“Si la vida íntima va a ser un delito, nos devolvemos a los días de la Inquisición”

Una de las pruebas con las que la Procuraduría abrió investigación al general Rodolfo Palomino, director de la Policía Nacional, por su presunta participación en una red de prostitución de agentes de la Policía, es un escandaloso video que terminó provocando la renuncia del viceministro del Interior, Carlos Ferro.

En el video, del año 2008, Ferro, quien en ese entonces era senador, habla abiertamente con un agente de Policía sobre sus relaciones homosexuales, a la vez que aparecen concertando un encuentro íntimo.

La grabación ha generado una verdadera controversia pues si bien esta conversación grabada por el entonces alférez Ányelo Palacios (presunta víctima) hace parte de la órbita íntima de estas personas, la supuesta prueba, junto con otros elementos, ha servido para sustentar que en la red conocida como la ‘Comunidad del anillo’ habrían participado congresistas.

El senador Roy Barreras es copresidente del Partido de la U, al que pertenece Carlos Ferro. Fue quizás el único dirigente que salió a respaldarlo luego de la difusión del video y tras la renuncia que presentó a un cargo, al que precisamente había llegado en representación del partido del presidente Juan Manuel Santos.

Para Barreras, el asunto es vergonzoso y el video puede resultar “obsceno y procaz”, pero exigió poner un límite para respetar la vida íntima y privada de los adultos homosexuales que, de manera voluntaria y consentida, como se advierte en este caso, deciden tener relaciones con personas del mismo sexo.

“El día que crucemos el límite y empecemos a sancionar y castigar a las personas por su vida íntima habremos retrocedido a épocas de la Inquisición”, asegura.

Para Roy Barreras no existe delito alguno que comprometa al hoy ex viceministro Ferro. “El acoso sexual, el abuso sexual en todas sus formas, el sometimiento son delitos miserables y reprochables que deben ser castigados. Pero hay que saber muy bien cuándo se comete un delito y cuándo hace parte de la vida íntima y personal, de relaciones consentidas entre adultos, para no cometer injusticias y para no crucificar públicamente a las personas y a sus familias”.

En este caso, dice el senador de La U, el video no muestra que exista ningún tipo de acoso. Por el contrario, se aprecia una relación consentida entre adultos. Si se comprueba que Ferro cometió un delito, Barreras exige para él todo el castigo, pero de lo contrario, dijo que “el día que declaremos delito la vida sexual íntima nos habremos devuelto a la Inquisición”.

Barreras también calificó de “acto miserable” la grabación del video, pues demuestra que el único propósito de quien lo grabó era “hacer daño” y que los directos perjudicados serían los dos hijos menores de edad de Carlos Ferro.

Este martes comienzan las sesiones extraordinarias en el Congreso y Ferro, encargado de las relaciones políticas entre el Gobierno y el Capitolio, será uno de los ausentes.