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UN AÑO CARO

El costo de la persecución de Escobar desde que se fugó va en 10.000 millones de pesos.

9 de agosto de 1993

DENTRO DE UNA SEMANA se cumple un año de la fuga de Pablo Escobar de la cárcel de la Catedral. Sobre este episodio se han hecho toda clase de balances y análisis. Y hay uno que no podía faltar: el económico. Cuánta plata se ha gastado durante estos 12 meses en la persecución del jefe del cartel de Medellín? Según cálculos de las autoridades que han estado al frente de esta gigantesca empresa, la cifra asciende a la no despreciable suma de 10 mil millones de pesos. Un promedio mensual de 833 millones. Algo así como 27 millones por día o, para ser más exactos, un millón 100 mil pesos por hora.
Esa es la cifra que resulta de sumar todos los gastos, que van desde la comida y el alojamiento de los dos mil hombres que integran el Bloque de Búsqueda hasta las recompensas que se han pagado a los delatores. A ese balance ecónomico hay que sumarle el costo de los últimos cinco años de guerra, más la compra de terrenos y construcción de la Catedral, que se calcula en 30 mil millones de pesos. Es decir, que en plata blanca el país ha invertido en la persecución de Escobar 40 mil millones de pesos.
Los 10 mil millones de pesos del último año se han invertido en una serie de recursos -armamento, municiones, equipos de comunicacion- indispensables para enfrentar en las mismas condiciones a un enemigo que ha destinado miles de millones de dólares para armar su ejercito privado. A cada soldado y policía que integra el Bloque de Búsqueda se le dotó de fusiles modernos con mira telescópica infrarroja para las operaciones nocturnas. Estas armas tienen un costo aproximado de 3.500 millones de pesos.
Para tener una idea de las cantidades de dinero que se han invertido en armamento basta con tomar un solo ejemplo. Cada vez que se programa un operativo en el valle del Aburrá se emplean pelotones de 120 hombres que tienen a su disposición un arsenal que incluye metralletas M-60, pistolas, morteros y cerea de 24 mil halas. El solo costo de las municiones alcanza los 20 millones de pesos.
Los operativos se hacen por tierra y aire. Para el desplazamiento de la tropa se utilizan 15 camiones, que en sólo combustible gastan al mes un promedio de tres millones de pesos. Los allanamientos son apoyados por cinco helicópteros que vuelan un promedio de seis horas diarias. Quizá este es uno de los rublos de mayor gasto, pùes su costo total asciende aproximadamente a 1.200 millones de pesos.
En cuanto a la nómina, los gastos no son muy elevados. Pues para cancelar el sueldo de los dos mil hombres del Bloque de Búsqueda se tiene un presupuesto mensual de 100 millones de pesos. Otro gasto de consideración ha sido la cancelación de recompensas a los delatores. Se calcula que cerca de 800 milloncs de pesos han sido destinados al pago de informantes, cuyos datos permitieron culminar con éxito operativos donde fueron dados de baja los más importantes cabecillas de las bandas de sicarios al servicio de la organización del cartel de Medellín. Entre ellos el Palomo, Tyson y el Chopo.
Pero la inversión en el Bloque no ha sido en vano. A pesar de que el objetivo principal -la captura de Pablo Escobar- no se ha cumplido, si se puede decir que la estructura del cartel de Medellín fue prácticamente desarticulada. Las cifras así lo demuestran: los 12 mil allanamientos que se han hecho en Antioquia han permitido la captura de 1.440 persollas vinculadas directamente con el cartel. Se han decomisado siete toneladas dee dinamita, dos toneladas de metralla, 300 equipos de comunicaciones, han sido dados de baja 145 sicarios y se han congelado cuentas bancarias por mil millones de pesos.