Home

Seguridad

Artículo

Jaime Fernando Ovalle había sido capturado el pasado 24 de septiembre, señalado de concierto para delinquir.

NACIÓN

Murió Fernando Ovalle, pieza clave de las ‘chuzadas’ del DAS

Un cáncer terminal que le habían diagnosticado el pasado diciembre acabó con la vida del coordinador del grupo de inteligencia del DAS conocido como G-3 que realizó seguimientos ilegales a políticos, militares, ONG y periodistas.

28 de enero de 2010

Jaime Fernando Ovalle Olaz, uno de los testigos más importantes en las investigaciones que la Fiscalía adelanta por los seguimientos ilegales que hizo el DAS, falleció este jueves luego de que el pasado diciembre un cuerpo médico de Medicina Legal certificara que el ex director del G-3, capturado el pasado 24 de septiembre, padecía un cárcel terminal. Los médicos le habían dado dos meses de vida.

Ovalle, de 54 años, era el coordinador del polémico grupo de inteligencia que siguió ilícitamente a miembros de la oposición, de ONG y periodistas. Pero es recordado especialmente porque como coordinador del grupo de Asuntos de Inteligencia Política, le envió a los directores seccionales este memorando: “De manera atenta solicito su colaboración en el sentido de enviar información disponible, relacionada con las actividades de Gustavo Francisco Petro Urrego, senador del Polo Democrático Alternativo, teniendo en cuenta: Información privilegiada de vínculos o nexos con organizaciones al margen de la ley. Contactos con personas que se presenten como testigos para declarar contra el Gobierno”. La misiva tenía carácter de reservado con fecha de agosto 29 de 2008, y fue denunciada por el propio senador en un debate en el Congreso. (Ver Artículo)

Debido a su deteriorado estado de salud, el pasado 19 enero llegó una boleta de suspensión de la detención preventiva a la cárcel La Picota de Bogotá, donde estaba recluido en el pabellón de funcionarios públicos. De inmediato, fue trasladado a la Escuela de Entrenamiento de Aquiminda del DAS, en el municipio de Cota, donde al parecer murió este jueves.

Este funcionario, que inició su trabajo en 2004 cuando Jorge Noguera era el director del organismo, estaba señalado por la Fiscalía de concierto para delinquir ya que, por recomendación del asesor Miguel de Narváez, coordinó el grupo G-3 que tenía la capacidad para interceptar teléfonos, correos electrónicos y tenía a su disposición funcionarios de Inteligencia y Contrainteligencia que se encargaban de hacer seguimientos a los llamados “blancos determinados”, es decir integrantes de ONG y personajes considerados de izquierda.

“Las misiones de trabajo del G-3 tienen como objetivo seguimientos a organizaciones o personas de tendencia opositora frente a las políticas gubernamentales con el fin de restringir o neutralizar sus acciones", dijo en su momento a SEMANA uno de los apartes de los memorandos secretos en los que se justifica la creación de ese grupo.

El grupo que coordinó Ovalle, que no existía oficialmente dentro del DAS, logró ‘chuzar’ al vicepresidente Francisco Santos; a Andrés Peñate cuando era viceministro de Defensa. Al general Óscar Naranjo, cuando era director de la Dijín; al ex presidente César Gaviria; al hoy candidato presidencial Rafael Pardo; al ex fiscal general Alfonso Gómez Méndez, y hasta miembros de la Iglesia como monseñor Nel Beltrán.

Varios magistrados de la Corte Constitucional también fueron espiados por el organismo de seguridad, en momentos en los que ese tribunal definía el tema de la primera reelección presidencial. Entre ellos estaban Clara Inés Vargas y Rodrigo Escobar. También fueron ‘chuzados’ periodistas de RCN, Caracol, CM&, Todelar y la revista SEMANA.

Jaime Fernando Ovalle, quien salió de la entidad hace dos años cuando María del Pilar Hurtado era la directora del DAS, había aceptado los cargos y era uno de los funcionarios clave dentro de las investigaciones de la Fiscalía que había decidido colaborar con la justicia.