La paz se hace desde los territorios

Una cosa es la paz en La Habana y otra muy diferente la reconciliación desde los territorios. Así lo manifiestan los participantes en el tercer encuentro de Reconciliación Colombia, que en esta ocasión congrega 15 departamentos de las regiones del Caribe y Orinoquía y se realiza en Barranquilla.

El gobernador de Meta, Alan Jara, quien fue secuestrado durante siete años por las FARC, aseguró que la reconstrucción de paz comienza desde los territorios. 

“La paz no se hace con firmas sino con hechos cumplidos y eso es lo que quiero demostrar aquí”, expresó Sandra Gutiérrez, presidente de la Acción Comunal de la vereda Mesetas, en Villavicencio (Meta).

Esta líder comunal relató que en su corregimiento no esperan a que el Estado llegue sino que la comunidad misma resuelve como puede sus propios problemas. Para ello, la Policía les ofreció el apoyo de 50 reinsertados a mediados del 2012, dentro de los cuales había personas que anteriormente la habían secuestrado. 

“Fue una experiencia fuerte pero debía asumir con gallardía y sobreponerme a mi persona para trabajar por la comunidad. Pasó algo que está mejorando nuestra calidad de vida, pues pudimos hacer actos de reconciliación”, explicó. 

Otro de los ejemplos de construcción de paz se dio en Macayepo, Bolívar. Allí nació Rodrigo Antonio Mercado, alias 'Cadena', y esto significó una estigmatización constante de los pobladores de dicho corregimiento pues los vecinos de otros lugares de Montes de María los tildaban de paramilitares, como explicó el líder de Macayepo Ciro Canoles. 

Los mismos pobladores, encabezados por Canoles, promovieron los diálogos con otros municipios, marchas conjuntas y partidos de fútbol para que supieran que así como había personajes macabros de la ultraderecha también había ciudadanos que los padecían y no tenían ninguna posición política.

"Empezamos a trabajar en el 2009 cuando ni siquiera se hablaba de reconciliación", indicó. Al igual que en la experiencia en Mesetas, Villavicencio, esta fue una iniciativa de la misma comunidad que no contó con el apoyo económico ni político del Estado.

"Al gobierno no le ha costado un peso, la comunidad lo ha hecho, pero ahora sí se necesita inversión social para que esto pueda perdurar", señaló Canoles. 

La idea de que la paz no sólo está en La Habana sino que se construye desde los territorios también la comparte Juan Carlos Gossaín, gobernador de Bolívar, quien también aseguró que “no hay nada más importante en la agenda política que empezar a pensar en la reconciliación”.

Si bien es cierto que la paz y la reconciliación se construyen desde los territorios, las mismas regiones se sienten solas en ese esfuerzo y le piden al Estado y a los empresarios que también pongan de su parte y se comprometan de fondo. 

“Es la hora de decirles a los empresarios que la acción más inteligente es apostarle a la reconciliación del país porque así aminora la violencia”, indicó Alba Lucía Varela, directora de Fundación para el Desarrollo Humano Comunitario (Fundehumac) de Magdalena. 

El mismo gobernador Alan Jara pidió una mayor presencia de la institucionalidad nacional, pues, como asegura, los territorios no tienen la capacidad suficiente de estar solos en este esfuerzo de paz. “No hay cosa que duela más que esa indiferencia y ese silencio”, aseguró. 

Este llamado a no abandonar las regiones se hicieron en los dos encuentros anteriores, entre Gran Tolima y Antioquia (en Medellín) y Pacífico y Centro (en Cali). Además, los ponentes de este diálogo que se realiza en Barranquilla han coincidido en que el Estado es centralizado y de esa manera no podrá ser exitoso ningún proceso de reconciliación ni de paz. 

El evento congrega a los departamentos de Atlántico, Bolívar, Magdalena, Sucre, Córdoba, Cesar, La Guajira, San Andrés, Arauca, Meta, Vichada, Guaviare, Casanare, Guainía y Amazonas.