Home

Nación

Artículo

Alcaldía de Yopal | Foto: Los habitantes de Yopal llevan dos años sin recibir agua a través del acueducto municipal. En esta imagen suministrada por la alcaldía, el mandatario local, Willian Celemín, distribuye el líquido a lo

POLÉMICA

Yopal: el acueducto que enfrenta a dos alcaldes

Willman Celemín y su antecesora, Fernanda Salcedo, se acusan mutuamente. Lo cierto es que no hay agua.

19 de marzo de 2013

La tercera protesta que vivió Yopal en el último año y medio por la falta de agua reveló las posiciones enfrentadas del actual alcalde, Willman Celemín, y de la alcaldesa anterior, Lilian Fernanda Salcedo. Mientras que el primero 'pone el retrovisor' y afirma que la anterior administración no dejó dineros para el acueducto, la exmandataria explica que, además de sí haber realizado obras al respecto, al fin de su periodo había un superávit de 53.000 millones de pesos.

Estas diferencias se conocieron después de las manifestaciones que vivió Yopal en estos días por la falta de agua potable que enfrentan los cerca de 170.000 habitantes. La crisis comenzó el 29 de mayo del 2011, cuando falló la planta potabilizadora que tenían.

Desde entonces, no se ha suministrado agua apta para consumo humano de manera constante y la solución temporal han sido los carros cisterna, a pesar de que Casanare es el departamento del país que tiene más dinero en el país para su plan de aguas.

Así lo explicó el ministro Germán Vargas Lleras para diferentes medios de comunicación, luego de asegurar que este departamento no formula un plan de inversión para agua potable hace tres años y que tiene un presupuesto no utilizado de 170.000 millones de pesos para todo lo relacionado con el agua.

El argumento que esgrime el alcalde de Yopal es que esa plata, que correspondía a los Planes Departamentales de Agua, se maneja mediante una fiducia que exige el visto bueno del Gobierno para retirar cualquier monto. “Por eso es que yo digo que hay mucha tramitología del Gobierno Nacional para ir autorizando los recursos que hay en las entidades”, afirmó.

Además, el mandatario local explica que otra de las causas de la actual crisis del acueducto es que la Alcaldía anterior no dejó ningún proyecto empezado.

“Cuando yo llegué a la Alcaldía no encontré nada. Durante el gobierno anterior, se hizo una adición de 26.000 millones de pesos al presupuesto de recursos propios de Yopal y ni un solo peso fue destinado para el acueducto”, explicó el actual alcalde de la capital de Casanare.

Asimismo, se defendió argumentando que durante su Alcaldía ha hecho lo que ha podido. Celemín afirma que como alcalde comenzó el proyecto para perforar cuatro pozos profundos y verificar si servía esa agua. En la planeación del proyecto tardó casi tres meses, en la licitación otros cuatro y en la ejecución ocho meses.

“Hace más de un año el Fondo de Adaptación ofreció 5.000 millones de pesos para el agua si la Gobernación de Casanare ponía 40.000 millones y la Alcaldía de Yopal otros 8.000 millones. Ni la Asamblea ni el Concejo lo autorizó, entonces no se hizo nada. Además, si la alcaldesa hubiera querido, habría dejado algo de los 26.000 millones para el acueducto”, expresó Celemín.

El superávit que no aparece

En respuesta, Lilian Fernanda Salcedo, quien fue alcaldesa de Yopal entre el 2008 y el 2011, aseguró que efectivamente esta cofinanciación sí se pactó pero que el Concejo y la Asamblea no la autorizaron.

“Yo envié tres peticiones al Concejo para la aprobación de 7.800 millones de pesos para el problema del acueducto y tres veces la negaron. A mí no me consta pero lo que se decía en ese momento era que quienes hoy son el gobernador de Casanare y alcalde Yopal estaban presionando para que esos recursos les quedaran a ellos”, esgrime Salcedo.

La exalcaldesa asegura que desde el primero de junio del 2011 hasta su entrega del mandato en enero del 2012 tuvo diferentes reuniones con el Ministerio de Ambiente, el Viceministerio de Agua, el Fondo de Adaptación y la Gobernación de Casanare para trabajar en la factibilidad, el diseño y la construcción del acueducto.

“Durante el empalme, puse como tema principal la reanudación de la gestión que se había hecho con el Fondo de Adaptación para la construcción del acueducto pero el actual alcalde nunca les respondió. El Gobierno accedió pero la Alcaldía actual se negó a aceptar recursos porque supuestamente ellos los tenían”, explicó Salcedo.

Respecto a los 26.000 millones, la exmandataria afirma que la cifra está siendo maquillada por el alcalde Celemín. Según Salcedo, el Concejo le aprobó un presupuesto en el primer semestre del 2011 que fue invertido en acueducto, alcantarillado e infraestructura educativa.

Pero para el segundo semestre del mismo año, el Concejo no aprobó ninguna adición al presupuesto a pesar de la crisis con la planta de aguas que sucedió el 29 de mayo. La exalcaldesa explicó que de los 53.500 millones de pesos de superávit dejó al finalizar su mandato, 23.000 millones se podían utilizar de manera directa pero que no sabe qué hizo el actual mandatario con esos recursos.

“Nosotros sí asumimos la emergencia y no tuvimos una emergencia sanitaria como sí sucedió en esta crisis, donde más de 4.000 niños tuvieron enfermedad diarreica aguda. Es una canallada lo que vienen haciendo con Yopal”, dijo Salcedo.

Actualmente, en la capital del Casanare se está planeando una planta modular, de una capacidad de 300 litros de agua por segundo, con un presupuesto de 8.000 millones de pesos, dados por la Alcaldía. Sin embargo, la institución está a la espera de la entrega de los diseños para su construcción que, según el pacto logrado este lunes, deberán demorar seis meses como máximo.

Una vez se tengan los diseños, se deberá pasar al Viceministerio del Agua para que ellos hagan la licitación pública del contratista. De ahí, deberán esperar entre uno o dos años a que la planta esté construida, según las expectativas del alcalde de Yopal.

Antes de que se termine esta planta, se espera construir un acueducto alterno en menos de cuatro meses. Mientras todos estos proyectos se ejecutan, los miles de habitantes de la capital del Casanare tendrán que subsistir con el agua que surten los carros tanques.