Por la puerta de atrás

Hace dos años el Ministerio de Transporte lanzó, con bombos y platillos, un sistema que permite verificar por Internet si una licencia de conducción es legal o no, y con esto atajar la falsificación de estos documentos. Sin embargo, hoy está siendo adulterado y ha dejado colar miles de pases obtenidos en forma fraudulenta. Así, un sistema que buscaba la transparencia ha terminado dándoles la bendición a pases chimbos, y en cambio muchos que han sido tramitados legalmente no aparecen registrados en la red.

Esta paradójica situación es apenas uno de los síntomas del caos que hay en el manejo de la información del tránsito, no sólo sobre los pases, sino sobre las infracciones y registros de vehículos. El gobierno tiene registradas como válidas más de 10 millones de licencias de conducción, pero éstas corresponden a apenas seis millones de ciudadanos porque muchas personas obtienen ilegalmente varios pases, o porque al refrendar su documento, el sistema mantiene como vigentes los vencidos y a cada pase nuevo le asigna un nuevo número.

Además en el país hay 208 organismos de tránsito autorizados para expedirlos, pero no existe un cruce de la información de lo que sucede en cada una de ellas, y esta falta de comunicación ha sido el 'hueco' que los corruptos han encontrado para hacer su agosto.

En el Ministerio de Transporte dicen que ellos administran una base de datos que se alimenta con la información de los organismos de tránsito. Aseguran que el fraude sólo es posible cuando funcionarios de estas entidades, en complicidad con personas de las escuelas de conducción o de alguna de las 26 empresas autorizadas para fabricar los pases, meten información falsa y burlan el sistema. "No hay manera de crear un sistema invulnerable", dice Adriana Patiño, asesora del Ministro en materia informática.

Sin embargo, funcionarios de tránsito consultados por SEMANA aseguran que si alguien intenta darle información falsa al Ministerio, su sistema está diseñado para impedirlo. No admite dos pases con el mismo número, sólo recibe números que correspondan a un rango asignado por el Ministerio al organismo de tránsito que expide el pase y no acepta sino certificados de la escuela de conducción previamente aprobados por el Ministerio. Si algunos de estos datos no coincide con los parámetros exigidos por el Ministerio, el sistema lo rechaza automáticamente.

Es más, inclusive hay casos en los que el pase se ha tramitado legalmente y por errores de digitación al meter la información al sistema, éste lo rechaza. Por eso se da la paradoja de que alguien que haya cumplido con los requisitos de ley, a la hora de un accidente de tránsito, cuando la policía verifique su documento en Internet, éste no aparezca, y el conductor termine metido en un verdadero lío. No sólo le pueden poner una multa e inmovilizar su carro, sino que además el seguro puede negarse a pagar los daños.

Pero si hay tantos filtros, ¿cómo pueden figurar en Internet tanta licencias fraudulentas? SEMANA encontró reclamos de organismos de tránsito de Sogamoso, Duitama y Cómbita en Boyacá, Candelaria en el Valle del Cauca, La Estrella en Antioquia y Mompox en Bolívar que aseguran que cuando fueron a expedir nuevos pases ya los números estaban ocupados por otros que ellos no habían emitido. En total, entre estos seis municipios se identificaron más de 8.000 pases falsos que ya habían sido validados por el Ministerio.

A esta cifra se suman más de 3.000 que aparecen en el sistema como emitidos por Itagüí y Neiva en meses en los que ellos no estuvieron haciendo este tipo de trámite. En Miranda, Cauca, y Pasto, Nariño, se expidieron pases de sexta categoría que habilitan para conducir tractomulas. Lo extraño es que en estas ciudades hoy no existen escuelas autorizadas que enseñen el manejo de vehículos de esta categoría.

Buscando explicar estos casos, la encargada de informática del Ministerio asegura que "nos la pasamos mejorando los filtros pero los logran violar".

Una de las razones por las cuales la gente busca obtener un pase 'chimbo' es para evadir las multas de tránsito. Por ejemplo, una persona a la que le hayan suspendido su licencia por manejar borracho compra uno de estos pases y continúa tan campante. Y por la falta de conexión entre todos los organismos de tránsito no se pueden confrontar las multas de una misma persona en diferentes zonas del país. De esta forma hay conductores que han logrado acumular hasta 80 multas.

Otra explicación es que muchas personas para sacar o renovar su licencia aún acuden a tramitadores que, por ahorrarse unos pesos, consiguen un pase falso y logran validarlo en el sistema del Ministerio. Cuando la persona consulta en Internet queda convencida de que su documento es legal, pero cuando el organismo de tránsito verifica esta información encuentra el fraude.

Afortunadamente se están dando los primeros pasos para darle orden al sistema. Los organismos de tránsito que han identificado pases falsos los han denunciado a la Fiscalía, que ya ha comenzado varias investigaciones. También la Federación Nacional de Municipios ha conectado a la mayoría de estas entidades a una misma base de datos, en la que reportan sus multas por cobrar. Así, si una persona que deba multas en varios lugares quiere vender o comprar un automóvil o hacer cualquier otro trámite en cualquiera de las oficinas interconectadas, tendrá primero que ponerse al día con sus cuentas. Por esto ya se han logrado recaudar 2.000 de los 400.000 millones de pesos que hay en multas morosas.

De otra parte, por ley, el Ministerio tiene hasta el próximo año para poner en marcha el Registro Único Nacional de Tránsito (Runt), que busca poner en línea todos los organismos de tránsito del país y que en tiempo real se puedan verificar los trámites que se hagan. El Runt exige que todos los conductores actuales renueven sus pases para depurar la enorme cantidad de datos errados que se han acumulado en años de desorden administrativo. No obstante, este proyecto está en pañales.

Aunque ya se adelantó un convenio con Telecom para estudiar cuál es la mejor solución para resolver tamaño reto, apenas acaba de entrar a discusión en el Congreso un proyecto de ley necesario para que autorice la fórmula para el cobro de los trámites que se van a hacer bajo el Runt. Mientras tanto, es urgente que las autoridades encuentren cómo se está colando información fraudulenta al sistema del Ministerio, para que por lo menos se asegure de que allí sólo estén los que deben estar.