Home

Noticias

Artículo

columna del lector

¿Justicialismo latinoamericano?

Martes 17. Una nueva corriente política se abre paso en América latina como rechazo a la pobreza. Columna de Félix Manzur Jattin, lector de SEMANA.COM.

Félix Manzur Jattin
15 de mayo de 2005

Capitalismo, comunismo, socialismo, neoliberalismo, todos estos esquemas han sido ensayados en nuestro continente Americano. Somos hijos adoptivos del hibridismo político planetario. También idiotas útiles de la imaginería , del populismo, del dejar hacer, dejar pasar y de cualquier esquema que a cualquier chambón se le ocurra en estas tierras de sueño e inventos múltiples.

También se inventaron la tercera vía sin construir aun las carreteras para transitarla. Por ello se descarriló el esquema. Latinoamérica sufre hambre, depredación de sus recursos y terror por su futuro. Los camaleones de siempre cambian de piel de acuerdo a la estación.

Comunistas cuando les conviene, socialistas y capitalistas cuando también nos ajusta el esquema a los intereses personalistas. En el viejo mundo era igual. Napoleón fue un parto de la revolución francesa y durante su mandato no solo se auto coronó y proclamo emperador absoluto de Francia y de la Europa desangrada por el, sino que también se le olvidaron los principios de igualdad, libertad y fraternidad.

Hasta nuestro admirado Bolívar quería unificar la gran Colombia como republica bolivariana. Y así ser el primer monarca criollo latinoamericano después de Maximiliano, primer emperador europeo de México por obra y gracia de los millones de pesos de deuda que esa nación indígena contrajo con los del mundo conquistador, hasta que el nativo Juárez lo envió encajonado con su esposa, a la Europa usurera de la banca dominada por la casa Roschaild.

Acabado el dominio español que masacró setenta millones de indígenas en el mayor genocidio de estado jamás visto, y mucho menos declarado como guerra, todo sigue igual. Ahora contemplamos el genocidio sin cuchillos largos, sin balas y metralla.

Llego el genocidio provocado por el hambre y por políticas descorazonadas,. abyectas y arrodilladas a los prestamistas del mundo contemporáneo. El setenta por ciento de los latinoamericanos reciben menos de un dólar diario.

Además, nuestros brillantes economistas, alienados a las políticas de la banca multilateral utilizan, no el azote de las arma, pero si el apriete de las tripas y el estomago de las masas. Los partidos políticos, fieles escuderos de los dietistas de pobres, olvidaron sus principios sociales y ello genero los Chávez, Lulas y Evos Morales. ¿Vendrán más?

Como si fuera pocos nuestros brillantes economistas, Chicagos Boys, expoliadores de Chicanos mortis, no creen en el paternalismo ni el justicialismo de Estado. Ellos prefieren prestarle a los usureros bancarios de Colombia, a través de Fogafin siete millardos de pesos colombianos, o sea casi toda la plata del cuatro por mil a nuestra flamante banca al mísero tres por ciento anual, que prestarles a los de las pymes o microempresarios le dan garrote al quince anual. ¡Vaya paradoja!

Latinoamérica prefiere, ante tanta desfachatez, un Justicialismo de Estado. Por ejemplo, Evo morales en Bolivia dijo que el pueblo no aguanta mas. No quieren guerrillas, ni subversión armada quieren su revolución pacifica y de veraz que lo están consiguiendo. Defienden la soberanía económica y social. Aducen que antes que los extranjeros manejaran los servicios públicos valían las tarifas un cien por ciento menos que las actuales. No quieren que sus riquezas sean robadas descaradamente por los chupanaciones del primer mundo.