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¿Qué información le robaron a la Corporación Nuevo Arco Iris?

La organización interpuso una denuncia en la Fiscalía después de que desconocidos se llevaron de sus instalaciones 11 computadores, un servidor y dos discos duros con información sensible sobre el conflicto que han recopilado en 25 años de trabajo investigativo.

19 de marzo de 2019

Una vez más la corporación Nuevo Arco Iris es víctima del robo de información. Sin levantar sospecha, este lunes en la madrugada un grupo de desconocidos entró por el techo a la edificación, desactivaron las alarmas y salieron por la puerta principal cargados con 25 años de información sobre el conflicto, después de desartonillar todas las cerraduras. 

El primer aviso lo dio la secretaria a las dos de la tarde. La puerta de las oficinas estaban de par en par, los cajones abiertos, las carpetas amontonadas, el piso tapizado con documentos sueltos caídos, pero lo más insólito, es que no habían un sólo computador sobre los escritorios. 

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"Se llevaron documentos confidenciales sobre memoria histórica colectiva de la Corriente de Renovación Socialista que se desmovilzó durante el gobierno de César Gaviria— y de las víctimas con las que trabajamos", informó la corporación a través de un comunicado. 

De acuerdo con el primer balance: no aparecen 11 computadores, un servidor, dos discos con una tera de información cada uno, dos impresoras, un video beam y una cámara. "Los delincuentes venían por la información porque dejaron objetos de mayor valor económico", le dijo a SEMANA Fernando Cuervo, presidente de la corporación. 

Se llevaron información sobre el fenómeno de la parapolítica, la paraconomía e investigaciones sobre personalidades de la vida pública como el exgobernador de La Guajira, Kiko Gómez.

Aunque la Policía les solicitó que no tocaran nada y reportaran los hechos ante la Unidad de Reacción Inmediata (URI) más cercana, allá les dijeron "que no recibían denuncias después de las cinco de la tarde  y "como no habían cogido a nadie en flagrancia era mejor que barrieran y levantaran todo"

Entre el material que se llevaron los delincuentes hay información sensible sobre el fenómeno de la parapolítica, la paraconomía e investigaciones sobre personalidades de la vida pública como el exgobernador de La Guajira, Kiko Gómez Cerchar. De hecho, desde hace un tiempo la coorporación viene trabajando en un informe sobre las organizaciones sucesoras del paramilitarismo. 

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No será nada fácil para las autoridades encontrar a los responsables. A pesar que los directivos de la corporación denunciaron los hechos ante la Fiscalía este martes, se perdieron las pesquizas de la escena. Pero eso no es todo, la única cámara que había instalada por la Unidad Nacional de Protección ante las constantes amenazas, no funciona. No ha tenido eco la solicitud que la organización radicó desde el 2017 ante la UNP para que la arregle. 

La Corporación Nuevo Arco Iris es un testimonio vivo del país que hay por desarrollar y la democracia por fortalecer después de un proceso de paz. Diez años después de facilitar la reincorporación a la vida civil de 650 combatientes de la Corriente de Renovación Socialista (CRS), la corporación se convirtió en un Centro de Pensamiento de desarrollo de ideas, investigación y programas sociales dirigidos a la reconciliación en Colombia. 

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"La Fundación Paz y Reconciliación rechaza categóricamente este ataque contra las organizaciones defensoras de la paz y los derechos humanos, y exige a la Fiscalía General de la Nación y a la Policía Nacional, investigar y capturar a los autores intelectuales y materiales de estos graves hechos", informó la fundación que dirige el reconocido politólogo León Valencia, quien años atrás hizo parte de la corporación Nuevo Arco Iris. Valencia en su momento fue también víctima de un plagio similar de información. 

El primer robo ocurrió en 2008 cuando desconocidos se llevaron el computador de Luisa Margarita Gil, coordinadora del Programa de Atención a Poblaciones Afectadas por el Conflicto. Meses más tarde el episodio le ocurrió al al expresidente de la Corporación Nuevo Arco Iris, Fernando Patiño, a quien le fue hurtado el portátil durante la madrugada. Días después, un grupo de hombres ingresó a la casa de Ariel Ávila, coordinador del Observatorio de Conflicto Armado, de donde se llevaron varios equipos con información.