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Vicepresidente reclama por “infiltración” en su esquema de seguridad

Mientras Angelino Garzón participaba en una jornada de diálogo con organizaciones obreras del sector azucarero del Valle, fue detenido un líder sindical en el recinto. El hecho desató el disgusto del dignatario y pidió explicaciones.

24 de septiembre de 2011

Durante un foro que tuvo lugar en Cali en el que el vicepresidente Angelino Garzón se reunió con organizaciones sindicales del sector azucarero del Valle, la captura del sindicalista José Valencia desató los reclamos del dignatario, que les pidió explicaciones a los organismos de seguridad.
 
Garzón, antiguo líder sindical, expresó su repudio al hecho y expresó que se trató de “un hecho que le hicieron no solo a los trabajadores sino al Estado. A la credibilidad de la población en el Estado”.
 
En declaraciones a medios, el vicepresidente de la República dejó entrever su enojo y manifestó que él conoce a Valencia. “Es un trabajador del Ingenio Manuelita, está siendo investigado por una protesta en 2008 que no ha concluido, incluso un juez de garantías lo dejó en libertad hace 2 años”.
 
En cuanto se enteró de la detención, Garzón llamó inmediatamente al director del DAS, Felipe Muñoz, para exigirle explicaciones sobre el proceder de las autoridades, así como también señaló que se las pediría a la Policía.
 
Públicamente, el vicepresidente cuestionó una supuesta “infiltración” de agentes de seguridad que tomaron fotografías de los asistentes al encuentro, lo que –según dijo- lo llevaría a “revisar” tanto su esquema de seguridad como el de los diálogos sociales que él impulsa.
 
“No se puede entrar con propósitos de inteligencia militar y de policía, se tiene que entrar con el propósito de consolidar la confianza de la población en el Estado”, dijo a la vez que añadió que “de ahora en adelante cualquier servidor público se tiene que identificar”.
 
Así mismo, reivindicó el derecho a la protesta social al manifestar que “los trabajadores tienen todo el derecho a reclamar, a criticar al Gobierno, a denunciar atropellos”.
 
“De verdad no entiendo este hecho, que se convirtió en una verdadera provocación contra los trabajadores”, puntualizó un ofuscado vicepresidente, que levantó la sesión como señal de protesta.