"Yo me tiré la fiesta": director de la DIAN

El director de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, DIAN, Ricardo Ortega, dice que se “tiró la fiesta” que los corruptos tenían en la entidad y que le costó al país un billón de pesos, desfalco que podría ser mayor.

Aunque Néstor Díaz, exdirector de la entidad, confirmó este jueves que el gobierno anterior conocía sobre el caso de corrupción, Ortega afirma que bajo su administración el problema comenzó a hacerse evidente cuando ordenó hacer cambios en algunas direcciones de la DIAN en Bogotá.
 
En entrevista con Semana.com, el funcionario narra cómo detectaron las irregularidades cometidas por estas organizaciones criminales, en complicidad con funcionarios y exfuncionarios de la DIAN, que realizaban exportaciones ficticias, sustentadas en empresas y documentos falsos, para cobrar la devolución del IVA ante la dirección de impuestos.
 
Semana.com: ¿Cuándo escuchó por primera que podía existir este tipo de prácticas de exportaciones ficticias?

Juan Ricardo Ortega: No fue inmediatamente a mi llegada (hace seis meses). Sucedió tiempo después de que se dieran algunos procesos de selección que derivaron en cambios en algunos cargos directivos de la DIAN en Bogotá. Las personas que llegaron empezaron a decirme que el tema era complicado y que las cuentas no daban por ninguna parte.

Semana.com: ¿Con quién comenzó usted la investigación?

J.R.O.: Con los funcionarios de aquí, con los que manejaban el tema. Fue una averiguación que se hizo con la gente que sabe y es confiable. Entonces escuchando diferentes versiones, íbamos tratando de entender qué era el problema, qué tan grande era y quiénes eran los responsables. Es un tema que la gente de aquí adentro lo conocía muy bien. Y muy bien, es muy bien.

Semana.com: ¿En qué momento dio a conocer el tema al alto gobierno?

J.R.O.: Cuando tuve suficientes elementos. Lo indicios eran muy preocupantes. El ministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, fue el primero que me puso en contacto con personas que pudieran hacer ese tipo de investigaciones.

Después, cuando fuimos a la OCDE, donde se presentó todo lo relacionado con investigaciones criminales en Europa, hablamos con el presidente Santos y le dijimos que se estaba presentando una situación criminal muy complicada y que se estaba perdiendo mucho dinero.

El presidente dijo que después del caso de corrupción en salud, podíamos contar con una gente que podía colaborar y así lo hizo. Con esas personas logramos levantar la información pertinente para procesar a las personas.

Semana.com: ¿Cuánto tiempo pasó desde el momento en que usted comenzó a sospechar hasta cuando el presidente lo hizo público?

J.R.O.: Es un tiempo largo. Desde diciembre, probablemente. El presidente puso una gente muy buena, es impresionante la capacidad que tienen.

Semana.com: ¿Cómo funciona la devolución del IVA para los exportadores?

J.R.O.: Si se exporta a Venezuela un producto, por ejemplo zapatos, lo primero que se hace es pagar el 10 por ciento de arancel, más el porcentaje del IVA que tenga ese país. Esa es una barrera de todos los productos.

Para el caso del exportador, éste paga y paga y nunca cobra (el IVA que ha pagado en Colombia). Tuvo que pagar IVA por todos los insumos que usó para fabricar el zapato: por el cuero, la madera y las puntillas. Entonces se le devuelva por el IVA que pagó.

Semana.com: ¿Qué métodos existen para poder mejorar esa fiscalización?

J.R.O.: Estamos buscando los sistemas de reporte de información. Como usted ha oído, estamos tramitando el decreto que busca reformar el RUT que busca tener más información y certidumbre de que la gente sea gente de verdad, El problema es que si el país permite que existan empresas de papel, pues es muy complicado perseguir empresas de papel.

Semana.com: Está relacionado con la alerta que hacen los notarios, de que en Colombia es demasiado fácil configurar una sociedad...

J.R.O.: Eso es lo que nosotros hemos venido advirtiendo todo este tiempo. Aquí hay un gran problema y es que permitan el registro de cosas donde nunca se verifica que exista la dirección, que existan las personas, que las personas sí sean las personas, que den pruebas de que tienen actividades reales, que tengan relaciones con otras personas que también sean observables y verificables, que tengan cuentas bancarias, que tengan negocios, que paguen servicios públicos. Si no se verifica eso, ¿usted cómo sabe que alguien es alguien?

Semana.com: ¿En este momento no se verifica?

J.R.O.: No, no se verifica. Algunas entidades no están haciendo su tarea, ese es un tema de fondo. ¿Quién es el que da el registro? Cuando usted nace, a usted le cogen sus pies y plasman sus huellas en un papel; hacen mil cosas para que digan que usted existió, además, la gente sabe que usted existió porque sus paticas tienen una huella distinta a las demás huellas.

Ahora mire los trámites de estas entidades, a ver en donde le ponen las huellas a alguien. Mire todos esos edificios muy bonitos pero no tienen la más berraca idea de quién está detrás de todo lo que registran.

Semana.com: ¿Debe haber un trabajo articulado entre entidades como las Cámaras de Comercio, la DIAN, Registraduría, entre otras?

Sí, pero nosotros estamos haciendo lo nuestro. Si los otros no hacen la tarea yo voy a tratar de hacer la tarea.

Semana.com: ¿Cómo va a hacer su tarea?

J.R.O.: Mire las reformas del RUT. En este país no va a poder haber un importador o exportador que no tenga cuentas bancarias, porque los bancos tienden a saber y verificar la información, ¿no?

Habrá una serie de exigencias: tendrán que demostrar la dirección y mostrar las escrituras. Sí, va a ser más cansón el trámite, pero es que en todas partes uno debe demostrar quién es y no hacer un trámite ‘light’. Tal vez se empiecen a solicitar las huellas digitales para cotejarlas con las de la Registraduría. Estamos en el proceso de afinar todo el trámite para verificar que la gente sí sea gente.

Semana.com: ¿Qué tan avanzado está el decreto que reforma el RUT?

J.R.O.: Es un decreto que está en Presidencia. Falta que lo firmen. Puede salir cualquiera de estos días.

Semana.com: ¿Cómo lograron establecer que el modus operandi de esta organización es similar al de las grandes mafias europeas?

J.R.O.: A mí me llevaron con las cabezas de investigación criminal, como la de Inglaterra, que la verdad es una persona increíblemente competente y pues se presentó el caso. Nos dijo que teníamos un lío fenomenal y que no sabía en qué estaba metido. Fue cuando le dijimos al presidente.

Semana.com: ¿Es probable que existan personas extranjeras involucradas en este caso de corrupción?

J.R.O.: Es muy probable. La globalización globalizó todo lo bueno pero también todo lo malo. Los hampones traspasan las fronteras. Hay que mirar los artículos de prensa internacional sobre la mafia italiana en Colombia. Esto es un negocio muy grande.

Semana.com: ¿Cómo están trabajando con las autoridades internacionales para establecer si hay gente de otros países involucrada?

J.R.O.: Yo no tengo esa potestad. La gente de la policía judicial hace esa tarea. A mí no me cuentan nada.
Semana.com: ¿Cómo era el proceso que se utilizaba para cobrar ilegalmente el IVA?

J.R.O.: Un ejemplo hipotético: el caso de una comercializadora en Cúcuta que exporta cueros que ya han sido curtidos, cortados y arreglados, es decir ya procesados, a Venezuela. Dicen que compran esos cueros en otra empresa, por un menor valor, casi sin utilidad, y sobre ese precio, gastaron en cuero, químicos, máquinas, cuchillos y por todo eso pagaron IVA.

Luego declaran ante la DIAN esa operación y con un certificado de proveedor proceden a reclamar una devolución del IVA que pagaron en los insumos que supuestamente emplearon. Pese a que era una operación irregular, la DIAN tenía que regresarles el valor de ese impuesto porque estaba soportado en facturas (que eran falsas) de los presuntos proveedores

Semana.com: ¿Qué tipo de personal necesitaban la organización criminal para hacer estas operaciones?

J.R.O.: Solamente abogados que conocieran de los procesos de la DIAN.

Semana.com: ¿Conocía o sabía quién era Blanca Jazmin Becerra, que sería el ‘cerebro’ de la banda criminal?

J.R.O.: Yo no conozco criminales, no conocía gente de la DIAN. La vi por primera vez en televisión, este jueves. 

Semana.com: ¿Cómo está la situación con los empleados de la DIAN?

J.R.O.: Es muy difícil... Yo me tiré la fiesta. Hay muchos conflictos. La mayoría de la gente que es correcta y honesta está dolida porque su buen nombre se pierde. A veces los insultan y es gente que trabaja durísimo y a la que les toca aguantarse lo que unos bellacos hacen y de paso desprestigian a todos los que no lo hacen. Es muy doloroso.

A mí me ha tocado hablar con mi gente para explicarles y calmarlos, diciéndoles que nosotros hemos cumplido. Esto nunca se hubiera descubierto si no fuera por funcionarios honestos de la DIAN.

Semana.com: Usted dijo que esta organización, además de crear empresas falsas, también usaban el Registor Único Tributario (RUT) de empresas inactivas. ¿Cómo sabían ellos qué empresas utilizar? Queda la sensación de que no hay seguridad de la información de los contribuyentes.

J.R.O.: Hubo funcionarios inescrupulosos que permitieron que eso sucediera y es lo que estamos garantizar que no va a suceder. El ministro montó un equipo élite de ingenieros que va a luchar por garantizar absoluta confidencialidad en la información de los contribuyentes y que cualquier funcionario de la DIAN que se meta a mirar lo que no le toca, va ser severamente sancionado. Probablemente en la reforma al Estado se genere una institución para vigilar ese proceso de la confidencialidad de la información de los contribuyentes.

Semana.com: ¿Cuál cree que es el impacto económico de este hecho en el país?

J.R.O.: El impacto es grande pero estamos luchando por recuperar la moral de la entidad y eso es lo importante. Además el recaudo esta disparado y eso demuestra que los funcionarios están haciendo las cosas bien. Nunca el recaudo ha crecido lo que está creciendo este año y eso demuestra que estamos rodeados de gente honesta que tienen la voluntad de hacer que se cumplan las obligaciones tributarias.

Semana.com: ¿Se va a poder recuperar ese billón de pesos?

J.R.O.: Pues se garantiza que no se pierda más. Eso es lo importante.