Gutiérrez dijo estar convencido de que este sería el nuevo símbolo de Medellín.