Home

Nación

Artículo

El viernes de la semana pasada a las 11:55 de la noche, el juez 55 de control de garantías, negó la petición de libertad que solicitaron Laura Moreno y Jessie Quintero. | Foto: DANIEL REINA ROMERO/SEMANA

JUDICIAL

"Sé que ellas tuvieron que ver con el crimen"

El padre de Luis Andrés Colmenares, el joven universitario de Los Andes muerto en el parque de El Virrey, habló con SEMANA sobre el caso.

29 de septiembre de 2012

El más reciente episodio por el caso de la muerte de Luis Andrés Colmenares ocurrió el viernes de la semana pasada. Ese día un juez adelantó una audiencia para definir si dejaba en libertad a Laura Moreno y Jessie Quintero quienes desde hace casi un año tienen la casa por cárcel.

Los abogados de las dos universitarias argumentaron que el pasado 21 de septiembre se cumplieron los 120 días hábiles desde de la presentación del escrito de acusación sin que se iniciara el juicio formal en contra de las dos estudiantes por lo que consideran justo pedir la libertad por vencimiento de términos. Hacia las siete de la noche Jessie sorprendió a los asistentes a la audiencia al decirle al juez que ella renunciaba a insistir en pedir su libertad y que le otorgara ese derecho a su amiga Laura ya que, según ella, las dilaciones que sufrió el caso de las dos jóvenes habían sido culpa de su estrategia de defensa y ello había terminado perjudicando a su compañera. Sin embargo, a las 11:55 de la noche, tras una tediosa audiencia de 10 horas, el juez 55 negó la libertad de las dos estudiantes al considerar que, según sus cálculos, aún no se había excedido el tiempo para comenzar el juicio. SEMANA habló con Luis Colmenares, padre del joven universitario muerto, sobre estas y otras decisiones sobre el caso que ha llamado la atención de todo el país.

SEMANA: ¿Qué piensa de la decisión que tomó el juez 55 al negar la libertad de Laura y Jessie?

LUIS COLMENARES:
Fue la decisión del juez y, además, no había ocasión para que se esté hablando de un vencimiento de términos. Si uno hace cuentas y empieza a revisar, lo que ha venido dilatándose ha sido más bien por el lado de la defensa (de las acusadas), cada vez con sus recursos que han hecho que eso se haya extendido durante tanto tiempo, no es por parte nuestra ni de la Fiscalía. Nuestro abogado, más bien, se ha abstenido de recurrir a decisiones para que esto sea mucho más ágil. Si hubiesen quedado en libertad eso no quiere decir que ellas fueran inocentes. Yo, por lo que conozco, por las pruebas a las cuales he tenido acceso, sé que ellas tuvieron que ver con el crimen. Pero como siempre lo hemos dicho, respetamos las decisiones judiciales.

SEMANA: Hace unas semanas el juez rechazó que la Fiscalía usara las pruebas técnicas y científicas. ¿Cómo recibió esa decisión?

L.C:
Pues no deja uno de lamentar la situación, sobre todo porque siempre se ha dicho que en nuestro ordenamiento jurídico prevalece lo sustancial sobre lo procedimental. Nosotros creemos que esas pruebas, en cualquier otro momento del juicio, podrían ser tenidas en cuenta para refutar algún planteamiento que la defensa pretenda hacer valer en lo que tiene que ver con el sitio, el caño, y tantas otras cosas, como el accidente que suponen ellos y que nosotros estamos seguros que fue un homicidio. De todas maneras, si no quedaron incorporadas en ese momento, en el desarrollo del juicio igual se pueden hacer valer.

SEMANA: En ese momento el juez argumentó que rechazó esas pruebas porque eran extemporáneas y la Fiscalía había sido negligente. ¿Qué opina?

L.C:
Sí, eso fue así al comienzo del caso. Pero fue una irresponsabilidad del fiscal 298 porque a él fue a quien se le hizo la solicitud de que practicara esas pruebas. Se la hizo, en su oportunidad, mi cuñado, que fue quien al comienzo empezó a intervenir en el desarrollo del proceso como abogado nuestro. Sin embargo, el fiscal 298 recibió esa comunicación y nunca le dio el trámite a eso. Que no pretenda descolgar su responsabilidad en donde realmente la tuvo de manera total y absoluta, porque él fue el que no hizo nada.

SEMANA: ¿Cree que la Fiscalía falló al comienzo del caso?

L.C:
Sí, por supuesto. Cuando la doctora Martha Lucía Zamora retoma el caso, por una reasignación que hace el fiscal, ella precisamente por su rigor, su inteligencia y conocimiento encuentra que, efectivamente, lo que estaba pidiendo mi cuñado era necesario que se llevara a cabo. Entonces emprende la aplicación de esas pruebas y las obtiene (con el apoyo de la Empresa de Acueducto de Bogotá, de la Universidad Nacional, del Hospital de la Misericordia, todos ellos intervinieron en el desarrollo de esas pruebas).

SEMANA: ¿Esa decisión dejaría las declaraciones de los tres testigos como una de las pruebas más importantes que tienen sobre el caso?

L.C:
Claro, porque ahí lo que se demuestra es que esa noche no hubo la cantidad de agua que ellos han querido dar a entender que hubo para que fuese arrastrado el cuerpo de mi hijo. Porque, además, el cuerpo de mi hijo nunca fue arrastrado, se demuestra que efectivamente a él lo pusieron ahí y que además de eso lo golpearon de manera inmisericorde.

SEMANA: ¿Qué piensa sobre los tres testigos del caso, porque todos son bastante polémicos y su credibilidad ha sido bastante cuestionable?

L.C:
Yo les doy toda la credibilidad del caso porque estoy convencido de que ellos estuvieron en el parque de El Virrey esa noche y presenciaron todo lo que sucedió.

SEMANA: ¿Cree que sería arriesgado por parte de la Fiscalía ir a juicio solo con los testigos sin que en el futuro se pudieran aportar las pruebas técnicas?

L.C:
Es que hay pruebas técnicas adicionales, las únicas no son las que se expusieron en la audiencia anterior. Es que adicionalmente a las que ya se tienen se quería incorporar esas también. Pero pruebas técnicas hay todas las que quieras: hay más de 150 pruebas, tanto testimoniales como materiales, que demuestran que esas personas están involucradas en el crimen. Y son diferentes a las que el juez no aceptó.

SEMANA: Hace algunas semanas una juez los demandó a ustedes. ¿Por qué se produjo ese episodio?

L.C:
Porque la juez supone que mi esposa la ofendió con algunas palabras que le dijo pero eso no es cierto. Mi esposa nunca se dirigió a ella después de que produjo el fallo. Además, entiendo que a mí también me vincula y yo ese día ni siquiera estuve en la audiencia porque el día que empezó yo estaba en Medellín. Y ella me denuncia porque yo dije que había visto al abogado Mario Iguarán allá en su despacho y si yo lo vi, qué otra cosa puedo decir, porque lo vi allá adentro. Además no soy solo yo el que lo vio. Allí está el video que se hizo público en los medios.

SEMANA: ¿Cómo recibieron la decisión de otorgar la libertad de Carlos Cárdenas, el otro implicado en el caso?

L.C:
Una decisión con la que uno no puede estar tranquilo, pero esa fue la decisión del juez, la respetamos. Sin embargo, él está llamado a la audiencia de acusación el 17 de octubre, esperemos entonces que a partir de allí eso se siga desarrollando.

SEMANA: ¿Cómo ha visto el tema de los medios a lo largo de este caso?

L.C:
A mí me parece que eso ha sido supremamente importante. Yo creo que la presencia de los medios es lo que ha permitido que se esté ejerciendo un control social sobre el desarrollo del proceso, que hace que la comunidad general esté vigilante de las decisiones que se lleguen a tomar. Yo lo considero así, mi familia también lo cree. Se está presentando un control social, de la comunidad, un control de la gente, del país, de ver las injusticias que se han cometido, del crimen que se cometió.

SEMANA: ¿No se han sentido vulnerados y que todo el caso se ha convertido en un 'show' mediático?

L.C:
De ninguna manera, ni mi familia ni yo.