¿Por qué 217 familias colombianas celebrarán viaje del presidente Duque a China?

Habitualmente los viajes internacionales de los presidentes colombianos son objeto de críticas o burlas y pocas veces esos traslados son bien vistos por la opinión pública; pero la misión oficial que en agosto próximo hará Iván Duque a la República Popular China será festejado por 217 familias.

La explicación es simple. Ese viaje presidencial además de explorar nuevos acuerdos y oportunidades comerciales será aprovechado para protocolizar la firma de un nuevo tratado de cooperación internacional que daría vía libre al traslado, por razones humanitarias, de colombianos condenados en China.

Dicho en otras palabras, el nuevo tratado buscará permitir que el Estado colombiano pueda repatriar a los presos existentes en ese país y que en la mayoría de los casos han sido condenados por tráfico de drogas, a penas extremas como la muerte o cadena perpetua. La salvedad que hacen ambos mandatarios, es que ese traslado de condenados solo se hará en casos especiales y por razones humanitarias.

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“Se trata de la suscripción de un tratado de cooperación internacional entre las dos naciones para el estudio de las solicitudes de traslado de colombianos condenados y privados de la libertad en China; y de ciudadanos chinos condenados y privados de la libertad en Colombia, por diferentes delitos”, explicaron desde el ministerio de Justicia a través de un comunicado oficial

En efecto, el anuncio fue hecho este lunes 22 de julio por Juanita López Patrón, viceministra de Promoción de la Justicia. Desde la Casa de Nariño, la funcionaria explicó el alcance que tendrá el mencionado tratado, el cual contará con normas especiales para el traslado de colombianos condenados por diferentes delitos en el país asiático.

La Viceministra insistió en que “dicho tratado busca establecer reglas claras para los dos países con el fin de que a futuro se les pueda conceder el traslado a los condenados hacia su país de origen, y puedan allí cumplir su pena; esto con especial prioridad en casos por razones humanitarias”, anotó.

También explicó el curso normal que tendrá dicho tratado para ser incorporado al ordenamiento jurídico colombiano, una vez sea firmado por los presidentes de ambas naciones, “(…) deberá ser presentado al Congreso de la República, el cual lo avalará para que sea vinculado al ordenamiento jurídico nacional. Y luego de su aprobación por parte del Presidente de la República debe pasar a manos de la Corte Constitucional para que sea dicha corporación la que determine si se ajusta o no a la Carta Política colombiana”.

El anuncio de esa cooperación internacional llega en un momento crítico ya que en la actualidad 217 colombianos están presos en China, acusados por narcotráfico. De ese grupo de sentenciados, 4 de ellos fueron condenados a pena de muerte y 14 a cadena perpetua.

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De hecho, los colombianos aún no olvidan la trágica historia del primer compatriota ejecutado por orden judicial en ese país. Se trató del caleño Ismael Arciniégas, de 74 años de edad, condenado a la pena de muerte por intentar ingresar a ese país con cuatro kilos de cocaína. Su ejecución se realizó a finales de febrero de 2017.

Otra historia que también se robó la atención de los colombianos fue el caso de la bella modelo y futbolista paisa, Juliana López, quien en mayo del año pasado iba a ser condenada a la pena de muerte por transportar 610 gramos de cocaína; pero luego el Tribunal Intermedio Popular de China se la conmutó por 15 años de cárcel.

Cada una de las 217 historias de colombianos presos en China son trágicas, no solo por el dolor de estar en un país lejano sin poder hablar o ver a sus familias, sino porque las condiciones de los centros de reclusión son tan degradantes, que incluso muchos de los condenados han pensado en suicidarse.

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El tratado que se firmará con el gobierno de la República Popular China será recíproco y en ese sentido, de acuerdo con la Dirección de Asuntos Internacionales del Ministerio de Justicia, en Colombia hay seis ciudadanos chinos condenados por la justicia local.

Desde ese ministerio también informaron que las dos naciones han trabajado de la mano para mejorar el acceso a la justicia colombiana y que prueba de ello es que el gobierno asiático donó más de 13.000 bienes avaluados en 5.000 millones de pesos para la dotación de 110 casas de justicia y 42 centros de convivencia.