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Mimebors de una pandilla en Medellín durante una desmovilización en 2007. | Foto: AP-

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Gobierno dice que está escaso de plata para seguridad en las ciudades

Gobernadores y alcaldes de todo el país reclamaron del gobierno más recursos para combatir la inseguridad urbana, durante una reunión en Bogotá.

30 de septiembre de 2009

Los alcances y resultados de la Política de Seguridad Democrática en las ciudades fueron analizados este miércoles por alcaldes, gobernadores y comandantes de policía de todo el país. El balance, por lo menos en términos fiscales, no es muy alentador.

En el caso de Bogotá, por ejemplo, el alcalde Samuel Moreno dijo que el pie de fuerza disponible en la ciudad no es suficiente. “Bogotá cuenta con 17.000 efectivos, lo que significa un policía por cada 400 habitantes; aspiramos a recibir de aquí a diciembre 2.000 nuevos uniformados, que sigue siendo un promedio muy bajo”, dijo Moreno, quien añadió que en la ciudad hay 31 zonas críticas y se invertirán 1.2 billones de pesos para fortalecer la fuerza pública.

El Presidente Alvaro Uribe, resumió la situación que se vive en los municipios y ciudades, explicando que aún hay mucho por hacer pero que falta plata para ello.  “No estamos en condiciones fiscales para atender todos los requerimientos de todas las ciudades”, dijo Uribe lo cual deja en una encrucijada a varios mandatarios locales, ya que dependen todavía muchísimo de la ayuda central para combatir temas como los grupos armados ilegales.
 
Al respecto, los dirigentes locales le solicitaron al gobierno nacional que destine parte de los recursos del impuesto al patrimonio, el cual financia parte de la política de Seguridad Democrática, para desarrollar un componente de seguridad ciudadana.

"Nosotros hemos dicho que es muy importante que parte de este impuesto al patrimonio se dirija a fortalecer todas las inversiones que estamos haciendo en seguridad", resaltó Moreno.

Sobre el panorama nacional de seguridad, el ministro de Defensa, Gabriel Silva, destacó en este llamado cónclave de seguridad cifras como la reducción del homicidio en 44 por ciento y del 88 por ciento en casos de secuestro en los últimos años. “En aquellos delitos que atentan contra el ciudadano del común las disminuciones también han sido muy importantes. Sólo en el 2009, el hurto común ha disminuido el 12 por ciento”, aseguró el ministro.

“Estos indicadores cuantitativos no reflejan esos dividendos cualitativos que son realmente los intangibles que buscamos en esta política. Nos referimos, por ejemplo, a la defensa de la vida. Cada homicidio evitado es una vida que prospera, que tiene futuro, una vida que contribuye a los colombianos”, dijo el minsitro Silva.

Durante todo el encuentro también se habló sobre las deficiencias en el proceso de judicialización, las fuentes de financiación para los fondos de convivencia y seguridad, el impacto de los menores y adolescentes en la criminalidad, las políticas de desarme y el microtráfico de drogas.