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La titiritera argentina que lucha por vivir tras ser asaltada en San Andrés

La turista Teresa Grossi, de 66 años, paseaba por las calles de la isla cuando su bolso le fue arrebatado violentamente, provocándole un caída y serias heridas en la cabeza. La solidaridad es la moraleja.

17 de julio de 2019

Las vacaciones de la turista argentina Teresa Grossi en la isla de San Andrés terminaron intempestivamente, como ella nunca lo hubiera imaginado: con un serio trauma craneoencefálico que obligó a los médicos que la tratan, en la UCI del Hospital Departamental, a inducirla a un coma.

Su amiga, Susana Erdfehler, caminaba con ella por la avenida Newball el pasado domingo en la noche hacia el hotel. Cuando faltaba una cuadra, según contó en un video colgado en Facebook, “se apareció una moto […]. De repente veo que cayó al suelo”.

Acababan de arrebatarle violentamente el pequeño bolso que llevaba consigo, en el que nada más llevaba su celular, unos 60.000 pesos y sus lentes para leer. En el hecho Teresa cayó de bruces contra el andén y se golpeó fuertemente el rostro y la cabeza.

Una pareja que pasaba por allí las llevó hasta el centro hospitalario de la isla, donde la mujer, pese a las lesiones, aún estaba consciente. Apenas le suturaron la piel por encima de una de sus cejas. En la tarde del lunes, dijo Susana, “estaba dormida, no la podía ni levantar. Le decía ‘incorporate’, pero no entendía ella, no me escuchaba. Empezó como a convulsionar, empezó a hablar pavadas”.

El especialista determinó que era preciso tomarle urgentemente una tomografía y posteriormente decidió que “había que operarla o si no se muere”, narró. Susana fue intervenida quirúrgicamente esa misma tarde y se encuentra en coma inducido. Son 72 horas cruciales a la espera de que poco a poco pueda recuperar la conciencia.

La Policía, entretanto, investiga y analiza los videos de vigilancia de los sitios en donde estuvieron las turistas y ofrecieron una recompensa de cinco millones de pesos para las informaciones para dar con los responsables del asalto.

Títeres: su pasión

El artista titiritero Daniel Melluso, desde la provincia de Córdoba, en Argentina, encabezó un llamado de ayuda en Facebook: “Necesitamos saber que colega colombiano o argentino que esté de gira por allá puede acercarse a san Andrés a dar una mano a su amiga Susy”.

En diálogo con SEMANA señaló que los reportes sobre la salud de Teresa son alentadores. “Está mejor, evolucionando bien, se le desconectó ya de la sedación y ha empezado a reaccionar”, manifestó.

La ayuda ha sido abrumadora, expresó. “Tremenda. Nos ayudó una compañía de títeres que estaba de gira por Colombia y otra compañía de Bogotá. Se conectaron personas de la isla, un hotel nos puso a disposición alojamiento y comida, muchos colegas, amigos, familias de la isla han aparecido a colaborar. He tenido que decir que paren”.

“En el universo titiritero somos muy solidarios. Fue tirar la botella sabiendo que alguien más la iba a recoger”, agregó.

Melluso fue quien en 1986 introdujo a Teresa y a su esposo al mundo de los títeres. Ella era originalmente psicopedagoga y en aquel entonces tomaron un taller en el que se enamoraron del oficio.

El marido fallece en 2016, pero su legado permanece en casa cultural La casa de los titiriteros que Teresa regenta Mina Clavero en la región de Traslatierra (Córdoba), junto con la compañía de títeres Bienteveo que varias veces se ha presentado en festivales, incluso en Bogotá, Medellín, Cartagena y Cali. De hecho, en el perfil asociado de Facebook aparece que tuvo estudios en la Universidad de Antioquia, pero no puntualiza cuáles.

“Susana solo quería huir del invierno cordobés”, contó Melluso, al tiempo que señala que uno de sus amigos será quien viaje y releve a Susana, quien regresará en la fecha estipulada, el 25 de julio. “Gracias al pueblo colombiano por la solidaridad y la buena onda”, concluye.

Sin familiares

Marcelo Balbi, cónsul de la República Argentina en Bogotá, coincide en manifestar en que las noticias sobre la salud de Teresa son halagüeñas. “Tenemos que hoy tuvo una mejoría, no tiene riesgo vital y pareciera que evoluciona favorablemente”, dijo a este medio.

Informó que el consulado ha asistido a la paciente y a su acompañante colaborando en la comunicación con sus allegados en su país de origen, pendientes de que el seguro de asistencia responda, verificando que sea atendida y realizando gestiones con la Policía de Turismo de San Andrés.

Básicamente son los allegados de la mujer quienes han tratado de apoyarla. “No tengo conocimiento de familiares, salvo un hermano mayor que tiene mas de 80 años”, manifestó el diplomático que explicó que uno de los llegados de la paciente llegará a la isla para asistir a la recuperación.

Balbi confirmó que Susana partirá el 25 de julio y que “pasada la emergencia” colaborarán en la gestión ante las líneas aéreas que corresponda para el regreso de Teresa “esperar que salga por completo del coma inducido y se recupere para lo que podría ser una eventual rehabilitación en Argentina”.

La solidaridad y las fuerzas están puestas en la recuperación de una mujer que en su ejercicio artístico no ha hecho más que arrancar sonrisas a chicos y grandes en sus funciones. Varios mensajes en las redes sociales dan cuenta del cariño de sus espectadores en este mal momento, pero revelan aún más aquellos escritos después de las funciones.

Este, por ejemplo es de enero de 2019: “Vinimos en Semana Santa de 2018, morimos con el perro, el policía y ‘Amarrete’, nos encantó. Hoy volvimos a ver un espectáculo que nadie debe dejar de ver”. Un deseo que Teresa, seguramente, también comparte.