Francia prohibe símbolos religiosos en los colegios

El gobierno francés busca alejar de las aulas las tensiones entre las minorías musulmana y judía, el sentimiento nazi y otros conflictos interraciales.

La medida fue aprobada el martes por inmensa mayoría en la Asamblea Nacional de Francia, ahora pasa al Senado. Éste último es tan solo un requisito, pues ya se da por sentado que la norma empiece a regir desde septiembre próximo.

Los legisladores aprobaron por 494 votos a favor y 36 en contra la prohibición. Los alumnos que insistan en exhibir esos artículos podrían ser expulsados.

Aunque representa un cambio, algunas encuestas revelan que el 70 por ciento de los franceses están a favor de la medida. Incluso entre las mujeres de la comunidad musulmana de Francia, un 49 por ciento apoya la prohibición, en tanto un 43 por ciento se opone.

Éste último grupo considera discriminatoria la ley. Entre ellos se encuentran líderes mundiales y religiosos como el Papa Juan Pablo II.

Ellos sostienen que la prohibición podría discriminar a los cinco millones de musulmanes de Francia, la mayor comunidad de esa fe en Europa Occidental.

Por su parte, el gobierno insiste que la prohibición no discrimina contra ninguna religión. Sin embargo, algunos ministros han admitido que su principal blanco son los pañuelos de las mujeres musulmanas.

"Lo que está en juego aquí es la clara afirmación de que la escuela pública es un espacio para el aprendizaje y no para la militancia o el proselitismo", dijo a CNN el presidente de la Asamblea, Jean-Louis Debré.

Antes de la votación, el ministro de Educación, Luc Ferry, dijo que Francia ha experimentado "un aumento espectacular de racismo y antisemitismo en los últimos tres años" y que la prohibición debería ayudar a impedir que las clases se dividan "en comunidades religiosas militantes".

La prohibición también incluiría la obligatoriedad de que los alumnos cumplan con el programa oficial y no puedan objetar o saltearse clases por razones religiosas, dijo Ferry. Ésto, ante las quejas recibidas por el Ministerio provenientes de profesores.

Según los docentes, en los últimos años se han presentado problemas con alumnos musulmanes que interrumpen las clases de historia para negar que los nazis hayan matado a judíos; boicotear clases sobre reproducción humana, diciendo que son impúdicas; o negarse a atender clases de educación física.

También han informado de casos de alumnos musulmanes que repiten consignas de tipo antisemita que ven en programas de televisión satelital árabe. Un número cada vez mayor de familias judías está sacando a sus hijos de las escuelas públicas y enviándolos a escuelas privadas judías para evitar su hostigamiento.