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Carlos Baena minga
El viceministro del Interior Carlos Baena se refirió a la minga. | Foto: SEMANA

POLÍTICA

“Sigue abierta la puerta del diálogo, como siempre ha estado”: el mensaje del Gobierno a la minga

Carlos Baena, viceministro del Interior, dijo que el presidente Duque siempre ha estado dispuesto al diálogo con la minga. “Para dialogar no se necesita acudir a ultimátums”, aseguró.

20 de octubre de 2020

La minga se concentró este lunes en la plaza de Bolívar, donde miles de indígenas fueron recibidos por la alcaldesa Claudia López. La minga esperaba al presidente Iván Duque y, ante su ausencia, decidieron hacerle un “juicio político” y ubicar una silla vacía.

El Gobierno Nacional ha dicho que está dispuesto al diálogo, pero que no aceptan condicionamientos. El presidente Duque dijo que debe haber disciplina para evitar rebrotes y que si hay que dar discusiones se darán en el marco de la democracia, “sin que tenga que haber emplazamientos ni ultimátums, ni invocar juicios que no tienen asidero”.

SEMANA habló con el viceministro para la Participación e Igualdad de Derechos, Carlos Baena, quien ha venido trabajando desde el Ministerio del Interior con las comunidades indígenas y quien manifestó que los acuerdos se han cumplido y la posibilidad del diálogo siempre ha estado abierta.

SEMANA: ¿Cuál es el balance del Gobierno frente a la minga con la jornada de ayer?

Carlos Baena (C.B.): Ayer nos reunimos en un Puesto de Mando Unificado (PMU) con toda la fuerza pública, junto al ministro de Defensa y la ministra del Interior, varios viceministros, con el fin de brindar todas las garantías y hacerle el acompañamiento a la minga.

SEMANA: ¿Cuál es el mensaje del Gobierno a la minga?

C.B.: Que sigue abierta la puerta del diálogo como siempre ha estado. Nosotros tenemos un espacio formal de diálogo creado con el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) que se llama la “Comisión Mixta”, que fue creada mediante el Decreto 1811 y en la cual hacemos seguimiento a todos los acuerdos presupuestales. En el caso del CRIC son acuerdos que provienen de la minga suroccidente de 2019 y que ascienden a 700.000 millones de pesos, los cuales se han venido cumpliendo con mucho rigor. Vamos en un 82 por ciento de cumplimiento de las asignaciones presupuestales. En el 2019 se apropiaron 92.000 millones; en el 2020, 236.000 millones y para el presupuesto de 2021 ya quedaron asignados 241.000 millones. Estos acuerdos son para el buen vivir de las comunidades indígenas, muy importantes en materia de vivienda, se podrán construir 1.500 viviendas y se hará un mejoramiento de 800 más.

Con la Agencia de Desarrollo Rural, para proyectos productivos, se han asignado más de 25.000 millones de pesos para productos en café, cacao, entre otros. Con la Agencia Nacional de Tierras se han asignado 30.000 millones de pesos para la adjudicación de tierras. Con la UNP se ha hecho un fortalecimiento de la guardia indígena, para la caracterización y dotación de elementos de seguridad propia de ellos con 498 millones de pesos. En salud, el saneamiento financiero de la EPS indígena, que se llama la Asociación Indígena del Cauca, con una inversión de 74.000 millones de pesos. Para el fortalecimiento de la Universidad Autónoma Indígena Intercultural del Cauca, la UAIIN, se destinaron 43.000 millones de pesos. En las emisoras comunitarias, con el Min. Tic se han hecho inversiones por más de 2.500 millones de pesos. Para el tema de fortalecimiento de las comunidades, del gobierno indígena y las autoridades se han destinado 2.600 millones de pesos.

Para poder lograr esto ha habido mucho diálogo y mucha interacción porque en la Comisión Mixta hacen presencia 11 ministros. La única manera de poder cumplir los acuerdos así es con un diálogo continuo, con la utilización de ese espacio para poder dialogar y ponernos de acuerdo.

La minga marcha en Bogotá
Recorrido de la minga, llegando a la Plaza de Bolívar. Con la presencia de la alcaldesa de Claudia López. | Foto: Esteban Vega La-Rotta

SEMANA: Con todo este balance, ¿por qué cree que la minga no se ha querido reunir con las delegaciones que ustedes han puesto y por el contrario siguen planteando exigencias y sobre todo reunirse con el presidente Duque?

C.B.: Realmente no entendemos porque si uno no estuviera cumpliendo, si el Ministerio no estuviera haciendo la tarea, cumpliendo los acuerdos, si hubiéramos sido evasivos en el diálogo o incumplidos, pues uno entendería que hay una necesidad imperativa de hablar con el presidente. Pero en condiciones de pandemia, y en un ambiente de cumplimiento de acuerdos no se entiende por qué la exigencia. No obstante, las puertas del diálogo están y seguirán abiertas para establecer una ruta de trabajo y avanzar en los temas que ellos han propuesto. Ahora bien, nosotros en la Comisión Mixta recibimos un documento hace unos días donde ya en la misma comisión el CRIC nos planteaba que analizáramos el tema de territorio y nosotros a ellos les pedimos que especificaran el tema, dentro del tema territorial y qué temas específicos querían que asumiéramos. Es decir que ya el CRIC al habernos enviado ese mensaje estaba dispuesto a ser ese tipo de análisis en esa comisión en la cual ellos mismos nos propusieron que lo analizáramos. Fue una sorpresa cuando nos dijeron que había minga y se trasladarían a Bogotá. Obviamente nosotros somos respetuosos de esas decisiones pero sí fue sorpresivo porque habíamos ya acordado que en esa comisión íbamos a empezar a analizar esos temas.

SEMANA: La minga que llegó a Bogotá ha dicho que si no es con el presidente, no dialogan, ¿Qué posibilidad hay de que el presidente Duque se siente a conversar con la minga, no sería más fácil para llegar a unos acuerdos?

C.B.: El presidente ha intentado hablar con la minga en varias oportunidades, él ha ido al Cauca. Lo que pasa es que no se ha podido dar esa situación por circunstancias que en su momento el país conoció, por temas de seguridad, pero el presidente es un presidente dialogante así como el Gobierno. Entonces ese espacio siempre estará abierto y esa posibilidad, pero no en un ámbito de exigencia cuando el Gobierno ha cumplido, o como el mismo señor presidente ha manifestado en términos generales, que para dialogar no se necesita acudir a exigencias o ultimátums.

SEMANA: ¿Cómo ha sido el trabajo con la Defensoría, qué se ha adelantado?

C.B.: La Defensoría ha actuado como un facilitador para trabajar en esa hoja de ruta de especificar los temas que ellos han planteado. Hay temas que deben ser especificados porque son muy generales. Por ejemplo, ellos hablan de democracia, pero ahí hay muchos elementos y seguramente algunos temas ahí son competencia del Congreso de la República. Ellos hablan de temas como por ejemplo homicidios contra líderes sociales, en esos temas ahí también hay que vincular a la Fiscalía que es la que hace las investigaciones y el esclarecimiento de los crímenes. Ese tipo de clarificación de los temas es lo que llamamos la hoja de ruta para ver en qué consiste cada tema y en qué ámbito y espacio se debate y con quiénes.

SEMANA: Con la Alcaldía de Bogotá se han presentado algunos desacuerdos, y la alcaldesa Claudia López ha dicho que deberán trabajar de la mano para establecer las medidas de bioseguridad de la minga, ¿Qué se ha hablado desde el Gobierno sobre el trabajo conjunto de la Alcaldía?

C.B.: Desde el Gobierno se ha tenido total disposición para dar cumplimiento a la decisión judicial y hacer ese trabajo con la señora alcaldesa como fue determinado por la justicia en el fallo que se dio a conocer ayer.

SEMANA: ¿Qué cree que pueda pasar hoy y esta semana con la jornada que la minga ha dicho que continuará en la capital ante la negativa del presidente para reunirse con ellos?

C.B.: Nosotros esperamos que la minga acepte esa propuesta presentada por la señora ministra del Interior, la doctora Alicia Arango, en el sentido de establecer la hoja de ruta y de acuerdo a eso comenzar el diálogo.

SEMANA: Desde el Gobierno uno de los factores que más ha preocupado es el tema del contagio en medio de la pandemia, ¿Cuál es esa preocupación?

C.B.: Definitivamente nos preocupa porque está demostrado que cuando hay aglomeraciones aumentan los riesgos y hay mucha preocupación por un rebrote en el país. Colombia ha hecho un esfuerzo inmenso por lograr la reactivación y procurar que bajo ningún punto de vista haya algún rebrote y sobre todo proteger la vida de los integrantes de la minga así como de todos los ciudadanos.