En marcha la campaña ‘Yo no pago, yo denuncio’.
En marcha la campaña ‘Yo no pago, yo denuncio’. | Foto: Prensa Alcaldía Bucaramanga

NACIÓN

¿Cómo evitar ser extorsionado en Bucaramanga según el Gaula de la Policía?

En la ciudad han sido denunciados 14 hechos de extorsión.

28 de mayo de 2022

La extorsión es un delito que busca obtener de las víctimas un beneficio económico bajo la amenaza de ejercer violencia contra la persona, sus familiares o sus bienes. Muchas extorsiones son efectuadas por personas cercanas, familiares, trabajadores o enemigos de la víctima; por ello las autoridades administrativas de Bucaramanga y las fuerzas militares unieron esfuerzos para llevarles un mensaje a empresarios, comerciantes y a la comunidad en general de cómo prevenir este delito.

A través de la campaña ‘Yo no pago, yo denuncio’, se busca que los bumangueses no caigan en las trampas de los extorsionistas, quienes emplean diferentes modalidades para lograr el ‘objetivo’ de apropiarse de millonarias sumas de dinero.

“En diferentes sectores hemos estado presentes con nuestros Gestores de Convivencia, el Gaula Militar y de Policía dialogando con los comerciantes, sensibilizándolos sobre este delito para que, bajo ningún motivo, caigan en las pretensiones de los delincuentes y terminan cediendo ante una extorsión”, explicó Melissa Franco, secretaria del Interior de Bucaramanga.

Estas jornadas pedagógicas se desarrollan en sectores como el Centro Comercial Cacique, Sanandresito La Isla, Sanandresito Centro, Plaza Guarín, Plaza Kennedy, Plaza Central, entre otros lugares de alta concurrencia.

La extorsión, según las autoridades, es una de las prácticas delictivas que más ha afectado a los colombianos en su integridad, tranquilidad y finanzas, toda vez que en muchas ocasiones ocurre sin que nadie más que la víctima se entere, ya que esta por miedo no denuncia y procede a entregar el dinero exigido.

De acuerdo con el Gaula, en los primeros cuatro meses de este año se recibieron 14 denuncias por extorsión en la Ciudad Bonita, cuatro casos menos que durante el mismo período del año anterior. Aunque la cifra se ha reducido, las autoridades hacen un llamado a las víctimas de este delito a no dudar en denunciar a través de la línea 145 del Gaula Militar o con el 165 del Gaula de la Policía.

Modalidades de extorsión

• Mensajes de falsos premios de empresas reconocidas. Personas inescrupulosas realizan solicitud de recargas parar hacer efectivo el supuesto premio. Antes de abrir el mensaje observe cuál es la dirección completa del remitente. No conteste formularios en línea ni suministre información financiera.

Devolución de bienes o hurto de motos. Delincuentes que hurtan pertenencias de la víctima en la mayoría de ocasiones de forma violenta o aprovechando un descuido. Posteriormente, a través de redes sociales contactan a los dueños y mediante intimidaciones les exigen millonarias sumas de dinero para recuperar los vehículos o bienes.

Extorsión de menor cuantía. Delincuentes contactan a su víctima, iniciando exigencias de pago mínimas, las cuales con el paso del tiempo se convierten en rentas de pago. En estos casos lo recomendable es instalar cámaras de seguridad en lugares de trabajo y/o entornos familiares. Mantener contacto constante con la Policía del cuadrante.

Extorsión ‘tío tío’. Los delincuentes tienen un libreto y cada integrante asume un papel antes de hacer una llamada a la víctima. Uno actúa como policía o investigador del CTI para advertir a la víctima que acabaron de capturar a su sobrino. Luego, con la magia de la actuación, otro asume el papel más importante: el sobrino. El actor y delincuente le ruega a su tío por ayuda, advierte que fue capturado, que se lo van a llevar para una estación de policía y para evitarlo los uniformados exigen un pago, un soborno. Así los delincuentes no solo logran que las víctimas se convenzan de que su familiar está en problemas, sino que entregan el dinero a través de empresas de giros.

Extorsión carcelaria. Conociendo información de las víctimas, los delincuentes llaman aludiendo ser integrantes de grupos criminales, exigiendo pagos de dineros a través de empresas de giros.