Home

Noticias

Artículo

industria editorial

Crisis, misterios y fraudes fiscales: el castillo de naipes de Malpaso Ediciones

Por: RevistaArcadia.com

Con la detención del empresario mexicano Bernardo Domínguez Cerceres en España el pasado jueves 27 de julio, se reabrieron una serie de polémicas alrededor de su editorial Malpaso desde el principio.

La semana pasada, la industria editorial mexicana se vio sacudida por un nuevo episodio relacionado con el magnate mexicano Bernardo Domínguez Cereceres, dueño del grupo editorial Malpaso, que desde hace años está dando de qué hablar por polémicas relacionadas con la dudosa proveniencia de su multimillonaria fortuna. El pasado jueves 27 de julio, Domínguez fue detenido en España. A pesar de que no fue encarcelado, un juez le retuvo su pasaporte y le prohibió la salida del país hasta que no fuera aclarada su situación, relacionada con la familia Pujol en Barcelona. La justicia de ese país sospecha que el adinerado empresario estaría moviendo sus cartas para esconder una fortuna que supera los 25 millones de euros para la familia Pujol; específicamente para Jordi Pujol Ferrusola.

En 1999, Domínguez ya había sido encarcelado por defraudación fiscal e investigado por la Procuraduría General de la República de México por los delitos de fraude procesal y abuso de confianza. Sin embargo, y a pesar de ello, su presencia e influencia en la industria editorial se siguió ensanchando y culminó en creación de Malpaso Ediciones, el grupo editorial de cuyas acciones es dueño desde 2013. Desde su lanzamiento, como informó el diario mexicano Milenio, para ciertas cabezas del sector editorial era inexplicable la fortuna que Domínguez había amasado y la procedencia del dinero para el sustento de Malpaso era poco clara: eran épocas de crisis económica en España, México y el mundo y, para la opinión pública mexicana, era difícil explicarse cómo podía la editorial sostener sus publicaciones y los diversos eventos que protagonizaba.

Una historia de escándalos

Antes del episodio, la editorial se había visto envuelta en distintos ires y venires; y no solo la editorial, sino una librería y un restaurante homónimos que, dice la justicia de ese país, eran usados también por el empresario para los fraudes fiscales relacionados con los Pujol. Los empleados de la editorial, incluso, se han quejado de retrasos en los pagos, mientras que algunos han llegado a ser retirados de la empresa. Pero son varias las aristas: mientras algunos afirman que las nóminas tienen retrasos de hasta dos meses, otros aseguran que su salida de la empresa está limpia y que no se les debe nada. ARCADIA intentó ponerse en contacto con la editorial, pero no hubo respuesta.

Pero las complicaciones no acaban con las declaraciones de los empleados directos de la editorial: la queja principal viene de autores y traductores. Por un lado, publicaciones exitosas como Hijos del fútbol de Galder Reguera (3000 ejemplares) no han sido remuneradas. Por otro lado, obras de traducción como las de Laura Fernández o Ana Flecha también han sido sujetas a demoras en los pagos. En algunos de los casos se han presentado acciones legales que, en el momento, han ayudado al pago parcial del trabajo, pero no es un caso generalizado.

En este castillo de cartas, que se ha ido debilitando, cada vez con consecuencias más visibles, también se ha intentado arreglar con programas de inyección de dinero por parte del conglomerado de construcción DSC, del que Domínguez Cereceres es dueño. No obstante, la detención del empresario mexicano en España deja mucho que pensar con respecto al futuro de la editorial.

Los Pujol y el misterio fiscal

El misterio que atañe esta editorial se expande hasta sus inicios y sus relaciones con los Pujol. Nadie sabía cómo era posible que una editorial nueva pudiera costear eventos, una librería, un restaurante, adelantos jugosos para escritores noveles e, incluso, la adquisición de los derechos en español de obras importantísimas como la del músico y Nobel de literatura Bob Dylan.

En cuanto a los Pujol, la relación inició con unos préstamos fracasados que hizo el padre de Domínguez Cereceres a Pujol Ferrusola para la construcción de varios inmuebles en México en los años 2005 y 2007. La deuda tuvo que pagarse por medios alternos, pues el negocio no funcionó. Sin embargo, Jordi Pujol Ferrusola siguió visitando a Domínguez Cerceres en un contexto personal y asistió a varios eventos organizados por Malpaso.

Según el diario El Confidencial, el editor Malcolm Otero Barral afirmó que Malpaso no tenía relación con Jordi Pujol o la corrupción. Por otro lado, la detención del empresario mexicano terminó en libertad con las medidas que ya fueron mencionadas (prohibición de abandonar el país sin permiso judicial y retención del pasaporte). No obstante, hay algo que se puede decir de manera oficial por ahora y es que Domínguez Cereceres está siendo investigado por lavado de dinero, falsedad en documentación y ocultación de bienes.

Los malos pasos que ha dado la editorial en su difusión y sus relaciones parecen estarse aclarando con el pasar del tiempo. Lo que es imposible de prever, sin embargo, es el futuro que le espera a una empresa que desde un principio ha estado rodeada de tanto misterio.

Le puede interesar: Entretenimiento versus ‘línea dura‘: dos miradas sobre la escritura